Sinopsis:
Verano de 1935. En un bucólico pueblo de Nueva Inglaterra, la gente no para de hablar sobre la epidemia de muertes que está asolando el hogar de los Perry. Tras el trágico fallecimiento de Vining, el padre, que se cayó por las escaleras del almacén mientras guardaba la cosecha de manzanas, la familia se enfrenta a una nueva pérdida: la del pequeño primo Russell, que muere en el granero ensartado en una horca que el jardinero jura haber dejado guardada en su sitio. Y, unas semanas después, desaparece una vecina, la adorable anciana de la casa de al lado… ¿Se trata de simples accidentes? Los hijos gemelos de Vining son una pareja de lo más peculiar: cada uno podría leer los pensamientos del otro, pero no pueden ser más diferentes. Holland es sarcástico e introvertido, y todo el mundo le considera una mala influencia para la familia, mientras que su gemelo, Niles, es agradable y generoso, y todos le adoran. Ambos viven inmersos en un extraño juego telepático que les enseñó su abuela rusa. Y puede que el juego se les esté yendo horriblemente de las manos…
Opinión:
Hoy voy a hablaros de otra de esas novelas inquietantes que me gusta traeros al blog de vez en cuando, y que sé que no os va a dejar indiferentes.
Esta historia podría catalogarse dentro de la denominada Southern gothic o novela gótica sureña, un género que tuvo su apogeo entre 1940 y 1960. Esas historias nos mostraban situaciones atípicas, macabras pero muy reales; tenían lugar en el profundo sur estadounidense y como protagonistas a unos personajes inocentes, inseguros, pero muy complejos.
Esta novela es la ópera prima de Thomas Tryon, algo que os llamará muchísimo la atención cuando la leáis, no solo por la gran calidad que desprenden sus hojas, por el estilo, por la forma de construir la trama, sino también por el elaborado argumento que no deja ni un solo cabo suelto. Fue escrita en 1971 y al poco tiempo se convirtió en un fenómeno de ventas.
La historia está ambientada en un pueblo de Nueva Inglaterra, a mitad de los años 30 y dicen de ella que inspiró a Stephen King a convertirse en escritor.
Lo cierto es que su estilo me recuerda mucho al de la reina de la novela gótica sureña, Shirley Jackson, en "Siempre hemos vivido en el castillo" porque más que terror lo que nos ofrece es un suspense psicológico muy sostenido.
A lo largo de sus más de trescientas páginas el autor juega con nosotros, utiliza un tema sencillo, al igual que hacía Shirley Jackson, mostrándonos el horror que existe tras la vida doméstica.
Tryon se cuela en nuestro círculo de confort de la mano de unos niños; utiliza su fragilidad, y esa es la llave con la que rompe nuestra barrera de protección. Nos vuelve vulnerables a base de un engaño que emplea inocencia y maldad, un gran foco para generar angustia.
Los lectores asistimos enmudecidos al desarrollo de la historia; intuimos algo de lo que ocurre, no todo por supuesto, pero creo que nuestra mentalidad de adultos se niega a reconocer la realidad.
Las elipsis son una artimaña utilizada a lo largo de toda la obra para mantenernos pegados a sus páginas.
Desde el comienzo la trama cuenta con una buena dosis de suspense, pero a medida que la historia avanza eso que se intuye pero no se llega a ver, hace que la dosis aumente.
La tensión va in crescendo a lo largo de esas 368 páginas, y el final trae consigo la conmoción.
La verdad es que Tryon, a pesar de esas elipsis, a pesar de ese espectacular manejo que hace del suspense no oculta nada, la realidad se transparenta entre los párrafos, pero reitero lo dicho, nos negamos a ver la realidad.
Los personajes principales, Holland y Niles exploran la dualidad.
El autor nos presenta a dos gemelos que no pueden ser más iguales en apariencia y distintos al mismo tiempo. Uno es el niño amable, bondadoso, y el otro representa totalmente lo contrario, lo malvado y lo siniestro.
Tryon profundiza en el perfil psicológico de los personajes, al tiempo que nos muestra la fragilidad, los puntos débiles de cada uno de ellos mezclado con unos extraños sucesos de fondo.
Algo que he olvidado mencionar, es que la novela esta narrada en tercera persona, pero también aparece, en ciertos momentos, un narrador en primera que no hace más que incrementar la intriga, consiguiendo que la atmósfera se vuelva más densa, más turbadora.
Creo que nos encontramos ante otra gran novela que no hay que dejar escapar, yo diría, ahora que el año está a punto de terminar, que es una de las mejores que he leído este año.
Espacio sobre libros y opiniones, difusión y fomento de la lectura. El lugar donde los libros son los protagonistas.
jueves, 19 de diciembre de 2019
miércoles, 11 de diciembre de 2019
Un cadáver con clase de Jessica Fellowes
Un cadáver con clase (Crímenes de Mitford 02)
Sinopsis:
Te presentamos a la Gente Joven Brillante, un grupo de agitadores hedonistas de los años 1920's cuyas búsquedas de tesoros fueron la obsesión de los periódicos de aquella época. Uno de sus grandes juegos tiene lugar durante la fiesta del décimo octavo aniversario de Pamela Mitford, fiesta que acabará siendo tan trágica como cruel y en la que el carismático Adrian Curtis es asesinado a las puertas de una iglesia cercana a la casa de la familia Mitford.
La policía rápidamente señala a Dulcie, una de las criadas como la asesina. Pero Louisa Cannon, doncella de las hermanas Mitford y ex-criminal, está convencida de que Dulcie es inocente y hará todo lo necesario para limpiar su nombre, todo eso mientras el verdadero asesino se encuentra a unos cuantos pasos.
Opinión: Un cadáver con clase (Crímenes de Mitford 02)
Hace más o menos un año reseñé "Los crímenes de Mitford", libro que servía para iniciar la saga y al mismo tiempo para darle título.
Para los que hayáis leído esa reseña, sabréis que la obra en sí no me llegó a entusiasmar, y ahora que ya cuento con una idea más general debo reconocer que esta nueva aventura, "Un cadáver con clase", tampoco lo ha hecho, aunque tiene detalles muy buenos que, por supuesto, os voy a indicar y que se centran sobre todo, en la lograda ambientación.
Un cadáver con clase repite la estructura que ya vimos; es una novela que imita a las escritas en la época dorada del género policíaco y que tuvo su mayor auge en la década de los años 20, la llamada Golden age. Y digo que intenta imitar, porque parece que últimamente estamos viviendo un nuevo resurgir de ese género, dando un salto atrás en el tiempo, y encontrándonos no solo con las características que lo marcaron, es decir, un asesinato, investigación, clase alta involucrada, muchas pistas, ingenio y habilidad para resolverlo, sino también con personajes de la época.
En esta segunda entrega vamos a reencontrarnos con personajes que ya conocemos; Louisa Cannon tira del carro de la historia.
Es la protagonista principal y desempeña un doble papel, el de criada de los Mitford y el de investigadora aficionada, una especie de miss Marple más joven, alguien que intentará descubrir la verdad y que por lo que estamos viendo, tiene cierto magnetismo hacia los crímenes.
Para llevar a cabo su investigación se apoya en otro personaje ficticio, Guy, al que también conocemos; han pasado tres años y ahora forma parte de la policía metropolitana.
Louisa recurrirá a él para que le ayude complementando su investigación.
Pero los personajes ficticios no van a ser los únicos que conozcamos.
Jessica Fellowes crea un elenco mixto, y a estos personajes de ficción, ya mencionados, se le suman los reales.
Si en "Los crímenes de Mitford" la historia giraba alrededor de Nancy, una de las hijas del clan Mitford, ahora le toca el turno a Pamela, y es que como ya os indiqué, cada nuevo libro irá dando un pequeño protagonismo circunstancial a una de las hijas de la famosa familia.
Ellas serán la encargadas, por decirlo de algún modo, de guiarnos hasta el crimen; su actuación no será relevante para la resolución del caso, pero sí para mostrarnos el ambiente de fondo.
Van a ser personajes ambientales, generando el drama, pero no solo eso, también servirán para que el curso de la historia avance.
Y ahora que ya os he hablado de la familia Mitford, os comento que no serán los únicos personajes reales con los que nos encontremos... también habrá otros como Alice Diamond, que se colarán a lo largo de la narración dando credibilidad a los hechos.
También vamos a conocer a los Bright Young Things, jóvenes aristócratas de los años 20, que organizaban fiestas de disfraces y búsquedas de tesoros por la noche.
Abusaban de las drogas y del alcohol, y sirvieron como inspiración para muchos autores, no solo de la época. Este grupo de jóvenes será la llave para introducirnos en los bajos fondos.
A pesar de esa buena ambientación, de ese realismo cargado de detalles que infunden los personajes, hay cosas que para mi gusto fallan.
Una de ellas es dar poco protagonismo a Guy.
Es un gran personaje, pero a pesar de contar con un hilo argumental propio, no deja de ser secundario, y quizás le están restando protagonismo para ofrecernos una visión más feminista de la historia, porque como ya hemos visto, la saga sigue planteando los mismos temas, entre los que se encuentra la reivindicación del papel de la mujer y la marcada diferencia de clases.
Bajo mi punto de vista, dar protagonismo tan marcado a Louisa me parece un error, principalmente porque Louisa como personaje no me resulta creíble. No solo me cuesta creer algunas de las situaciones en las que se ve envuelta sino también esa facilidad suya por los problemas y las coincidencias.
Por otro lado sigo pensando que a las novelas les falta chispa, y es que esa familia, los Mitford, tal y como los retrata Fellowes, ni me atraen ni me aportan; yo no veo esa fascinación que parece que todo el mundo encuentra en ellos.
Acepto que sirven para ambientar, para poder profundizar a través de sus vidas en el contexto histórico, transportarnos a otra época, y esa ya es una función muy importante: pero analizando a esos personajes en frío, Fellowes nos cuenta muy poco sobre ellos.
Para pretender que la saga gire alrededor de esa familia y depender tanto de ella, su actuación me parece muy limitada, encorsetada.
A mí únicamente me parecen un medio para contar otra historia, un relleno, y por lo tanto para mí son prescindibles; el género policíaco está más que surtido de personajes de ficción, de sagas que tienen un protagonista y no han necesitado para funcionar o para brillar, ninguna familia de postín que respalde los hechos que se narran.
Aun así, reitero lo ya mencionado, aportan el toque de realidad aunque su arco de transformación no sufra ningún cambio.
Pero todo lo dicho hasta el momento parece negativo y no lo es...
Valoro que la autora se vuelque en los personajes ficticios y que los haga evolucionar, incluida Louisa.
El arco dramático en ellos es ascendente, y esa transformación es más que evidente a lo largo de las dos novelas; sobre todo lo que me gusta ver es como el paso del tiempo y la época les afecta, influyéndo en la toma de decisiones y en su forma de pensar. Sus aspiraciones van cambiando y ese es otro de los puntos positivos.
