En un Londres devastado por las bombas y que empieza a recuperarse de las terribles heridas de la Segunda Guerra Mundial, Juliet Ashton, una joven escritora en busca de inspiración novelesca, recibe la carta de un desconocido llamado Dawsey Adams. El hombre, que vive en la isla de Guernsey, un pequeño enclave en el canal de la Mancha, está leyendo un libro de Charles Lamb que había pertenecido con anterioridad a Juliet. ¿Cómo ha llegado ese ejemplar hasta Guernsey? ¿Por qué Dawsey decide ponerse en contacto con Juliet? Dawsey es miembro del club de lectura La Sociedad Literaria del Pastel de Piel de Patata de Guernsey, creado en circunstancias difíciles durante la contienda, una rareza en tiempos de la ocupación alemana. Cuando Juliet acepta la invitación de estos excéntricos lectores para visitar Guernsey, entiende que ellos y su increíble sociedad literaria serán los personajes de su nueva novela, y su vida dará un vuelco para siempre.
Opinión:
Tenía pendiente este libro desde hace mucho tiempo, tanto que a raíz de hacerse la película en 2018 y tras el éxito mundial recogido, la editorial sacó una nueva reedición de la obra, sobra decir que mi ejemplar es de tirada anterior.
Esta historia fue publicada en 2008 y si os habéis fijado en su portada aparecen dos nombres.
Mary Ann Shaffer dejó inacabada la obra y fue su sobrina, Annie Barrows, la encargada de tomar el relevo y terminarla. Lo que más me ha gustado es no encontrar esa línea que podría haber sido una barrera si el estilo de ambas autoras hubiese resultado diferente.
La obra ha sido traducida a más de veinte idiomas y se han vendido más de cinco millones de ejemplares en todo el mundo.
Lo primero que debo decir es que esta novela, escrita de modo epistolar, me recordaba muchísimo a 84 Charing Cross, quizás por la estructura de la obra, por la época que refleja o simplemente porque retrata como la gente en momentos de adversidad se refugia en los libros; esto precisamente lo estamos viendo ahora, con todo lo que estamos pasando a consecuencia de la epidemia de Covid-19...
Esas cartas esconden la historia que poco a poco se va dibujando ante nuestros ojos. y los lectores ávidos de información nos refugiamos entre sus páginas, todo hay que decirlo, con un rol un poco cotilla. Queremos descubrir que se esconde detrás de esa sociedad literaria de extraño nombre y también detrás de Julie, la protagonista, y para hacerlo no dudamos en curiosear en el interior de su correspondencia personal, deseando conocer cada vez un poco más.
El libro se lee de forma muy rápida, no solo se debe a sus 304 páginas que no son muchas, sino que también a su contenido; incluye una trama muy sencilla y original escrita con un estilo simple, el que se utilizaba cuando escribíamos una carta y donde lo que transmitíamos debía ser detallado de forma clara y concisa.
Como os digo, a través del intercambio de cartas vamos conociendo la historia general y también la personal, la que arrastra cada uno de los personajes, por lo tanto las autoras nos ofrecen un libro cargado de historias.
Ese intercambio epistolar va a cumplir una función múltiple.
- Nos acerca a los personajes ofreciéndonos una visión real de como son.
- También sirve para hacer cercana la historia, para que empaticemos con ellos, porque su relato es íntimo, va a estar cargado de anécdotas y también de relatos trágicos.
¿Pero sabéis lo que más me gusta de este libro?, pues que una serie de anécdotas o un montón de cartas, no son suficientes para crear un libro.
Ese compendio de magníficas historias, unas alegres y otras tristes, necesitan un hilo que las una, una trama central que las amalgame; y aquí precisamente ocurre esto.
Juliet es ese elemento que necesitamos para unir, porque ella será la encargada de ir narrando todo lo que sucede a su alrededor.
Juliet es ese elemento que necesitamos para unir, porque ella será la encargada de ir narrando todo lo que sucede a su alrededor.
Por poneros un ejemplo, es todo lo contrario a lo que ocurre en la obra de Madame de Sevigné. Ese libro al que me refiero es una compilación de cartas dirigidas a su hija, su finalidad es personal, es contarle, a través de esa correspondencia, los últimos cotilleos de la corte de Luis XIV.
