Mostrando entradas con la etiqueta Dennis Lehane. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Dennis Lehane. Mostrar todas las entradas

lunes, 20 de febrero de 2023

Mystic river de Dennis Lehane

Sinopsis:

Cuando eran niños, Sean Devine, Jimmy Marcus y Dave Boyle eran amigos. 
Un día, un extraño coche se detuvo en su calle. Uno de los chicos subió al coche, pero los otros dos no lo hicieron. Y sucedió algo terrible, algo que acabó con su amistad para siempre y que les cambió a los tres. 

Veinticinco años más tarde, Devine trabaja de detective para el Departamento de Homicidios, Marcus es un ex convicto que tiene una tienda de barrio y Boyle intenta salvar su matrimonio y mantener sus demonios a raya: demonios que le incitan a hacer cosas terribles.

Opinión:

Hoy os hablo de Dennis Lehane, un autor del que aún no había tenido la oportunidad de leer nada y que, tras esta lectura, os aseguro que vais a ver aparecer por este blog con bastante frecuencia.
Muchas de sus obras han sido llevadas al cine; esta en concreto por Clint Eastwood, destacando en el elenco protagonista actores de gran calidad como Sean Penn, Tim Robbins, Kevin Bacon o Laura Linnev, entre otros.

Lehane nos ofrece en Mystic river una obra que está catalogada como género negro. Nos sitúa en un barrio complicado de los suburbios de Boston, mostrándonos la realidad tal y como la viven sus habitantes y denunciando las injusticias sociales que les llevan a vivir casi como marginados. Un barrio en el que viven atrapados y del que todos sueñan con escapar, pero muy pocos lo logran.

Esta historia por su contenido también podría incluirse dentro de novela dramática, policíaca o thriller, os aseguro que es una narración que no da tregua y que te lleva a imaginar todo el argumento en blanco y negro. A mí me recordaba mucho a la novela de denuncia social.
Como ya sabéis, ese tipo de novelas de realismo crítico suelen surgir tras una profunda crisis y con ellas se pretende mostrar al lector los profundos desequilibrios sociales. En ellas, el autor puede decidir involucrarse de manera explícita o en cambio, como en este caso, realizar un enfoque objetivo, tomando una postura imparcial. 
En Mystic river, Dennis Lehane adopta el papel de autor-cámara, nos muestra todo como si lo estuviese viendo en directo, pero sin intervenir y transcribiendo de forma directa y al desnudo los hechos. 

Con lo primero que nos encontramos es con un narrador en tercera persona. 
Este narrador nos va a echar el lazo con una introducción muy directa y que ocupa los dos primeros capítulos. En ellos nos va a relatar lo sucedido en 1975, cuando Sean, Jimmy y Dave eran tan solo unos niños. En ese momento, uno de ellos será obligado a subir a un coche con unos desconocidos. Este hecho marcará a los tres amigos, porque a partir de ahí su relación se romperá y nunca volverán a ser los mismos.
Tras esos dos capítulos introductorios la trama dará un salto al año 2000 y allí se desarrollará el resto del argumento.

Su forma de narrar, al menos por lo que he visto en esta obra, me ha parecido totalmente absorbente, creando una especie de lazo invisible entre los personajes y el lector.
Me ha encantado no solo el argumento, sino también la sencillez con la que describe temas tan complejos como el dolor, el sentido de la culpa, los remordimientos o los traumas infantiles.

Destaca el profundo perfil psicológico de cada uno de los personajes. 
Todos tienen su demonio particular, se mueven entre luces y sombras, porque desgraciadamente el vecindario, en el que nacieron y se criaron, ha marcado no solo su infancia sino también su vida de adultos.
Dennis Lehane presta tanta atención al comienzo de la obra como al final y en el desarrollo teje una red de mentiras, enredando en ella tanto a los personajes como a los lectores, y sembrando una duda que nos acompañará desde los primeros compases de la lectura.

En resumidas cuentas, una historia brillante, adictiva, que debería ser de lectura imprescindible para los amantes del género negro y criminal; con altas dosis de realismo y de la que creo que no hay necesidad de contar más. Os la recomiendo.