Un personaje que me ha gustado mucho es la nueva compañera de Guy, una joven policía que espero que siga haciendo acto de aparición en el resto de novelas, porque creo que tiene mucho potencial y a la larga puede aportar mucho a la trama.
Con ella vamos a conocer a las primera mujeres policías, una visión poco habitual de la época, sin olvidar, por supuesto, que están dando sus primeros pasos. A través del personaje conoceremos de primera mano las dificultades a las que se enfrentan, en ese mundo hasta ahora considerado solo para hombres.
Os he dicho al comienzo que ninguna de las novelas que componen hasta el momento la saga me ha entusiasmado. Habéis visto que valoro muchísimo la ambientación, la evolución de los personajes, pero también opino que el ritmo decae en algunos momentos y la historia consigue aburrirme.
Los alocados años 20, con sus luces y sombras, no aportan los suficientes destellos para que bajo mi mirada, la historia brille.
Aunque intenta imitar a las mejores novelas del género, no lo consigue, le quedan detalles por pulir que quizás se solucionen en la próxima aventura.
Aún así creo que os puede resultar interesante leerla.
Sinopsis:
Te presentamos a la Gente Joven Brillante, un grupo de agitadores hedonistas de los años 1920's cuyas búsquedas de tesoros fueron la obsesión de los periódicos de aquella época. Uno de sus grandes juegos tiene lugar durante la fiesta del décimo octavo aniversario de Pamela Mitford, fiesta que acabará siendo tan trágica como cruel y en la que el carismático Adrian Curtis es asesinado a las puertas de una iglesia cercana a la casa de la familia Mitford.
La policía rápidamente señala a Dulcie, una de las criadas como la asesina. Pero Louisa Cannon, doncella de las hermanas Mitford y ex-criminal, está convencida de que Dulcie es inocente y hará todo lo necesario para limpiar su nombre, todo eso mientras el verdadero asesino se encuentra a unos cuantos pasos.
Opinión: Un cadáver con clase (Crímenes de Mitford 02)
Hace más o menos un año reseñé "Los crímenes de Mitford", libro que servía para iniciar la saga y al mismo tiempo para darle título.
Para los que hayáis leído esa reseña, sabréis que la obra en sí no me llegó a entusiasmar, y ahora que ya cuento con una idea más general debo reconocer que esta nueva aventura, "Un cadáver con clase", tampoco lo ha hecho, aunque tiene detalles muy buenos que, por supuesto, os voy a indicar y que se centran sobre todo, en la lograda ambientación.
Un cadáver con clase repite la estructura que ya vimos; es una novela que imita a las escritas en la época dorada del género policíaco y que tuvo su mayor auge en la década de los años 20, la llamada Golden age. Y digo que intenta imitar, porque parece que últimamente estamos viviendo un nuevo resurgir de ese género, dando un salto atrás en el tiempo, y encontrándonos no solo con las características que lo marcaron, es decir, un asesinato, investigación, clase alta involucrada, muchas pistas, ingenio y habilidad para resolverlo, sino también con personajes de la época.
En esta segunda entrega vamos a reencontrarnos con personajes que ya conocemos; Louisa Cannon tira del carro de la historia.
Es la protagonista principal y desempeña un doble papel, el de criada de los Mitford y el de investigadora aficionada, una especie de miss Marple más joven, alguien que intentará descubrir la verdad y que por lo que estamos viendo, tiene cierto magnetismo hacia los crímenes.
Para llevar a cabo su investigación se apoya en otro personaje ficticio, Guy, al que también conocemos; han pasado tres años y ahora forma parte de la policía metropolitana.
Louisa recurrirá a él para que le ayude complementando su investigación.
Pero los personajes ficticios no van a ser los únicos que conozcamos.
Jessica Fellowes crea un elenco mixto, y a estos personajes de ficción, ya mencionados, se le suman los reales.
Si en "Los crímenes de Mitford" la historia giraba alrededor de Nancy, una de las hijas del clan Mitford, ahora le toca el turno a Pamela, y es que como ya os indiqué, cada nuevo libro irá dando un pequeño protagonismo circunstancial a una de las hijas de la famosa familia.
Ellas serán la encargadas, por decirlo de algún modo, de guiarnos hasta el crimen; su actuación no será relevante para la resolución del caso, pero sí para mostrarnos el ambiente de fondo.
Van a ser personajes ambientales, generando el drama, pero no solo eso, también servirán para que el curso de la historia avance.
Y ahora que ya os he hablado de la familia Mitford, os comento que no serán los únicos personajes reales con los que nos encontremos... también habrá otros como Alice Diamond, que se colarán a lo largo de la narración dando credibilidad a los hechos.
También vamos a conocer a los Bright Young Things, jóvenes aristócratas de los años 20, que organizaban fiestas de disfraces y búsquedas de tesoros por la noche.
Abusaban de las drogas y del alcohol, y sirvieron como inspiración para muchos autores, no solo de la época. Este grupo de jóvenes será la llave para introducirnos en los bajos fondos.
A pesar de esa buena ambientación, de ese realismo cargado de detalles que infunden los personajes, hay cosas que para mi gusto fallan.
Una de ellas es dar poco protagonismo a Guy.
Es un gran personaje, pero a pesar de contar con un hilo argumental propio, no deja de ser secundario, y quizás le están restando protagonismo para ofrecernos una visión más feminista de la historia, porque como ya hemos visto, la saga sigue planteando los mismos temas, entre los que se encuentra la reivindicación del papel de la mujer y la marcada diferencia de clases.
Bajo mi punto de vista, dar protagonismo tan marcado a Louisa me parece un error, principalmente porque Louisa como personaje no me resulta creíble. No solo me cuesta creer algunas de las situaciones en las que se ve envuelta sino también esa facilidad suya por los problemas y las coincidencias.
Por otro lado sigo pensando que a las novelas les falta chispa, y es que esa familia, los Mitford, tal y como los retrata Fellowes, ni me atraen ni me aportan; yo no veo esa fascinación que parece que todo el mundo encuentra en ellos.
Acepto que sirven para ambientar, para poder profundizar a través de sus vidas en el contexto histórico, transportarnos a otra época, y esa ya es una función muy importante: pero analizando a esos personajes en frío, Fellowes nos cuenta muy poco sobre ellos.
Para pretender que la saga gire alrededor de esa familia y depender tanto de ella, su actuación me parece muy limitada, encorsetada.
A mí únicamente me parecen un medio para contar otra historia, un relleno, y por lo tanto para mí son prescindibles; el género policíaco está más que surtido de personajes de ficción, de sagas que tienen un protagonista y no han necesitado para funcionar o para brillar, ninguna familia de postín que respalde los hechos que se narran.
Aun así, reitero lo ya mencionado, aportan el toque de realidad aunque su arco de transformación no sufra ningún cambio.
Pero todo lo dicho hasta el momento parece negativo y no lo es...
Valoro que la autora se vuelque en los personajes ficticios y que los haga evolucionar, incluida Louisa.
El arco dramático en ellos es ascendente, y esa transformación es más que evidente a lo largo de las dos novelas; sobre todo lo que me gusta ver es como el paso del tiempo y la época les afecta, influyéndo en la toma de decisiones y en su forma de pensar. Sus aspiraciones van cambiando y ese es otro de los puntos positivos.
Un personaje que me ha gustado mucho es la nueva compañera de Guy, una joven policía que espero que siga haciendo acto de aparición en el resto de novelas, porque creo que tiene mucho potencial y a la larga puede aportar mucho a la trama.
Con ella vamos a conocer a las primera mujeres policías, una visión poco habitual de la época, sin olvidar, por supuesto, que están dando sus primeros pasos. A través del personaje conoceremos de primera mano las dificultades a las que se enfrentan, en ese mundo hasta ahora considerado solo para hombres.
Os he dicho al comienzo que ninguna de las novelas que componen hasta el momento la saga me ha entusiasmado. Habéis visto que valoro muchísimo la ambientación, la evolución de los personajes, pero también opino que el ritmo decae en algunos momentos y la historia consigue aburrirme.
Los alocados años 20, con sus luces y sombras, no aportan los suficientes destellos para que bajo mi mirada, la historia brille.
Aunque intenta imitar a las mejores novelas del género, no lo consigue, le quedan detalles por pulir que quizás se solucionen en la próxima aventura.
Aún así creo que os puede resultar interesante leerla.
miércoles, 4 de diciembre de 2019
El vestido de Jennifer Robson
Sinopsis:
Londres, 1947.
Asediados por el frío invierno, los británicos padecen el racionamiento a pesar de su victoria en la Segunda Guerra Mundial. Pero Buckingham Palace remontará los ánimos de la nación con el anuncio del compromiso de la princesa Isabel.
Para Ann y Miriam, bordadoras en el taller de un famoso modisto, la boda es más que una celebración. Han sido elegidas para un honor único en la vida: crear los bellísimos bordados que adornarán el vestido de novia de la futura reina de Inglaterra. Una oportunidad única para una chica inglesa de clase trabajadora y una emigrada francesa que ha sobrevivido al régimen nazi.
Opinión:
Sabéis que siempre en mis reseñas intento ser lo más objetiva posible.
Siempre reseño lo que me gusta y lo que no, porque creo que hay que ser justos con los lectores que seguís los blogs. Si un libro no me ha gustado intento indicar esos puntos en los que creo que falla, para no engañaros con falsas promesas.
Reconozco que esa objetividad muchas veces es complicada, porque no deja de depender de gustos personales, lo cual la convierte en subjetiva; y últimamente, parece que lo subjetivo es malo. Yo en cambio, soy de las que piensan que subjetivo y no argumentable distan de ser sinónimos.
Con esto, lo único que quiero decir, aunque parezca rebuscado, es que yo intento en todos mis comentarios, señalar lo que considero positivo y lo que no, pensando que más allá de estas líneas siempre habrá un lector al que puede que interese la historia.
Dicho esto, os cuento que cuando empecé esta novela lo hice con muchas ganas, pero a mitad de lectura esas ganas volaron, ahora veréis por qué.
El punto de observación para el lector será 1947. Ahí nos vamos a encontrar con dos hilos argumentales, y esa será la fecha en que transcurra la mayor parte de esta historia, aunque también hay un hilo en la actualidad, donde el personaje del presente intentará averiguar y rellenar vacíos.
Como veis no os estoy hablando de nada novedoso, esta estructura la hemos visto hasta la saciedad.
A esto de emplear varias lineas temporales que terminan relacionándose según avanza la trama, se le denomina Acronía, ¡ojo!, no confundir con Anacronía que es como se llama a los saltos en el tiempo, y hay autoras que basan toda su obra en esta estructura que parece un juego de tiempos y espacios, y donde los personajes femeninos de la época actual, buscan resolver un misterio familiar.
Aquí en este punto, es donde me cuesta que mis gustos no interfieran.
