¿Quién escribió las obras de Shakespeare?
¿Qué libro perseguía el KGB?
¿Qué novela ocultó Hitler?
¿Quién pensó en el orden alfabético para organizar los libros?
¿Qué autor burló al índice de libros prohibidos de la Inquisición?
Estos y otros enigmas literarios encuentran respuesta en las páginas de La noche en que Frankenstein leyó el Quijote, un viaje en el tiempo por la historia de la literatura universal de la mano de Santiago Posteguillo, uno de los novelistas históricos más reconocidos por la crítica y el público de los últimos años. Y un profesor de literatura... poco convencional.
Opinión:
Me encantan este tipo de libros en los que encuentras sucesos históricos contados de forma breve, pero sobre todo amena.
En este caso se habla de literatura, ¿Pero acaso la Literatura no es Historia?
Esta obra es un pequeño viaje para mostrarnos lo que se esconde detrás de algunos libros, de sus autores, anécdotas... En resumen y parafraseando a su autor, "destellos fugaces de grandes momentos de la historia de la literatura universal".
Una forma muy sencilla de acercarnos a los clásicos que en alguna ocasión, pueden llegar a parecernos pesados y huir por tanto de esas obras.
Pero como se suele decir, El saber no ocupa lugar, y de esta forma Santiago Posteguillo nos acerca a esos clásicos, a través de anécdotas y de forma muy, muy amena.
Pero no quiero aburriros más y paso a comentaros algunos de los temas que se tratan. 24 pequeños capítulos que encontraréis llenos de curiosidades.
Para comenzar quiero recordaros que en la cabecera de este blog incluyo una frase en la que se dice, que este es un lugar donde se incita a la lectura, y en esta reseña, voy a intentar despertaros la curiosidad para que leáis este pequeño y a la vez gran libro.
¿Cómo lo voy a conseguir? De momento contando un pequeño cotilleo sobre el dramaturgo Francés, Alejandro Dumas.
Se dice, se cuenta, se rumorea... Que en una ocasión Alejandro Dumas se encontró con su hijo por la calle y le preguntó...
¿Has leído mi última novela?
Y su hijo le respondió. Sí la he leído ¿Y tú?
Le había salido un hijo con un fino sentido de la ironía, porque no me negaréis, que el comentario es ingenioso a la vez que mordaz.
Ahora os estaréis preguntando ¿A que viene esto? Pues es algo, que tendréis que descubrir por vosotros mismos. ¿Seréis capaces de hallar la respuesta?Ahora cambiemos de tema y dejemos al gran Dumas descansar en paz...
¿Habéis escuchado alguna vez esta frase?
Nunca digas, de este agua no beberé y este cura no es mi padre... Pues bien, esa frase no podría decirla una de nuestra poetisas más insignes del Siglo XIX.
¿Pero quién será? Me temo que si quiero cumplir con mi propósito, hasta aquí es hasta donde puedo contaros. Creo que ya tenéis otro motivo más para leerlo.
Pero continuemos...
Otros temas que se mencionan y que pueden resultar de interés son...
¿Quién escribió el Lazarillo de Tormes?
¿Por qué Jane Austen cambió el título de su primera novela Primeras impresiones por el de Orgullo y prejuicio?
¿Sabíais que el mayor enemigo de Sherlock Holmes no era el malvado Moriarty?
¿Conocéis el verdadero nombre de la escritora Anne Perry?... ¿Y la historia que se esconde tras ella?... Os advierto que no es una hermanita de la caridad...
Estas son algunas de las historias que podréis encontrar en esta obra, pero os advierto que contiene datos muy interesantes.
Ese tipo de curiosidades o anécdotas que sirven para soltar en una reunión de amigos, en el momento propicio... y quedas como un gran erudito/a, dejándoles con la boca abierta, mientras tu de forma sutil y quitándole importancia, alargas la mano y coges otra patata...
Aunque también os digo, que habrá quien diga que algunas de sus interpretaciones podrían ser rebatidas o discutidas... Pues sí, estoy totalmente de acuerdo, pero supongo que como la mayoría de ensayos.
Como ya dije en su día en la reseña de El rey loco y otros misterios de la España Imperial de Henry Kamen. En muchas ocasiones, no existe registro de los acontecimientos, y el investigador tras haber realizado una ardua labor de investigación, logra encontrar solo pequeñas menciones sobre el suceso. En otras en cambio, sí se encuentra la información deseada sobre determinados hechos, pero... Y aquí surge el problema, aparecen distintas opiniones sobre un mismo suceso, todo depende de la procedencia de los documentos, ya que en un hecho contado por dos partes, pueden encontrarse también discrepancias y como es lógico cada una de ellas puede tener su particular punto de vista.
De todos modos, si queréis saber más sobre estos temas, no os queda más remedio que leer el libro... Mientras, yo voy buscando un hueco y la oportunidad de hacerme con la nueva obra de Santiago Posteguillo, este autor español que con su pluma, parece que todo lo que toca lo convierte en éxito seguro. La nueva obra nos llega con el título, La sangre de los libros, y parece que sigue la trayectoria que ya empezó en este de La noche en que Frankenstein leyó el Quijote.