¿Qué sabes realmente de tu familia?
En una majestuosa casa del elegante barrio de Chelsea, la policía encuentra a una bebé en su cuna. Bien alimentada, cuidada y feliz, espera a que la cojan en brazos.
En la cocina de esa misma casa hay tres cadáveres en estado de descomposición. Junto a ellos, una nota escrita con urgencia.
Veinticinco años después, Libby, esa bebé a quien encontraron con vida, regresa a una casa que esconde su origen familiar y el más oscuro de los secretos.
Ten cuidado con a quién dejas entrar. Hay personas que nunca se irán.
Lisa Jewell es el nuevo fenómeno mundial del thriller, con más de 10 millones de libros venidos. Su obra se compara con grandes nombres del domestic noir y encantará a las lectoras de Paula Hawkins.
Opinión:
Dentro de casa es un libro de suspense que lleva vendidos más de 10.000 ejemplares.
De su autora, Lisa Jewell, se dice que es el nuevo fenómeno mundial del thriller, llegando a ser comparada con otras autoras como Paula Hawkins.
Algunos de los comentarios que acompañan a esta obra son "brillante y afilada como una cuchilla", "deslumbrante", "maravillosamente retorcida" o "terrorífica e intrincada", pero ya sabéis lo que opino sobre este tipo de comentarios tan entusiastas, que pueden terminar frustrando las altas expectativas generadas en el lector.
Yo llegué a esta obra intentado romper la racha de novelas algo decepcionantes que me acompañaba en el último mes, y ahora puedo deciros que la historia está bien, pero tampoco para echar cohetes ni para elogiarla en exceso como están haciendo.
Es una novela que se lee bien, que tiene un ritmo ágil y que logra mantenerlo hasta el final, pero con unos personajes que no llaman la atención en exceso y de los que te desprendes en cuanto pasas la página final.
Y es que, lejos de querer desmerecer el género, Dentro de casa es tan solo un domestic noir de manual; tres hilos argumentales, uno para cada personaje; las mujeres como punto central de la historia; alguna fémina con problemas; capítulos muy breves en los que al final de ellos la historia queda detenida para saltar al siguiente personaje; secretos y algún giro argumental, pero dejadme que profundice más en algunos detalles.
La novela consta de 69 capítulos que se dividen en cuatro partes.
Además de las características ya señaladas, los domestic noir también suelen ofrecernos distintos puntos de vista sobre un mismo hecho.
En esta novela vamos a tener tres hilos argumentales: el de Libby, el personaje central sobre el que gira la historia y el de Lucy, un personaje más secundario, ambos narrados en tercera persona y que suceden en la actualidad.
Por último, tenemos el hilo de Henry, narrado en primera persona y que sucede a finales de los años 80. Este último hilo es el que nos va a servir para rellenar los vacíos existentes alrededor de la familia de Libby.
Pero fijaros en lo curioso de este sistema de narración.
Por norma, en los domestic noir el protagonismo suele dividirse a partes iguales entre los personajes, pero siempre hay uno en un lugar destacado que narra en primera persona.
En este caso, y aunque Libby es, como ya he mencionado, el personaje principal sobre el que gira la trama, su historia nos llega a través de un narrador que utiliza la tercera persona. Este simple hecho hará que el personaje pierda un poco de protagonismo.
En cambio, la primera persona es utilizada por Henry, un personaje secundario.
Esto, sin duda, es una especie de juego sucio por parte de la autora, porque aunque es cierto que él es el encargado de rellenar los vacíos argumentales en una época pasada en la que Libby no está, de este modo caemos en el riesgo que implica la subjetividad del narrador en primera persona. Un cronista así puede ser fiable, pero también puede manipularnos porque con su relato puede engañar, tergiversar o como ya he dicho, dar una visión subjetiva sobre un hecho que no tiene por qué haber ocurrido exactamente como se cuenta.
También quiero deciros que hay algún giro argumental que no se ve venir, o al menos yo no lo vi, y ya para terminar también comentaros que en el final, aunque todos los hilos quedan bien atados, parece que se deja una pequeña puerta abierta, no ya para futuras novelas, porque el argumento no da para más, pero sí como creando un pequeño suspense alrededor del suceso final.
Y hasta aquí la reseña de esta semana, como habéis visto una novela que se deja leer, con intriga, pero a la que le sobran todos esos comentarios tan exagerados con los que la adorna la editorial.