Yo prescindiría de la linea argumental del presente; creo que la historia es interesante sin tener que recurrir a ella, pero esta no es mi novela...
Sin este personaje en cuestión, el del presente, la historia sería lineal, los acontecimientos estarían ordenados de forma cronológica.
Con los saltos en el tiempo, se intenta generar dramatismo o suspense, pero es que hay historias que no lo necesitan. La trama dentro de su sencillez resulta atractiva y tanto salto parece que intenta desviar la atención de lo real en este caso, se emplea para rellenar, es pura paja, porque después vemos que ese hilo no aporta nada y con él no vamos a ningún lado.
Lo que se descubre en él se intuye y después nos lo corroboran con su narración los personajes de 1947.
Pero voy a seguir hablando de los saltos en el tiempo...
Yo en una obra busco emoción, intensidad, y aquí precisamente esos saltos al pasado me frenaban el ritmo narrativo, no me aportaban nada, ni suspense ni datos sorprendentes.
La trama ya os lo he dicho, se sitúa en 1947 en Inglaterra.
El país tras el conflicto bélico está arruinado, el Imperio se derrumba y acaban de sufrir el invierno más frío. Aun así, la sociedad inglesa se vuelca con la boda de la princesa Isabel, no les calienta ni les llena el estómago, pero ese acontecimiento les permite soñar con un futuro próximo y que éste sea mejor.
Con solo esa premisa ya debería resultar interesante la novela; creo que le sobran artificios. En esta novela más no es sinónimo de mejor...
Los personajes de Ann y Miriam describen a la perfección lo que miles de personas sufrieron tras la II Guerra Mundial, empatizamos con ellos, e incluso los secundarios aportan a la trama. Sabemos que hay una historia detrás de ellos, sean positivos o negativos, y eso da valor a la narración.
El personaje de la época actual es un lastre para la trama. No tiene ni una personalidad llamativa ni frases brillantes, para mí solo es relleno, al igual que el famoso vestido, que no es más que una argucia argumental de fondo, por mucho que se le intente dar protagonismo.
A medida que avanzan las páginas y el misterio va ganando posiciones, nuestro interés por el vestido se va esfumando.
Lo interesante, el encanto, el hechizo de esta novela, aunque pueda resultar repetitivo, son las vidas de Miriam y Ann; esa crónica en gama de grises que nos ofrecen y que está ligada a la trama de la obra.
Londres, 1947.
Asediados por el frío invierno, los británicos padecen el racionamiento a pesar de su victoria en la Segunda Guerra Mundial. Pero Buckingham Palace remontará los ánimos de la nación con el anuncio del compromiso de la princesa Isabel.
Para Ann y Miriam, bordadoras en el taller de un famoso modisto, la boda es más que una celebración. Han sido elegidas para un honor único en la vida: crear los bellísimos bordados que adornarán el vestido de novia de la futura reina de Inglaterra. Una oportunidad única para una chica inglesa de clase trabajadora y una emigrada francesa que ha sobrevivido al régimen nazi.
Opinión:
Sabéis que siempre en mis reseñas intento ser lo más objetiva posible.
Siempre reseño lo que me gusta y lo que no, porque creo que hay que ser justos con los lectores que seguís los blogs. Si un libro no me ha gustado intento indicar esos puntos en los que creo que falla, para no engañaros con falsas promesas.
Reconozco que esa objetividad muchas veces es complicada, porque no deja de depender de gustos personales, lo cual la convierte en subjetiva; y últimamente, parece que lo subjetivo es malo. Yo en cambio, soy de las que piensan que subjetivo y no argumentable distan de ser sinónimos.
Con esto, lo único que quiero decir, aunque parezca rebuscado, es que yo intento en todos mis comentarios, señalar lo que considero positivo y lo que no, pensando que más allá de estas líneas siempre habrá un lector al que puede que interese la historia.
Dicho esto, os cuento que cuando empecé esta novela lo hice con muchas ganas, pero a mitad de lectura esas ganas volaron, ahora veréis por qué.
El punto de observación para el lector será 1947. Ahí nos vamos a encontrar con dos hilos argumentales, y esa será la fecha en que transcurra la mayor parte de esta historia, aunque también hay un hilo en la actualidad, donde el personaje del presente intentará averiguar y rellenar vacíos.
Como veis no os estoy hablando de nada novedoso, esta estructura la hemos visto hasta la saciedad.
A esto de emplear varias lineas temporales que terminan relacionándose según avanza la trama, se le denomina Acronía, ¡ojo!, no confundir con Anacronía que es como se llama a los saltos en el tiempo, y hay autoras que basan toda su obra en esta estructura que parece un juego de tiempos y espacios, y donde los personajes femeninos de la época actual, buscan resolver un misterio familiar.
Aquí en este punto, es donde me cuesta que mis gustos no interfieran.
Yo prescindiría de la linea argumental del presente; creo que la historia es interesante sin tener que recurrir a ella, pero esta no es mi novela...
Sin este personaje en cuestión, el del presente, la historia sería lineal, los acontecimientos estarían ordenados de forma cronológica.
Con los saltos en el tiempo, se intenta generar dramatismo o suspense, pero es que hay historias que no lo necesitan. La trama dentro de su sencillez resulta atractiva y tanto salto parece que intenta desviar la atención de lo real en este caso, se emplea para rellenar, es pura paja, porque después vemos que ese hilo no aporta nada y con él no vamos a ningún lado.
Lo que se descubre en él se intuye y después nos lo corroboran con su narración los personajes de 1947.
Pero voy a seguir hablando de los saltos en el tiempo...
Yo en una obra busco emoción, intensidad, y aquí precisamente esos saltos al pasado me frenaban el ritmo narrativo, no me aportaban nada, ni suspense ni datos sorprendentes.
La trama ya os lo he dicho, se sitúa en 1947 en Inglaterra.
El país tras el conflicto bélico está arruinado, el Imperio se derrumba y acaban de sufrir el invierno más frío. Aun así, la sociedad inglesa se vuelca con la boda de la princesa Isabel, no les calienta ni les llena el estómago, pero ese acontecimiento les permite soñar con un futuro próximo y que éste sea mejor.
Con solo esa premisa ya debería resultar interesante la novela; creo que le sobran artificios. En esta novela más no es sinónimo de mejor...
Los personajes de Ann y Miriam describen a la perfección lo que miles de personas sufrieron tras la II Guerra Mundial, empatizamos con ellos, e incluso los secundarios aportan a la trama. Sabemos que hay una historia detrás de ellos, sean positivos o negativos, y eso da valor a la narración.
El personaje de la época actual es un lastre para la trama. No tiene ni una personalidad llamativa ni frases brillantes, para mí solo es relleno, al igual que el famoso vestido, que no es más que una argucia argumental de fondo, por mucho que se le intente dar protagonismo.
A medida que avanzan las páginas y el misterio va ganando posiciones, nuestro interés por el vestido se va esfumando.
Lo interesante, el encanto, el hechizo de esta novela, aunque pueda resultar repetitivo, son las vidas de Miriam y Ann; esa crónica en gama de grises que nos ofrecen y que está ligada a la trama de la obra.
Etiquetas:
Dramática,
Jennifer Robson,
Novela Histórica
martes, 26 de noviembre de 2019
Un plan sangriento. El caso Roderick Macrae de Graeme Macrae Burnet
Sinopsis:
Un falso true crime situado en el corazón de la Escocia más oscura, que juega a su antojo con los límites de la ficción y cuestiona la validez de los relatos. Un fascinante thriller literario ambientado en un paisaje implacable en el que el ejercicio del poder se demuestra arbitrario.
En 1869, en una aldea perdida en las Tierras Altas escocesas, un triple asesinato particularmente sangriento sacude a toda la comunidad. La policía arresta de inmediato a un joven llamado Roderick Macrae, que aparece cubierto de sangre y admite ser el autor de los hechos. Y así lo confirman unas extrañas memorias que escribe ya en la cárcel, pero, antes de condenarlo, el tribunal debe averiguar qué lo llevó a cometer esos actos de violencia tan despiadada. ¿Acaso estaba loco o era perfectamente consciente de lo que hacía? Solo su persuasivo abogado se interpone entre Macrae y la horca, pero para lograr resolver el misterio y dictar sentencia antes deberán construir un relato sólido, sea cierto o no.
Siglo y medio después, Graeme Macrae, descendiente de Roderick, reúne toda la documentación existente sobre el caso en su búsqueda de la verdad. Pero ¿puede un ser humano comprender realmente la mente de otro?
Opinión:
Hoy voy a comenzar la reseña con las cuatro palabras que dan inicio a la sinopsis, y que facilita la editorial en su página web:
Un True crime, para que nos entendamos, no es nada más que la reconstrucción de un crimen real, por lo tanto sabemos, cuando nos lo catalogan así, que no se trata de una historia de ficción, aunque algunas partes puedan estar ficcionadas.
A mí, lo que me descoloca un poco, es que la editorial lo venda como un falso true crime, y en el interior retire lo de falso y diga: Un true crime apasionante que narra un oscuro caso de asesinato en una aldea perdida de las Highlands escocesas.
A ver, o lo es o no lo es, aquí no valen las medias tintas... es como si asesinamos a alguien y decimos que lo hemos matado solo un poquito.
Creo que la literatura, respecto a géneros y subgéneros está más que servida, para poder clasificar en uno u otro lugar, sin necesidad de recurrir a lo que acabamos de ver, porque si es un falso true crime, es una novela con partes de ficción y bastaría con decir que la novela está inspirada o basada en hechos reales. También debo añadir en este apartado que nuestro idioma es muy rico, sin necesidad de echar mano al uso de anglicismos
Además...
El propio autor nos informa al final, que estamos ante una historia en la que se ha tomado ciertas libertades con los hechos históricos y recurrido en algunos momentos a la imaginación, inventando determinadas situaciones o datos, pero que el caso de Roderick Macrae existió y que él se basa en la documentación encontrada para reconstruir la historia; en concreto en las memorias del reo.
Por lo tanto, haciendo caso a esto último, a esas memorias que nos relatarán a modo de crónica los crímenes, y sin ánimo de pecar de purista, estamos ante un True Crime, aunque algunos fragmentos sobre los que puede existir un vacío argumental, se hayan rellenado haciendo uso de la licencia del escritor, algo totalmente valido.
Ahora bien, aclarado ya este punto que puede generar controversia, paso a hablaros de la obra.
Roderick Macrae fue un campesino escocés, de tan solo diecisiete años, acusado de cometer tres brutales crímenes en su aldea natal, Culdie, en Ross-Shire, una mañana de agosto de 1869.
El caso se ha reconstruido a través de un manuscrito que contenía sus memorias, documento que escribió estando en la prisión de Inverness, mientras esperaba a ser procesado.
Más que los crímenes en sí, lo interesante del caso fue precisamente hallar esa autobiografía que lo convirtió en una especie de "Cause célebre", ya que fragmentos de esas memorias fueron publicadas por la prensa sensacionalista, suscitando una gran polémica, ya que seleccionaron partes, sacándolas de contexto.
