martes, 28 de febrero de 2023

Grupo de apoyo para Final Girls de Grady Hendrix

Sinopsis:

En las películas de miedo, las Final Girls son las que han quedado con vida cuando empiezan a pasar los títulos de créditos. Han sobrevivido a la peor noche de su vida, sí, pero… ¿qué sucede luego?
Lynnette Tarkington es una Final Girl, una de esas que sobrevivió a una masacre. Durante más de una década, ha estado reuniéndose con otras cinco Final Girls y con su terapeuta en un grupo de apoyo secreto para mujeres que han sobrevivido a situaciones increíbles, trabajando todas ellas para recuperar su vida.
Entonces, un día, una de ellas parece que llegue tarde a la reunión… hasta que los peores miedos de las demás se hacen realidad: al parecer, alguien conoce la existencia del grupo y está decidido a asesinar a todas sus integrantes, una a una.
La cuestión con las Final Girls es que da igual lo bajas que sean las probabilidades que tienen de sobrevivir, lo oscura que sea la noche o lo afilado que esté el cuchillo, porque nunca, nunca, se rinden.

Opinión:

Esta es la segunda novela que leo de este autor, la primera fue Guía del club de lectura para matar vampiros, y lo cierto es que, aunque esta me ha gustado, me quedo con la anterior.

Lo primero por lo que hay que comenzar es por dar una definición que nos acerque a lo que son las Final Girls. Básicamente son las supervivientes de las películas de miedo; personajes de los años ochenta que actualmente viven obsesionadas con lo que les sucedió cuando eran adolescentes.

El planteamiento es bastante original, se hace un homenaje al cine de cuchilladas de los años 80, el llamado slasher. Estas películas obtuvieron el éxito del público y como consecuencia se rodaron numerosas secuelas de cada una de ellas, por lo que va a ser frecuente encontrar en este libro guiños a títulos como La matanza de Texas, Scream, La noche de Halloween o Viernes 13.
El autor va a emplear los tópicos de ese género y lo adorna con algún toque irónico, convirtiendo a los personajes femeninos de esta novela en las protagonistas reales de los casos en los que se basaron esas películas.

Nos adentramos en la historia de manos de la protagonista, Lynnette, una Final Girl que a la vez va a ser narradora. Esa narración en primera persona nos va a llevar a conocer al resto de compañeras que, como ella, asisten a las sesiones en grupo para superar el trauma. Ya sabéis lo que un narrador en primera persona conlleva, nunca debemos fiarnos al cien por cien de los datos que nos aporta porque su visión siempre será subjetiva y tratará de convencernos de que su versión es la buena.

Las compañeras de Lynnette en el grupo de apoyo van a ser: Marilyn Torres, Adrienne Butler, Dani Shipman, Heather DeLuca y Julia Campbell, y aquí ya habría que señalar que la caracterización elegida para cada una de ellas resulta muy estereotipada, aunque perfecta para cumplir con una finalidad que ahora veréis.
Lynnette tiene un comportamiento que la lleva a la deriva y el resto del grupo no se va a quedar atrás. Todas van a destacar por una actitud desconcertante y exagerada, con ello el autor consigue sin esfuerzo que dudemos de todas ellas por igual y entorpece al mismo tiempo nuestra investigación, impidiendo que nos fijemos en otros posible culpables. 

Los personajes secundarios que van a acompañar a este grupito de mujeres no van a resultar muy relevantes para la trama. Desempeñan una función accesoria, siempre subordinados a las reacciones o acciones de las protagonistas; solo van a complementar.

Y ya termino la reseña hablando del ritmo narrativo que es bastante bueno. El suspense consigue mantenerse a lo largo de toda la novela gracias a algunos pequeños detalles que va añadiendo el autor, aunque eso sí, algunas escenas parecen cogidas con alfileres, dependen demasiado de la casualidad, al igual que también algunas secuencias se tornan demasiado previsibles.

No os voy a decir que sea una novela excepcional. 
Ya he mencionado que me ha gustado, me ha resultado entretenida, e incluso el planteamiento me ha parecido original, eso sí, menos que Guía del club de lectura para matar vampiros en la que se permitía más licencias por el tema paranormal que trataba. 
Quizás en esta hay demasiados tópicos, ya sea a la hora de recrear las escenas, muchas sacadas de películas, o a la hora de construir el perfil de los personajes. 
Sabéis que cada lector abordamos la lectura desde una perspectiva única y creo que en esta novela Grady Hendrix ha bajado un pelín el listón.
Aun así, os lo recomiendo, es una buena opción para desconectar.

3 comentarios:

  1. Hola Susurros, me llama mucho la atención este autor. Me gustaba mucho la de Horröstor, esa que la edición parece un catálogo de Ikea y al final no he conseguido hacerme con ella... También me llaman estas dos, aunque ahora tendré en cuenta, a la hora de leerlas, tus preferencias.
    Un besazo

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    1. Hola Nitocris.
      A mí me ha pasado exactamente igual que a ti, no hay forma de encontrarla.
      Estas dos que he reseñado se dejan leer, son una buena opción para intercalar entre otras lecturas. Muy entretenidas.
      Un besazo.

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  2. Me gusta Grady Hendrix porque tiene un humor muy particular y porque escribe novelas de terror donde lo que da más miedo son las convenciones sociales (en este caso, normalizar que la gente vaya al cine a disfrutar viendo como un hombre mata a mujeres) y los monstruos que origina que no los monstruos tradicionales en sí. Pero reconozco que esta me pareció la más flojita de sus novelas, eso sí, es entretenida, estoy contigo. Besos.

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