Su lectura es interesante pero no emociona ni enamora, como dijo Napoleón tras su lectura:
"Son claras batidas a punto de nieve que no producen empacho pero tampoco aportan nada."
En defensa de Madame de Sevigné dire: que las cartas no estaban pensadas para ser publicadas, ese hecho se debió a un familiar indiscreto. Esa correspondencia era privada y le falta ese centro del que os hablaba, ese núcleo que las una...
Y poco más puedo decir sobre esta obra, tan solo me queda comentar que el final me dejó algo fría, me pareció abrupto.
Pensé que la obra terminaría con la publicación del libro, trama central de la historia, o puede que se deba al deseo de seguir conociendo más a esos encantadores personajes que ya formaban parte de mí, y que ahora me dejaban un poco huérfana, sin conocer lo que les depararía el futuro.
Sea como sea, lo cierto es que me quedé con ganas de más; como siempre os digo, no es un problema del libro ni de las autoras, es un problema personal, de cada lector, y a mí lo único que me queda es despedirme y recomendarlo.
La verdad es que este libro nunca me ha llamado la atención especialmente, pero me has hecho cambiar un poco la opinión que tenía sobre su posible lectura. Antes tenía claro que no iba a leerlo, pero ahora no me importaría darle una oportunidad si se cruza en mi camino... ;-)
ResponderEliminarBesos!
Me alegra que mi reseña te haya hecho cambiar de opinión, aunque sea solo un poquito.
EliminarBesos.
Hola Susurros, leí este libro hace muchos años y tengo un buen recuerdo de él. No recuerdo ese final frío y abrupto del que hablas... pero igual me lo puedo plantear como lectura para el año que viene. Me vendría genial para mi reto de Libros rescatados y también para la premisa de libro epistolar de MH, jeje... :)
ResponderEliminarMe alegro de que te haya gustado.
Un besazo
Hola Nitocris.
EliminarEse final abrupto puede que no se lo parezca a otros lectores, lo que ocurre es que yo esperaba seguir conociendo lo que ocurriría después, y al finalizar el libro me quedé con la sensación de que le faltaban páginas. Me faltaba la historia que venía después...
Es una sensación que no puedo describir.
Un besazo.
Me gustó mucho. La estructura epistolar es genial. Y es impactante lo relacionado con la ocupación alemana y la guerra.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola.
EliminarLa estructura es muy buena, resulta más ligera que en otras novelas epistolares y eso la convierte en una lectura que pasa volando ante los ojos del lector. Aporta los detalles importantes.
Yo la comparo con esos postres que te metes una cucharada en la boca y se dehacen al instante pero te llena de sabores, es como una explosión que dura en la boca solo un instante pero perdura en los sentidos...
Un abrazo.
Dudé mucho tiempo por lo de epistolar que no suele ser muy de mi gusto pero un día ya no me resistí más y lo compré, es cierto que aún lo tengo esperando en la estantería pero todo se andará.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola inés.
EliminarCuando yo lo compré todo el mundo hablaba de él. Lo veías en el metro, en el bus, por todos lados, y la gente hablaba maravillas de la historia. Quizás fue ese boom, de verlo en todos los sitios lo que me cansó y ni lo abrí.
Lo cierto es que esa espera ha hecho que lo disfrutase más.
Un abrazo.
Ah, me encantó esta novela, pero entiendo bien lo que comentas sobre su "ligereza" o su falta de consistencia. Pero es que a mí me gustó mucho por la forma, me gustaron las anécdotas, esas pinceladas históricas, esa otra manera de contar, a través de la ficción, cómo había sufrido la población civil. Y, bueno, es que soy una friki de las historias epistolares, qué le voy a hacer. Lo que no me gustó nada fue la adaptación cinematográfica, que para mí le quitó esa "forma" peculiar que tanto me había gustado. Besos.
ResponderEliminarHola Mónica.
EliminarEsa ligereza a la hora de narrar hace precisamente que sus anécdotas no resulten tan duras, se suavizan a pesar de todo lo dramático que hay en ellas.
La peli no la he visto y por lo que dices creo que tampoco resultaría de mi agrado.
Besos.
Hola, Susurros:
ResponderEliminarPues me han entrado muchas ganas de leerlo. A ver si me animo a hacerlo pronto.
Un beso y un abrazo muy fuerte.
Hola Anabel.
EliminarSe hace entretenido y la historia que cuenta de fondo es muy interesante.
Un besazo.