Muchos lectores y críticos de la época dudaron y aún lo hacen, de la autenticidad de ese texto, ya que les parecía imposible, que un campesino semianalfabeto produjese una obra de tan elocuente escritura. Para otros, en cambio, esas memorias solo dejaban al descubierto las injustas condiciones feudales que seguían sometiendo al campesinado de las tierras altas. Los True crime sirven, muchas veces, precisamente como denuncia hacia el sistema judicial, policial, o hacia los métodos empleados durante la investigación.
Para la reconstrucción del juicio que aparece en esta novela, se ha recurrido a analizar los periódicos de la época, que hicieron el seguimiento del caso, y también los datos que se recogen en el informe del juicio de Macrae.
Los relatos de los testigos, como en todo buen caso policíaco que se precie, estuvo sembrado de discrepancias y contradicciones, pero a pesar de eso, todos los datos que se extraen, en conjunto, sirven para recrear, aunque recurriendo en parte a la ficción, uno de los casos criminales más fascinante de la historia judicial de Escocia.
Con eso es con lo primero que nos vamos a encontrar los lectores, con los testimonios de los testigos y conocidos. Ese detalle está bien, porque nos va a facilitar un breve esquema psicológico del personaje protagonista.
A continuación comienza el relato detallado del reo:
Las memorias de Roderick Macrae están narradas en primera persona, como ya os he adelantado al comienzo, y ese detalle tiene la ventaja de la cercanía.
El lector empatiza con él, pero también corremos el riesgo de creer todo lo que cuenta y que esto no sea cierto, al no disponer de más versiones con las que contrastar.
La narración de este caso comienza cuando Roderick está esperando su proceso. De esa técnica ya os he hablado en otras reseñas, es una técnica literaria donde la narración comienza en medio de la historia, por eso se denomina in media res, y después retrocede en el tiempo para narrarnos el comienzo, los sucesos que dieron pie y llevaron al personaje hasta la situación actual.
También, complementando el manuscrito de Roderick vamos a leer los informes de las autopsias y las memorias del profesional de psiquiatría que le asistió.
Aquí no debemos olvidar lo que ya he mencionado al comienzo, que el autor hace uso de la licencia del escritor y alguna parte será ficción.
Aun así, las declaraciones de los testigos y los informes, los fragmentos extraídos de la cobertura periodística, crean el contrapunto de la narración del acusado.
Todos los datos que vamos a ir obteniendo crean un gran lienzo ante los ojos del lector, compuesto por una amplia gama de personajes, descritos de una manera excepcional, que nos ayudan a conocer la situación del inculpado; desde los arteros y manipuladores que disfrutan pisoteando al prójimo, a los que miran hacia otro lado, a los que se solidarizan o a los que menosprecian a las clases inferiores.
Como digo, todos estos personajes contribuyen a hacernos una idea de la difícil situación que vivió no solo Roderick Macrae, sino también todas las gentes de las tierras altas.
Si bien, no pueden justificarse los hechos que le llevaron hasta el patíbulo, sí se entiende la difícil situación que lo llevó a cometerlos.
Para mí ha sido una excelente novela, al margen de que sean ciertos todos los hechos o que no, y al margen también de que sea un True crime o una novela de ficción.
La narración atrapa, está perfectamente ambientada, y nos ayuda a conocer esas tierras escocesas de finales del s. XIX.
Un falso true crime situado en el corazón de la Escocia más oscura, que juega a su antojo con los límites de la ficción y cuestiona la validez de los relatos. Un fascinante thriller literario ambientado en un paisaje implacable en el que el ejercicio del poder se demuestra arbitrario.
En 1869, en una aldea perdida en las Tierras Altas escocesas, un triple asesinato particularmente sangriento sacude a toda la comunidad. La policía arresta de inmediato a un joven llamado Roderick Macrae, que aparece cubierto de sangre y admite ser el autor de los hechos. Y así lo confirman unas extrañas memorias que escribe ya en la cárcel, pero, antes de condenarlo, el tribunal debe averiguar qué lo llevó a cometer esos actos de violencia tan despiadada. ¿Acaso estaba loco o era perfectamente consciente de lo que hacía? Solo su persuasivo abogado se interpone entre Macrae y la horca, pero para lograr resolver el misterio y dictar sentencia antes deberán construir un relato sólido, sea cierto o no.
Siglo y medio después, Graeme Macrae, descendiente de Roderick, reúne toda la documentación existente sobre el caso en su búsqueda de la verdad. Pero ¿puede un ser humano comprender realmente la mente de otro?
Opinión:
Hoy voy a comenzar la reseña con las cuatro palabras que dan inicio a la sinopsis, y que facilita la editorial en su página web:
Un falso true crime.
A mí, lo que me descoloca un poco, es que la editorial lo venda como un falso true crime, y en el interior retire lo de falso y diga: Un true crime apasionante que narra un oscuro caso de asesinato en una aldea perdida de las Highlands escocesas.
A ver, o lo es o no lo es, aquí no valen las medias tintas... es como si asesinamos a alguien y decimos que lo hemos matado solo un poquito.
Creo que la literatura, respecto a géneros y subgéneros está más que servida, para poder clasificar en uno u otro lugar, sin necesidad de recurrir a lo que acabamos de ver, porque si es un falso true crime, es una novela con partes de ficción y bastaría con decir que la novela está inspirada o basada en hechos reales. También debo añadir en este apartado que nuestro idioma es muy rico, sin necesidad de echar mano al uso de anglicismos
Además...
El propio autor nos informa al final, que estamos ante una historia en la que se ha tomado ciertas libertades con los hechos históricos y recurrido en algunos momentos a la imaginación, inventando determinadas situaciones o datos, pero que el caso de Roderick Macrae existió y que él se basa en la documentación encontrada para reconstruir la historia; en concreto en las memorias del reo.
Por lo tanto, haciendo caso a esto último, a esas memorias que nos relatarán a modo de crónica los crímenes, y sin ánimo de pecar de purista, estamos ante un True Crime, aunque algunos fragmentos sobre los que puede existir un vacío argumental, se hayan rellenado haciendo uso de la licencia del escritor, algo totalmente valido.
Ahora bien, aclarado ya este punto que puede generar controversia, paso a hablaros de la obra.
Roderick Macrae fue un campesino escocés, de tan solo diecisiete años, acusado de cometer tres brutales crímenes en su aldea natal, Culdie, en Ross-Shire, una mañana de agosto de 1869.
El caso se ha reconstruido a través de un manuscrito que contenía sus memorias, documento que escribió estando en la prisión de Inverness, mientras esperaba a ser procesado.
Más que los crímenes en sí, lo interesante del caso fue precisamente hallar esa autobiografía que lo convirtió en una especie de "Cause célebre", ya que fragmentos de esas memorias fueron publicadas por la prensa sensacionalista, suscitando una gran polémica, ya que seleccionaron partes, sacándolas de contexto.
Muchos lectores y críticos de la época dudaron y aún lo hacen, de la autenticidad de ese texto, ya que les parecía imposible, que un campesino semianalfabeto produjese una obra de tan elocuente escritura. Para otros, en cambio, esas memorias solo dejaban al descubierto las injustas condiciones feudales que seguían sometiendo al campesinado de las tierras altas. Los True crime sirven, muchas veces, precisamente como denuncia hacia el sistema judicial, policial, o hacia los métodos empleados durante la investigación.
Para la reconstrucción del juicio que aparece en esta novela, se ha recurrido a analizar los periódicos de la época, que hicieron el seguimiento del caso, y también los datos que se recogen en el informe del juicio de Macrae.
Los relatos de los testigos, como en todo buen caso policíaco que se precie, estuvo sembrado de discrepancias y contradicciones, pero a pesar de eso, todos los datos que se extraen, en conjunto, sirven para recrear, aunque recurriendo en parte a la ficción, uno de los casos criminales más fascinante de la historia judicial de Escocia.
Con eso es con lo primero que nos vamos a encontrar los lectores, con los testimonios de los testigos y conocidos. Ese detalle está bien, porque nos va a facilitar un breve esquema psicológico del personaje protagonista.
A continuación comienza el relato detallado del reo:
Las memorias de Roderick Macrae están narradas en primera persona, como ya os he adelantado al comienzo, y ese detalle tiene la ventaja de la cercanía.
El lector empatiza con él, pero también corremos el riesgo de creer todo lo que cuenta y que esto no sea cierto, al no disponer de más versiones con las que contrastar.
La narración de este caso comienza cuando Roderick está esperando su proceso. De esa técnica ya os he hablado en otras reseñas, es una técnica literaria donde la narración comienza en medio de la historia, por eso se denomina in media res, y después retrocede en el tiempo para narrarnos el comienzo, los sucesos que dieron pie y llevaron al personaje hasta la situación actual.
También, complementando el manuscrito de Roderick vamos a leer los informes de las autopsias y las memorias del profesional de psiquiatría que le asistió.
Aquí no debemos olvidar lo que ya he mencionado al comienzo, que el autor hace uso de la licencia del escritor y alguna parte será ficción.
Aun así, las declaraciones de los testigos y los informes, los fragmentos extraídos de la cobertura periodística, crean el contrapunto de la narración del acusado.
Todos los datos que vamos a ir obteniendo crean un gran lienzo ante los ojos del lector, compuesto por una amplia gama de personajes, descritos de una manera excepcional, que nos ayudan a conocer la situación del inculpado; desde los arteros y manipuladores que disfrutan pisoteando al prójimo, a los que miran hacia otro lado, a los que se solidarizan o a los que menosprecian a las clases inferiores.
Como digo, todos estos personajes contribuyen a hacernos una idea de la difícil situación que vivió no solo Roderick Macrae, sino también todas las gentes de las tierras altas.
Si bien, no pueden justificarse los hechos que le llevaron hasta el patíbulo, sí se entiende la difícil situación que lo llevó a cometerlos.
Para mí ha sido una excelente novela, al margen de que sean ciertos todos los hechos o que no, y al margen también de que sea un True crime o una novela de ficción.
La narración atrapa, está perfectamente ambientada, y nos ayuda a conocer esas tierras escocesas de finales del s. XIX.
Etiquetas:
Graeme Macrae Burnet,
Novela Negra,
True Crime
martes, 19 de noviembre de 2019
La noche del ocho de Sebastian Fitzek
Sinopsis:
Es el día ocho del mes ocho a las ocho de la tarde.
Tienes ochenta millones de enemigos.
¿Sobrevivirás a la octava noche?
Es el momento de la lotería de la muerte. Cada uno de los participantes ha escrito un nombre en un papel pero solo uno será el elegido en el sorteo. Esa noche, el ganador no estará protegido por la ley: todo el mundo puede matarlo sin temer ningún tipo de castigo y, además, el asesino obtendrá una recompensa de diez millones de euros.
