lunes, 14 de marzo de 2022

Vera de Elizabeth von Armin

Sinopsis:

La joven e inocente Lucy Entwhistle acaba de perder a su padre —hasta el momento, su única compañía— cuando conoce por casualidad al viudo Everard Wemyss. Maduro, atento y caballeroso, Wemyss la protege y la guía como solía hacerlo su padre. Cuando pasados unos días le pide matrimonio, Lucy, confundida y desamparada, acepta. Sin embargo, una sombra creciente empaña su felicidad: el fantasma de Vera, la primera esposa de Wemyss, que falleció en extrañas circunstancias.
Inspirado en la propia experiencia de la autora y publicado anónimamente en 1921, este clásico del suspense psicológico, indiscutible precedente de Rebecca, de Daphne du Maurier, explora el lado más inquietante y tenebroso del matrimonio.

Opinión:

Vera, de Elizabeth von Armin, es una obra publicada en 1921. Fue publicada de forma anónima, quizás por el tema controvertido que trataba y por contener una gran carga autobiográfica. Al igual que ocurría en Elizabeth y su jardín alemán, la autora refleja en el texto su desastroso segundo matrimonio.

Lo primero que quiero deciros es que esta historia de Mary Annette Beauchamp, nombre real de la autora, me ha gustado de principio a fin. 
Vera no tiene nada que ver con la anteriormente citada, al menos en lo que se refiere a la forma de escribir, porque en esta se nota una gran evolución en el estilo. Destaca en que tiene una prosa muy cuidada y detallada, buscando en todo momento tocar la fibra sensible del lector.
Lo que sí tienen en común es que ambas entonan un canto a la libertad de la mujer y en contra de la represión que ha sufrido a lo largo del tiempo.

Lucy es una joven que acaba de perder a su padre. El único familiar que le queda es una tía soltera, ya anciana, y en ese momento entra en escena Everard Wemyss
Aprovechándose de la juventud de Lucy, de su falta de experiencia, de ese aislamiento social que sufre por carecer de una familia que vele por sus intereses y/o de la indefensión que produce el duelo, el susodicho toma las riendas de la situación, algo totalmente surrealista, y se introduce en la vida de la joven como elefante en una cacharrería.

La atmósfera asfixiante que consigue recrear la autora invade por completo la narración y es el punto fuerte de esta novela.
Con cada capítulo vamos viendo como Wemyss ejerce un control absoluto sobre Lucy, la protagonista principal, que va desapareciendo bajo su terrible influjo. 
Everard Wemyss es un maltratador, un narcisista patológico que anula al completo la personalidad de la joven desde los primeros compases de la lectura. 
Mientras que él, a base de humillarla, va creciéndose en cada página, Lucy experimenta totalmente lo contrario; el miedo que siente, el deseo de complacer, por evitar cualquier ofensa o enfrentamiento, la va haciendo cada vez más pequeña.

Vera, el personaje que da título a la historia, va a ser como Rebeca en la obra de Daphne du Maurier, y la casa, al igual que sucedía con Marderley, también va a contar con un protagonismo importante a lo largo de sus 335 páginas, ya que será el testigo de todos los sucesos, tanto anteriores como posteriores.

A estos cuatro personajes se suma otro, también muy importante en la trama, la tía Dot, hermana del padre de Lucy.
Este personaje a pesar de ser secundario, es un gran personaje; encantadora, amable y comprensible, pero que se ve abrumada por los acontecimientos y cualquier medida que intente tomar se revierte en su contra por el poder manipulador de Wemyss. 

En los últimos capítulos la trama se intensifica, casi podría decir que se vuelve incómoda para el lector, porque logramos penetrar en la mente enferma y retorcida de Wemyss. 
Esos capítulos son soberbios, no solo por las frases o el modo de actuar de los personajes, sino también por sus silencios. Los lectores hemos sido testigos desde el comienzo de esta tóxica relación, yendo siempre un paso por delante, pero sin poder tomar ninguna medida.

Una novela muy valiente que no dudo en recomendaros.


12 comentarios:

  1. Hola Susurros, la verdad es que es una novela asfixiante desde el principio, y qué razón tienes cuando comentas que Wemyss entra en la vida de Lucy como un elefante en una cacharrería... Lo primero qué pensé es "cómo no se da cuenta de que está importunándola, sin importarle un bledo sus circunstancias..." él solo quería hablar de él... ya ahí se comienza a perfilar su personalidad...
    Me ha gustado mucho compartir la lectura contigo. Mañana sale la mía.
    Un besazo

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    1. Hola Nitocris.
      Ha sido una gran lectura a pesar del tema tan delicado que trata. Lucy necesita a alguien que la guíe en la vida y opta por la peor opción, se deja llevar y manipular, la falta decisión para plantarse. Wemyss es asfixiante, controlador... y Elizabeth von Armin hace una de las mejores descripciones, paso a paso, de lo que son y cómo actúan los maltratadores psicológicos.

      Repito, una gran lectura.
      Un besazo.

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  2. He leído tu reseña muy por encima porque me gustaría leer este libro sin saber nada de la trama, pero creo que tiene todos los ingredientes para que me guste. Veo que tú lo has disfrutado, me alegro, ¡tiene pinta de librazo!
    Besos

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    1. Hola Rosa.
      Ya verás como te gusta. Realmente en la reseña no llego a decir nada de lo que sucede de la trama, intento perfilar el comportamiento de los personajes pero de forma muy superflua. Creo que la sinopsis cuenta más de lo que debería porque profundiza en los primeros capítulos. De todas formas, ya verás como te gusta.
      Besos

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  3. He leído varias reseñas muy similares a la tuya, pero yo me sigo debatiendo entre leerlo o dejarlo pasar. Me recuerda un poco a Rebeca en algunas cosas que cuentas.

    Me quedo con la recomendación, ya veré si al final me hago con él o no.

    Besos!

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    1. Hola NArayani.
      El parecido con Rebeca es mínimo. Yo lo cito en la reseña porque la presencia de Vera va a estar ahí, de fondo en toda la novela, al igual que ocurría con Rebeca, pero ahí acaban las similitudes.
      Besos

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  4. ¡Hola! No lo conocía pero sin duda me llama mucho la atención lo que comentas de como la autora consigue crear esa sensación asfixiante a medida que avanza la historia. Sin duda una lectura a tener en cuenta por el tema que trata, sobre todo teniendo en cuenta la época.

    ¡Nos leemos!

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    1. Hola.
      Si la leéis, ya pasaréis a comentarme. La autora maneja muy bien la situación y así nos lo va transmitiendo. Nos muestra como el maltratador poco a poco va entrando en la vida de la protagonista hasta hacerse con el dominio total.
      Una muy buena lectura.
      Saludos

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  5. Tremenda esta novela. Vengo de casa de Nitocris, que también la ha reseñado, y le decía que Elizabeth von Arnim tiene ese don para contar cosas terribles y ciertas disfrazadas de historia costumbrista de su época. El suspense es brutal y, como bien dices, los capítulos finales son muy intensos. Me alegra que te haya gustado tanto. Besos.

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  6. A medida que iba leyendo tu reseña, iba pensando en Rebeca, porque me recordaba muchísimo a eso, pero ya he visto que lo has mencionado.
    Me apunto la novela, creo que me podría gustar.
    Besos.

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    1. Hola
      Ya me contarás cuando la leas. La presencia de Vera es como la de Rebeca, sabes que está ahí, pero ahí acaban las similitudes entre las dos novelas.
      Te la recomiendo.
      Besos

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