No es un juego, es un peligroso experimento. ¿Serás capaz de controlarlo? Imagina que tu nombre es el escogido.
Opinión:
Sebastian Fitzek es conocido por todos los amantes del thriller como uno de los grandes, pero reconozco desde estas primeras líneas, que el resultado de esta lectura no ha sido tan satisfactorio como esperaba, y que "La noche del ocho" no es una de sus mejores historias.
El libro está inspirado en una película, "La purga: la noche de las bestias", y ya sabéis que muchas veces me he quejado de esas obras que se inspiran en otras, porque el resultado no suele ser muy satisfactorio.
Sebastian Fitzek explora en esta historia el gran poder de Internet, de las redes sociales y los rumores, y como todo ello, en las manos equivocadas, puede influir en la conducta social. Como dicen en Men in black, el individuo es listo, pero la masa es un animal miedoso, idiota y peligroso.
La premisa sobre la que se construye esta historia, la idea inicial es muy original, pero... y aquí comienzan los peros, hay que recordar que la idea no es de Fitzek.
Sebastian Fitzek basándose en "La purga", moldea otro proyecto, supongo que para él mucho mejor, pero en mi opinión se le termina escapando como arena entre los dedos.
El autor nos cuenta, al final, que escribió esta historia tras ver la película, pero no se puede limitar solo a eso... a modificar una idea de otro.
Hay muchos autores que copian ideas o se inspiran en la obra de otro escritor, porque simplemente se encaprichan del concepto e intentan exprimirlo al máximo; el problema es que cuando esa obra llega al lector ha perdido totalmente la frescura original.
El argumento ya lo conocéis por la sinopsis.
Una lotería en la que puedes nominar a alguien que no te cae bien.
El seleccionado tiene que sobrevivir a la noche del ocho mientras una jauría humana se lanza en su búsqueda; el premio una sugerente recompensa: diez millones de euros, sin repercusiones legales...
y aquí llega uno de los detalles que rechinan: cientos de personas persiguiendo a los dos señalados por la lotería de la muerte, porque en esta primera noche inaugural serán dos, y ni un solo comunicado de la policía ni del gobierno condenando los hechos, ni tan siquiera saliendo a las calles a frenar los disturbios...
En una novela que nos transporte a un mundo distópico, ese argumento resultaría de lo más normal, pero en una sociedad, llamémosla civilizada, como la nuestra, este planteamiento no se sostiene.
Es cierto que la trama, al comienzo resulta muy dinámica, pero a mitad de libro parece bajar la intensidad y se queda encorsetada.
Los protagonistas no paran de dar vueltas, sin moverse, supongo que en un triste intento de despistar a los lectores, y a esos personajes se les unirán otros, ambientales, para complicar el argumento, pero al final la trama se vuelve demasiado predecible y averiguas quién se encuentra detrás de la organización de "La noche del ocho".
Retomando lo que acabo de decir de que los personajes se mueven mucho sin llevarnos a ningún lado, tanto es así que hasta el mismo Fitzek acaba mareado, olvidando lo que hace cada uno de sus personajes, y convirtiendo algunas escenas en incongruentes o absurdas.
¡Ojo Spoiler!
Para más referencias, en el capítulo 41, un personaje aparece acurrucado en la zona de los pies del asiento trasero, pero unos párrafos después, el personaje está en el asiento del copiloto y unas líneas más abajo, de nuevo vuelve a estar en los asientos traseros.
¡Menos mal que el personaje intentaba no llamar la atención dentro del coche!
Fin del Spoiler.
Resumiendo...
Una idea original a la que se podía haber sacado provecho y que en cambio termina convertida en una hoja de papel arrugada, de la cual no se puede salvar nada. Siempre os digo que prefiero una historia emocionante a perfecta, pero aquí la emoción se la cargan sus propios personajes, que salvo Ben, parecen esquematizados en exceso.
Es el día ocho del mes ocho a las ocho de la tarde.
Tienes ochenta millones de enemigos.
¿Sobrevivirás a la octava noche?
Es el momento de la lotería de la muerte. Cada uno de los participantes ha escrito un nombre en un papel pero solo uno será el elegido en el sorteo. Esa noche, el ganador no estará protegido por la ley: todo el mundo puede matarlo sin temer ningún tipo de castigo y, además, el asesino obtendrá una recompensa de diez millones de euros.
No es un juego, es un peligroso experimento. ¿Serás capaz de controlarlo? Imagina que tu nombre es el escogido.
Opinión:
Sebastian Fitzek es conocido por todos los amantes del thriller como uno de los grandes, pero reconozco desde estas primeras líneas, que el resultado de esta lectura no ha sido tan satisfactorio como esperaba, y que "La noche del ocho" no es una de sus mejores historias.
El libro está inspirado en una película, "La purga: la noche de las bestias", y ya sabéis que muchas veces me he quejado de esas obras que se inspiran en otras, porque el resultado no suele ser muy satisfactorio.
Sebastian Fitzek explora en esta historia el gran poder de Internet, de las redes sociales y los rumores, y como todo ello, en las manos equivocadas, puede influir en la conducta social. Como dicen en Men in black, el individuo es listo, pero la masa es un animal miedoso, idiota y peligroso.
La premisa sobre la que se construye esta historia, la idea inicial es muy original, pero... y aquí comienzan los peros, hay que recordar que la idea no es de Fitzek.
Sebastian Fitzek basándose en "La purga", moldea otro proyecto, supongo que para él mucho mejor, pero en mi opinión se le termina escapando como arena entre los dedos.
El autor nos cuenta, al final, que escribió esta historia tras ver la película, pero no se puede limitar solo a eso... a modificar una idea de otro.
Hay muchos autores que copian ideas o se inspiran en la obra de otro escritor, porque simplemente se encaprichan del concepto e intentan exprimirlo al máximo; el problema es que cuando esa obra llega al lector ha perdido totalmente la frescura original.
El argumento ya lo conocéis por la sinopsis.
Una lotería en la que puedes nominar a alguien que no te cae bien.
El seleccionado tiene que sobrevivir a la noche del ocho mientras una jauría humana se lanza en su búsqueda; el premio una sugerente recompensa: diez millones de euros, sin repercusiones legales...
y aquí llega uno de los detalles que rechinan: cientos de personas persiguiendo a los dos señalados por la lotería de la muerte, porque en esta primera noche inaugural serán dos, y ni un solo comunicado de la policía ni del gobierno condenando los hechos, ni tan siquiera saliendo a las calles a frenar los disturbios...
En una novela que nos transporte a un mundo distópico, ese argumento resultaría de lo más normal, pero en una sociedad, llamémosla civilizada, como la nuestra, este planteamiento no se sostiene.
Es cierto que la trama, al comienzo resulta muy dinámica, pero a mitad de libro parece bajar la intensidad y se queda encorsetada.
Los protagonistas no paran de dar vueltas, sin moverse, supongo que en un triste intento de despistar a los lectores, y a esos personajes se les unirán otros, ambientales, para complicar el argumento, pero al final la trama se vuelve demasiado predecible y averiguas quién se encuentra detrás de la organización de "La noche del ocho".
Retomando lo que acabo de decir de que los personajes se mueven mucho sin llevarnos a ningún lado, tanto es así que hasta el mismo Fitzek acaba mareado, olvidando lo que hace cada uno de sus personajes, y convirtiendo algunas escenas en incongruentes o absurdas.
¡Ojo Spoiler!
Para más referencias, en el capítulo 41, un personaje aparece acurrucado en la zona de los pies del asiento trasero, pero unos párrafos después, el personaje está en el asiento del copiloto y unas líneas más abajo, de nuevo vuelve a estar en los asientos traseros.
¡Menos mal que el personaje intentaba no llamar la atención dentro del coche!
Fin del Spoiler.
Una idea original a la que se podía haber sacado provecho y que en cambio termina convertida en una hoja de papel arrugada, de la cual no se puede salvar nada. Siempre os digo que prefiero una historia emocionante a perfecta, pero aquí la emoción se la cargan sus propios personajes, que salvo Ben, parecen esquematizados en exceso.
martes, 12 de noviembre de 2019
La bibliotecaria de Salley Vickers
Sinopsis:
En 1958, la joven Sylvia Blackwell se muda a un pequeño pueblo del centro de Inglaterra para empezar su nuevo trabajo como bibliotecaria.
Pero en este pueblo aparentemente acogedor, las apariencias engañan.
Sylvia se enamora del médico del lugar, pero es su conexión con su precoz hija y con el hijo de sus vecinos lo que cambiará su vida y pondrá en peligro a la biblioteca y a su trabajo.
¿Cómo altera la biblioteca la vida de los niños y qué consecuencias tendrán en sus vidas los libros que Sylvia escoge para ellos?
Opinión:
Supongo que a cualquier amante de los libros encontrarse con uno cuyo título lleve impresa la palabra biblioteca y/o librería, e incluso cualquier termino resultante de ella, ya es suficiente incentivo para sumergirse inmediatamente en la sinopsis.
Lo cierto es que esta sinopsis, en concreto, resulta de lo más sugestiva, porque no solo nos habla de la pasión por la lectura, sino también aventura que habrá otro tipo de pasiones entres sus páginas, además de enredos y falsas apariencias.
Sylvia, nuestra protagonista, va a suponer un cambio en el pequeño pueblo inglés al que se muda para hacerse cargo de la sección infantil de la biblioteca pública.
No solo cambiará la forma de llevar esa sección, en la que se había olvidado que la función primordial es incitar a los niños a leer, sino que también influirá en la vida de muchos de los habitantes de la localidad de East Mole. Esos nuevos aires de modernidad que trae, no van a ser bien recibidos, y aquí se refleja a la perfección la época y ese hermetismo que gobernaba las pequeñas comunidades tras la II Guerra Mundial.
Lo que más me ha gustado es el tono costumbrista que sobrevuela cada página.
El ritmo avanza despacio, dando tiempo al lector a familiarizarse con el entorno y presentando a los personajes a su debido tiempo. La prosa es sencilla y prescinde de florituras, lo que contribuye a plasmar, sin adornos, la forma de vida de los personajes.
Las últimas cien páginas son quizás las que más me han gustado.
Si a lo largo de la obra comprobamos como los libros actúan muchas veces como refugio, ese final nos demuestra el gran poder que tienen, como nos influencias y nos pueden ayudar a dar un giro radical a nuestra vida.
Es una novela donde lógicamente no pararán de asomarse títulos de libros y autores, e incluso al final, se añade una relación de lecturas recomendadas por la biblioteca de East Mole, un buen guiño a la literatura.
Por otro lado, encuentro muchos paralelismos con la "La librería" de Penelope Fitzgerald, novela que por cierto debo releer.
En ambas se reflejan las conspiraciones, la falsedad y las intrigas que tienen lugar en las pequeñas poblaciones.
El nombre de ambas protagonistas también sirve para mostrarnos, de forma figurada, lo que sucede a su alrededor.
En esta historia tenemos a Sylvia Blackwell (Pozo oscuro o negro), una forma figurada de enseñarnos lo que se avecina sobre el personaje, su soledad y sus ansias de libertad; y en el libro de Penelope Fitzgerald tenemos a Florence Green, que nos hace ver al personaje como verde o inexperta.
Ambas mujeres van a representar la superación y la valentía, además de todo lo señalado anteriormente.
En esta historia también vamos a ver sembrada la polémica.
Esta nos llegará desde un libro de Henry Miller, "Trópico de Cáncer". Una historia, por supuesto, alejada de las recomendaciones para niños, por sus detalladas descripciones sexuales y su lenguaje obsceno; libro que fue retirado por los censores y llevado a juicio por obscenidad, después sería considerado como una de las grandes obras de la literatura del siglo XX.
En "La librería" también viviremos una situación parecida, pero esta vez la polémica vendrá de la recomendación de "Lolita" de Nabokov, otra de las grandes obras del s. XX que hoy en día sigue levantando ampollas.
Como veis es una novela muy entretenida y recomendable, además de entrañable. Una historia ideal para leer bajo el calor de una manta y un sentido homenaje a los bibliotecarios y a todas aquellas historias que nos marcaron de niños.
En 1958, la joven Sylvia Blackwell se muda a un pequeño pueblo del centro de Inglaterra para empezar su nuevo trabajo como bibliotecaria.
Pero en este pueblo aparentemente acogedor, las apariencias engañan.
Sylvia se enamora del médico del lugar, pero es su conexión con su precoz hija y con el hijo de sus vecinos lo que cambiará su vida y pondrá en peligro a la biblioteca y a su trabajo.
¿Cómo altera la biblioteca la vida de los niños y qué consecuencias tendrán en sus vidas los libros que Sylvia escoge para ellos?
Opinión:
Supongo que a cualquier amante de los libros encontrarse con uno cuyo título lleve impresa la palabra biblioteca y/o librería, e incluso cualquier termino resultante de ella, ya es suficiente incentivo para sumergirse inmediatamente en la sinopsis.
Lo cierto es que esta sinopsis, en concreto, resulta de lo más sugestiva, porque no solo nos habla de la pasión por la lectura, sino también aventura que habrá otro tipo de pasiones entres sus páginas, además de enredos y falsas apariencias.
Sylvia, nuestra protagonista, va a suponer un cambio en el pequeño pueblo inglés al que se muda para hacerse cargo de la sección infantil de la biblioteca pública.
No solo cambiará la forma de llevar esa sección, en la que se había olvidado que la función primordial es incitar a los niños a leer, sino que también influirá en la vida de muchos de los habitantes de la localidad de East Mole. Esos nuevos aires de modernidad que trae, no van a ser bien recibidos, y aquí se refleja a la perfección la época y ese hermetismo que gobernaba las pequeñas comunidades tras la II Guerra Mundial.
Lo que más me ha gustado es el tono costumbrista que sobrevuela cada página.
El ritmo avanza despacio, dando tiempo al lector a familiarizarse con el entorno y presentando a los personajes a su debido tiempo. La prosa es sencilla y prescinde de florituras, lo que contribuye a plasmar, sin adornos, la forma de vida de los personajes.
Las últimas cien páginas son quizás las que más me han gustado.
Si a lo largo de la obra comprobamos como los libros actúan muchas veces como refugio, ese final nos demuestra el gran poder que tienen, como nos influencias y nos pueden ayudar a dar un giro radical a nuestra vida.
Es una novela donde lógicamente no pararán de asomarse títulos de libros y autores, e incluso al final, se añade una relación de lecturas recomendadas por la biblioteca de East Mole, un buen guiño a la literatura.
Por otro lado, encuentro muchos paralelismos con la "La librería" de Penelope Fitzgerald, novela que por cierto debo releer.
En ambas se reflejan las conspiraciones, la falsedad y las intrigas que tienen lugar en las pequeñas poblaciones.
El nombre de ambas protagonistas también sirve para mostrarnos, de forma figurada, lo que sucede a su alrededor.
En esta historia tenemos a Sylvia Blackwell (Pozo oscuro o negro), una forma figurada de enseñarnos lo que se avecina sobre el personaje, su soledad y sus ansias de libertad; y en el libro de Penelope Fitzgerald tenemos a Florence Green, que nos hace ver al personaje como verde o inexperta.
Ambas mujeres van a representar la superación y la valentía, además de todo lo señalado anteriormente.
En esta historia también vamos a ver sembrada la polémica.
Esta nos llegará desde un libro de Henry Miller, "Trópico de Cáncer". Una historia, por supuesto, alejada de las recomendaciones para niños, por sus detalladas descripciones sexuales y su lenguaje obsceno; libro que fue retirado por los censores y llevado a juicio por obscenidad, después sería considerado como una de las grandes obras de la literatura del siglo XX.
En "La librería" también viviremos una situación parecida, pero esta vez la polémica vendrá de la recomendación de "Lolita" de Nabokov, otra de las grandes obras del s. XX que hoy en día sigue levantando ampollas.
Como veis es una novela muy entretenida y recomendable, además de entrañable. Una historia ideal para leer bajo el calor de una manta y un sentido homenaje a los bibliotecarios y a todas aquellas historias que nos marcaron de niños.
martes, 5 de noviembre de 2019
Morirse es de mal gusto de Francesc Marí
Sinopsis:
Durante una selecta velada en la mansión de Charles Richmond, aclamado productor de cine y jefe de los Estudios con el mismo nombre, tendrá lugar un asesinato. El mayordomo de la mansión, Bernard, será la víctima.
En esa noche de tormenta, y a la espera de la llegada de la policía, Melvin Drake, guionista de los Estudios Richmond, será quién haga de detective reuniendo todas las pistas. Poco a poco seremos testigos de muchas revelaciones y muchos más secretos sobre a los habitantes de la mansión y los propios invitados.
Una trama llena de giros que productor y guionista no dudarán en llevar a la gran pantalla como el nuevo éxito de taquilla: Morirse es de mal gusto.
Opinión:
Curioseando por la página de la editorial Planeta, llegué hasta este libro de Click ediciones, uno de los sellos del Grupo Planeta que solo publica obras inéditas y en formato digital. Este sello, según informan en su web, pretende descubrir a nuevos autores.
Pues bien, cuando vi la portada de este libro, me recordó muchísimo a otro que hacía leído hace poco: "Las siete muertes de Evelyn Hardcastle", y movida por la curiosidad me fui directamente a leer la sinopsis, que como habéis podido comprobar resulta de lo más atractiva.
Ahora lo traigo hasta esta estantería virtual para hablaros sobre él.
Es una novela muy cortita que evoca la estructura de las escritas por Agatha Christie; una mansión con un buen montón de personajes y motivos para cometer un asesinato, además del habitual homicidio.
Los lectores nos vamos a encontrar con un asesinato al más puro estilo de "misterio del cuarto cerrado", ya que los personajes permanecen en la mansión, incomunicados con el exterior, mientras la investigación que se desarrolla en un periodo de tiempo muy breve, una sola noche, va desvelando secretos sobre ellos. El encargado de llevar a cabo esta investigación será un guionista de películas, alguien que obligado por la situación debe encarnar el papel de detective aficionado.
Esta historia al mismo tiempo nos lleva a pensar en una obra teatral o una de esas películas en plan parodia de detectives, ya que el autor encamina la narración hacia la comedia de enredo, adornándola con ligeros toques de humor que amenizan su lectura, por supuesto no puedo olvidar mencionar el giro inesperado del final.
Y prácticamente ya termino, veréis que la reseña es muy breve pero es que el libro también lo es. He dejado para el final el detalle que menos me ha gustado y es en relación a la caracterización de los personajes.
Estos me han parecido demasiado superficiales.
Aunque están construidos sobre los clásicos clichés, ese no es motivo para no haber profundizado en ellos. Se comportan de una manera muy previsible y ninguno de ellos evoluciona a lo largo de la trama. Quizás una caracterización más compleja habría dotado de más factor sorpresa a esta historia.
Durante una selecta velada en la mansión de Charles Richmond, aclamado productor de cine y jefe de los Estudios con el mismo nombre, tendrá lugar un asesinato. El mayordomo de la mansión, Bernard, será la víctima.
En esa noche de tormenta, y a la espera de la llegada de la policía, Melvin Drake, guionista de los Estudios Richmond, será quién haga de detective reuniendo todas las pistas. Poco a poco seremos testigos de muchas revelaciones y muchos más secretos sobre a los habitantes de la mansión y los propios invitados.
Una trama llena de giros que productor y guionista no dudarán en llevar a la gran pantalla como el nuevo éxito de taquilla: Morirse es de mal gusto.
Opinión:
Curioseando por la página de la editorial Planeta, llegué hasta este libro de Click ediciones, uno de los sellos del Grupo Planeta que solo publica obras inéditas y en formato digital. Este sello, según informan en su web, pretende descubrir a nuevos autores.
Pues bien, cuando vi la portada de este libro, me recordó muchísimo a otro que hacía leído hace poco: "Las siete muertes de Evelyn Hardcastle", y movida por la curiosidad me fui directamente a leer la sinopsis, que como habéis podido comprobar resulta de lo más atractiva.
Ahora lo traigo hasta esta estantería virtual para hablaros sobre él.
Es una novela muy cortita que evoca la estructura de las escritas por Agatha Christie; una mansión con un buen montón de personajes y motivos para cometer un asesinato, además del habitual homicidio.
Los lectores nos vamos a encontrar con un asesinato al más puro estilo de "misterio del cuarto cerrado", ya que los personajes permanecen en la mansión, incomunicados con el exterior, mientras la investigación que se desarrolla en un periodo de tiempo muy breve, una sola noche, va desvelando secretos sobre ellos. El encargado de llevar a cabo esta investigación será un guionista de películas, alguien que obligado por la situación debe encarnar el papel de detective aficionado.
Esta historia al mismo tiempo nos lleva a pensar en una obra teatral o una de esas películas en plan parodia de detectives, ya que el autor encamina la narración hacia la comedia de enredo, adornándola con ligeros toques de humor que amenizan su lectura, por supuesto no puedo olvidar mencionar el giro inesperado del final.
Y prácticamente ya termino, veréis que la reseña es muy breve pero es que el libro también lo es. He dejado para el final el detalle que menos me ha gustado y es en relación a la caracterización de los personajes.
Estos me han parecido demasiado superficiales.
Aunque están construidos sobre los clásicos clichés, ese no es motivo para no haber profundizado en ellos. Se comportan de una manera muy previsible y ninguno de ellos evoluciona a lo largo de la trama. Quizás una caracterización más compleja habría dotado de más factor sorpresa a esta historia.
Etiquetas:
Comedia,
Francesc Marí,
Novela enigma
martes, 29 de octubre de 2019
La Cadena de Adrian McKinty
Sinopsis:
Como una mañana cualquiera, Rachel deja a su hija en la parada del autobús. Pero una llamada de un número desconocido lo cambia todo: una mujer le informa que tiene a Kylie secuestrada y que, si quiere verla de nuevo, deberá seguir sus instrucciones al pie de la letra: primero, pagar un rescate; segundo, secuestrar a otro niño. Quien llama es también una madre cuyo hijo ha sido secuestrado, y si Rachel no cumple con las reglas, el niño morirá, y su hija también.
Rachel ya forma parte de La Cadena, un mecanismo que convierte a padres de familia en víctimas y a su vez en criminales, y que está haciendo a alguien muy rico en el proceso. Ella es una mujer corriente, pero en pocas horas los acontecimientos la llevarán hasta límites impensables y la obligarán a hacer algo terrible.
Los creadores de La Cadena saben que unos padres harán todo lo que está en sus manos por sus hijos. Pero no contaban con cruzarse en el camino de una mujer decidida, valiente y superviviente como Rachel. Porque, si alguien puede romperla, ésa es ella.
Opinión:
La Cadena, la historia que hoy os traigo a esta estantería virtual, fue escrita en un comienzo como relato breve, de esa forma permaneció escondida en el fondo de un cajón hasta 2017, momento en el que el agente literario del autor le propuso desarrollar el argumento en Estados Unidos, comenzando así una nueva Cadena.
El mecanismo sobre el que se construye el argumento de esta novela es muy sencillo, La Cadena es un sistema de explotación de la emoción humana. Convierte a padres en criminales y en víctimas al mismo tiempo.
Los eslabones que mantienen unidos la cadena y que la hacen crecer, no es el miedo, como podríamos pensar en un principio al leer la sinopsis, sino el amor. Amor de cualquier tipo, maternal, filial o romántico, que impulsará a hacer lo que sea por el ser querido.
Sobre esta idea básicamente es sobre la que se construye la novela, una historia que debo reconocer que tiene un comienzo muy potente e impactante.
Adrian McKinty nos sumerge de golpe en la trama, no da tiempo a que el lector se vaya habituando al narrador, a la forma de contar o a los personajes, en los que por cierto no profundiza mucho.
Su relato te atrapa desde la primera linea, aportando tensión y suspense que dosifica valiéndose de capítulos muy breves.
El narrador, en tercera persona, nos relata de forma lineal los acontecimientos, eso sí, saltando de un personaje a otro, de esta forma, mediante los cliffhangers deja colgada la trama en el momento más intenso, sostenida únicamente por un hilo muy fino.
Ahora bien, en una novela de comienzo tan impactante, sabiendo que está en vías de publicación en más de 40 países y que ya se han vendido los derechos para ser llevada a la gran pantalla, pensé que los giros argumentales estarían asegurados y que la historia no se mantendría solo a base de cliffhangers.
Al llegar a la mitad de la novela, más o menos, aprecié una bajada en el ritmo narrativo; la historia empezaba a perder fuelle.
En ese punto una parte de la trama, la que nos ha guiado hasta el momento, queda resuelta. El autor, a partir de ahí, recurre a narraciones retrospectivas para mostrarnos otra parte de la historia, la que se refiere a quiénes son los cerebros que se esconden detrás de La Cadena, alternando, eso sí, esos fragmentos con la vida actual de los protagonistas, que continúan lógicamente con sus vidas.
¿Pero qué ocurre? pues lo que ya he mencionado, que para mantener la tensión y al lector pegado a las páginas se necesitan más cosas, no solo de cliffhangers vive el hombre.
Hay un gran potencial en el argumento, no hace falta que nos digan en la faja del libro Ian Rankin, John Katzenbach o el mismísimo Stephen King, que la historia es tremendamente adictiva y original... pero bajo mi punto de vista, ese gran potencial está infrautilizado.
La historia se vuelve demasiado previsible, ¿y qué hace que un libro se vuelva previsible? no es que el autor de demasiada información, es que la que da, no se molesta en esconderla, y los lectores vemos venir los sucesos desde bastante lejos.
La novela se divide en dos partes, y yo que no tengo olfato sabueso descubrí al llegar al segundo tramo de la historia, quién era la persona que se ocultaba detrás de la cadena.
Un thriller que se precie o una novela policíaca de calidad, debe ofrecer una trama con suspense, con tensión, y al final, una resolución a la que el lector más agudo, debería llegar de forma lógica. Pero como digo en esta historia no hay artificios engañosos, solo pistas puestas al descubierto.
Por otro lado, quizás de haber utilizado otro tipo de narrador, por ejemplo en primera persona, el relato se hubiese vuelto más cercano y la empatía que surgiría de él, haría que el lector se creyese los giros colocados al final, que para mi gusto resultan de lo más inverosímiles.
Es una buena novela, sí, pero se parece demasiado a un guion de serie, de esas en la que solo vemos acción, acción y acción, desde el comienzo, y dejan muy poco en pro de la imaginación.
Debemos disfrutar de la lectura, y yo lo he hecho, pero no a tope como esperaba al comienzo.
Algunas personas que me recomendaron con fuerza esta historia, se sorprenderán al leer mi opinión final, pero la lectura es una experiencia personal y cada uno vivimos los libros de forma distinta.
Las razones expuestas, son propias, cada lector tendrá las suyas. Esto lo digo porque últimamente opinar algo distinto a lo que piensa la masa se está convirtiendo en un deporte de alto riesgo, y aunque suene repetitivo, para gustos los colores.
Como una mañana cualquiera, Rachel deja a su hija en la parada del autobús. Pero una llamada de un número desconocido lo cambia todo: una mujer le informa que tiene a Kylie secuestrada y que, si quiere verla de nuevo, deberá seguir sus instrucciones al pie de la letra: primero, pagar un rescate; segundo, secuestrar a otro niño. Quien llama es también una madre cuyo hijo ha sido secuestrado, y si Rachel no cumple con las reglas, el niño morirá, y su hija también.
Rachel ya forma parte de La Cadena, un mecanismo que convierte a padres de familia en víctimas y a su vez en criminales, y que está haciendo a alguien muy rico en el proceso. Ella es una mujer corriente, pero en pocas horas los acontecimientos la llevarán hasta límites impensables y la obligarán a hacer algo terrible.
Los creadores de La Cadena saben que unos padres harán todo lo que está en sus manos por sus hijos. Pero no contaban con cruzarse en el camino de una mujer decidida, valiente y superviviente como Rachel. Porque, si alguien puede romperla, ésa es ella.
Opinión:
La Cadena, la historia que hoy os traigo a esta estantería virtual, fue escrita en un comienzo como relato breve, de esa forma permaneció escondida en el fondo de un cajón hasta 2017, momento en el que el agente literario del autor le propuso desarrollar el argumento en Estados Unidos, comenzando así una nueva Cadena.
El mecanismo sobre el que se construye el argumento de esta novela es muy sencillo, La Cadena es un sistema de explotación de la emoción humana. Convierte a padres en criminales y en víctimas al mismo tiempo.
Los eslabones que mantienen unidos la cadena y que la hacen crecer, no es el miedo, como podríamos pensar en un principio al leer la sinopsis, sino el amor. Amor de cualquier tipo, maternal, filial o romántico, que impulsará a hacer lo que sea por el ser querido.
Sobre esta idea básicamente es sobre la que se construye la novela, una historia que debo reconocer que tiene un comienzo muy potente e impactante.
Adrian McKinty nos sumerge de golpe en la trama, no da tiempo a que el lector se vaya habituando al narrador, a la forma de contar o a los personajes, en los que por cierto no profundiza mucho.
Su relato te atrapa desde la primera linea, aportando tensión y suspense que dosifica valiéndose de capítulos muy breves.
El narrador, en tercera persona, nos relata de forma lineal los acontecimientos, eso sí, saltando de un personaje a otro, de esta forma, mediante los cliffhangers deja colgada la trama en el momento más intenso, sostenida únicamente por un hilo muy fino.
Ahora bien, en una novela de comienzo tan impactante, sabiendo que está en vías de publicación en más de 40 países y que ya se han vendido los derechos para ser llevada a la gran pantalla, pensé que los giros argumentales estarían asegurados y que la historia no se mantendría solo a base de cliffhangers.
Al llegar a la mitad de la novela, más o menos, aprecié una bajada en el ritmo narrativo; la historia empezaba a perder fuelle.
En ese punto una parte de la trama, la que nos ha guiado hasta el momento, queda resuelta. El autor, a partir de ahí, recurre a narraciones retrospectivas para mostrarnos otra parte de la historia, la que se refiere a quiénes son los cerebros que se esconden detrás de La Cadena, alternando, eso sí, esos fragmentos con la vida actual de los protagonistas, que continúan lógicamente con sus vidas.
¿Pero qué ocurre? pues lo que ya he mencionado, que para mantener la tensión y al lector pegado a las páginas se necesitan más cosas, no solo de cliffhangers vive el hombre.
Hay un gran potencial en el argumento, no hace falta que nos digan en la faja del libro Ian Rankin, John Katzenbach o el mismísimo Stephen King, que la historia es tremendamente adictiva y original... pero bajo mi punto de vista, ese gran potencial está infrautilizado.
La historia se vuelve demasiado previsible, ¿y qué hace que un libro se vuelva previsible? no es que el autor de demasiada información, es que la que da, no se molesta en esconderla, y los lectores vemos venir los sucesos desde bastante lejos.
La novela se divide en dos partes, y yo que no tengo olfato sabueso descubrí al llegar al segundo tramo de la historia, quién era la persona que se ocultaba detrás de la cadena.
Un thriller que se precie o una novela policíaca de calidad, debe ofrecer una trama con suspense, con tensión, y al final, una resolución a la que el lector más agudo, debería llegar de forma lógica. Pero como digo en esta historia no hay artificios engañosos, solo pistas puestas al descubierto.
Por otro lado, quizás de haber utilizado otro tipo de narrador, por ejemplo en primera persona, el relato se hubiese vuelto más cercano y la empatía que surgiría de él, haría que el lector se creyese los giros colocados al final, que para mi gusto resultan de lo más inverosímiles.
Es una buena novela, sí, pero se parece demasiado a un guion de serie, de esas en la que solo vemos acción, acción y acción, desde el comienzo, y dejan muy poco en pro de la imaginación.
Debemos disfrutar de la lectura, y yo lo he hecho, pero no a tope como esperaba al comienzo.
Algunas personas que me recomendaron con fuerza esta historia, se sorprenderán al leer mi opinión final, pero la lectura es una experiencia personal y cada uno vivimos los libros de forma distinta.
Las razones expuestas, son propias, cada lector tendrá las suyas. Esto lo digo porque últimamente opinar algo distinto a lo que piensa la masa se está convirtiendo en un deporte de alto riesgo, y aunque suene repetitivo, para gustos los colores.
miércoles, 23 de octubre de 2019
IT de Stephen King
Sinopsis:
Tras lustros de tranquilidad y lejanía, una antigua promesa infantil les hace volver al lugar en el que vivieron su infancia y juventud como una terrible pesadilla.
Regresan a Derry para enfrentarse con su pasado y enterrar definitivamente la amenaza que los amargó durante su niñez.
Saben que pueden morir, pero son conscientes de que no conocerán la paz hasta que aquella cosa sea destruida para siempre.
It es una de las novelas más ambiciosas de Stephen King, donde ha logrado perfeccionar de un modo muy personal las claves del género de terror.
Opinión:
Supongo que ya habréis leído otras opiniones mías sobre este autor.
No solo creo que es el mejor autor del género de terror, sino que también el más completo y prolífico. Tiene una capacidad sorprendentemente imaginativa, aunque también hay que señalar que su carrera pasó por horas bajas.
Esta obra junto a Apocalipsis (que quiero releer en breve), El resplandor y El misterio de Salem's Lot, es de las que más me ha gustado; fue escrita en 1986 y tiene varios detalles curiosos que me gustaría comentaros.
Pennywise.
Lo primero que quiero hacer es reivindicar el protagonismo de esta narración para el monstruo, porque parece que tanto los lectores como la editorial, por lo que veo en la sinopsis, se empeñan en situarle solo como antagonista y personaje secundario.
En general se dice que esta es la historia de una pandilla de chicos perseguidos por un monstruo, y no es del todo así.
Esta obra narra la historia de IT, un ser que lleva en la tierra más que nosotros; un monstruo capaz de cambiar de forma alimentándose de los terrores de sus víctimas y que despierta cada 27 años para alimentarse, sembrando el terror en Derry.
La pandilla de "Los perdedores", por supuesto que van a ser protagonistas, pero parece que le restan protagonismo a IT porque ellos además de ser personajes también desempeñan la función de narradores, y como tal, en algún momento tomarán las riendas del relato.
Lo que sí es cierto es que IT, en la primera parte, tiene una actuación más pasiva, aparece en varias escenas como un personaje incidental, mientras en la segunda parte el personaje reclama gran parte del protagonismo.
Derry.
Stephen King sitúa la trama de esta novela en Derry, ciudad ficticia ubicada en el estado de Maine. Según el autor, Derry es su interpretación de la ciudad de Bangor, ciudad que sí existe en ese mismo estado.
Los que conozcáis parte de la obra de King sabréis que sitúa la mayoría de sus novelas en ese estado, como si esa atmósfera fantástica que se respira allí fuese vigorizantemente creativa.
Volviendo a Pennywise.
El escalofriante payaso, protagonista de esta novela, está inspirado en un asesino serial real, John Wayne Gacy, conocido como Pogo el Payaso. Este asesino en serie conmocionó a los Estados Unidos durante la década de los setenta tras asesinar a 33 personas, todas ellas adolescentes.
Pennywise es un personaje recurrente a lo largo de toda la obra de King, ya que aparecerá en varios libros mencionados... habrá que seguir buscando.
Narradores y épocas.
Uno de los detalles que más me ha gustado es la alternancia de narradores. Vamos a tener un narrador en tercera persona omnisciente y al mismo tiempo narradores en primera persona, ya que cada uno de los integrantes de la pandilla de "Los perdedores" nos va a narrar parte de los hechos.
Esa alternancia nos puede resultar complicada al principio, si le añadimos que también vamos a enfrentarnos a una estructura narrativa no lineal, con alternancia de épocas, pasando de 1957 a 1985.
Personajes.
Nos vamos a encontrar con los clásicos personajes de King; gente normal y corriente que se enfrentan al mal a pesar del terror que sienten. Quizás esto sea lo que nos hace empatizar con ellos y lo que da a sus obras el toque especial. Las situaciones narradas, irreales e incluso surrealistas, cambian bajo su pluma y nos hacen percibirlas como posiblemente reales.
Manejando realidad y ficción.
Hay partes de esta historia que consiguen ponerte la piel de gallina. Te sientes en la piel del personaje, notas la soledad que le rodea y la impotencia ante los hechos que se le avecinan; no me refiero solamente a las escenas de terror. Los niños que protagonizan esta obra se enfrentan en soledad a los abusos y al maltrato, quizás por ese motivo, al estar juntos, forman una piña y se convierten en especiales. Da igual que seas gordo, tartamudo o de diferente raza o religión, juntos son Uno.
IT vs Fantasmas.
Mucha gente dice que esta novela tiene muchas escenas y personajes, incluido el monstruo, que nos pueden recordar a Fantasmas de Dean Koontz, escrita en 1983.
Respecto a los monstruos, que ambos son capaces de cambiar de forma, existen infinidad de referencias anteriores, por ejemplo en la obra de Lovecraft.
Y respecto al argumento, y siempre bajo mi punto de vista, creo que King consiguió construir, con las mismas ideas, una historia sobradamente mejor, más compleja y elaborada, como estáis comprobando, a la que no le sobran páginas, e incluso remitiéndonos al final, King lo borda y lo hace real.
Lo que más me ha gustado:
La técnica espectacular de King para transportarnos de la narración de un personaje a otro y del presente al pasado, y por supuesto los personajes, incluido Pennywise.
Una obra genial, que no os podéis perder.
Tras lustros de tranquilidad y lejanía, una antigua promesa infantil les hace volver al lugar en el que vivieron su infancia y juventud como una terrible pesadilla.
Regresan a Derry para enfrentarse con su pasado y enterrar definitivamente la amenaza que los amargó durante su niñez.
Saben que pueden morir, pero son conscientes de que no conocerán la paz hasta que aquella cosa sea destruida para siempre.
It es una de las novelas más ambiciosas de Stephen King, donde ha logrado perfeccionar de un modo muy personal las claves del género de terror.
Opinión:
Supongo que ya habréis leído otras opiniones mías sobre este autor.
No solo creo que es el mejor autor del género de terror, sino que también el más completo y prolífico. Tiene una capacidad sorprendentemente imaginativa, aunque también hay que señalar que su carrera pasó por horas bajas.
Esta obra junto a Apocalipsis (que quiero releer en breve), El resplandor y El misterio de Salem's Lot, es de las que más me ha gustado; fue escrita en 1986 y tiene varios detalles curiosos que me gustaría comentaros.
Pennywise.
Lo primero que quiero hacer es reivindicar el protagonismo de esta narración para el monstruo, porque parece que tanto los lectores como la editorial, por lo que veo en la sinopsis, se empeñan en situarle solo como antagonista y personaje secundario.
En general se dice que esta es la historia de una pandilla de chicos perseguidos por un monstruo, y no es del todo así.
Esta obra narra la historia de IT, un ser que lleva en la tierra más que nosotros; un monstruo capaz de cambiar de forma alimentándose de los terrores de sus víctimas y que despierta cada 27 años para alimentarse, sembrando el terror en Derry.
La pandilla de "Los perdedores", por supuesto que van a ser protagonistas, pero parece que le restan protagonismo a IT porque ellos además de ser personajes también desempeñan la función de narradores, y como tal, en algún momento tomarán las riendas del relato.
Lo que sí es cierto es que IT, en la primera parte, tiene una actuación más pasiva, aparece en varias escenas como un personaje incidental, mientras en la segunda parte el personaje reclama gran parte del protagonismo.
Derry.
Stephen King sitúa la trama de esta novela en Derry, ciudad ficticia ubicada en el estado de Maine. Según el autor, Derry es su interpretación de la ciudad de Bangor, ciudad que sí existe en ese mismo estado.
Los que conozcáis parte de la obra de King sabréis que sitúa la mayoría de sus novelas en ese estado, como si esa atmósfera fantástica que se respira allí fuese vigorizantemente creativa.
Volviendo a Pennywise.
El escalofriante payaso, protagonista de esta novela, está inspirado en un asesino serial real, John Wayne Gacy, conocido como Pogo el Payaso. Este asesino en serie conmocionó a los Estados Unidos durante la década de los setenta tras asesinar a 33 personas, todas ellas adolescentes.
Pennywise es un personaje recurrente a lo largo de toda la obra de King, ya que aparecerá en varios libros mencionados... habrá que seguir buscando.
Narradores y épocas.
Uno de los detalles que más me ha gustado es la alternancia de narradores. Vamos a tener un narrador en tercera persona omnisciente y al mismo tiempo narradores en primera persona, ya que cada uno de los integrantes de la pandilla de "Los perdedores" nos va a narrar parte de los hechos.
Esa alternancia nos puede resultar complicada al principio, si le añadimos que también vamos a enfrentarnos a una estructura narrativa no lineal, con alternancia de épocas, pasando de 1957 a 1985.
Personajes.
Nos vamos a encontrar con los clásicos personajes de King; gente normal y corriente que se enfrentan al mal a pesar del terror que sienten. Quizás esto sea lo que nos hace empatizar con ellos y lo que da a sus obras el toque especial. Las situaciones narradas, irreales e incluso surrealistas, cambian bajo su pluma y nos hacen percibirlas como posiblemente reales.
Manejando realidad y ficción.
Hay partes de esta historia que consiguen ponerte la piel de gallina. Te sientes en la piel del personaje, notas la soledad que le rodea y la impotencia ante los hechos que se le avecinan; no me refiero solamente a las escenas de terror. Los niños que protagonizan esta obra se enfrentan en soledad a los abusos y al maltrato, quizás por ese motivo, al estar juntos, forman una piña y se convierten en especiales. Da igual que seas gordo, tartamudo o de diferente raza o religión, juntos son Uno.
IT vs Fantasmas.
Mucha gente dice que esta novela tiene muchas escenas y personajes, incluido el monstruo, que nos pueden recordar a Fantasmas de Dean Koontz, escrita en 1983.
Respecto a los monstruos, que ambos son capaces de cambiar de forma, existen infinidad de referencias anteriores, por ejemplo en la obra de Lovecraft.
Y respecto al argumento, y siempre bajo mi punto de vista, creo que King consiguió construir, con las mismas ideas, una historia sobradamente mejor, más compleja y elaborada, como estáis comprobando, a la que no le sobran páginas, e incluso remitiéndonos al final, King lo borda y lo hace real.
Lo que más me ha gustado:
La técnica espectacular de King para transportarnos de la narración de un personaje a otro y del presente al pasado, y por supuesto los personajes, incluido Pennywise.
Una obra genial, que no os podéis perder.
martes, 15 de octubre de 2019
Los crímenes del Ártico de Mads Peder Nordbo
Sinopsis:
En Groenlandia, una serie de asesinatos conmociona a la pequeña comunidad de Nuuk, la capital de la gélida isla. Matthew Cave, un joven periodista del periódico local, es enviado a cubrir el descubrimiento de lo que parece ser un fósil de la época vikinga. Pero el caos se desata cuando la momia desaparece y el policía encargado de protegerla durante la noche es brutalmente asesinado.
Matthew se verá inmerso casi sin pretenderlo en una difícil investigación que se remontará al caso sin resolver más importante de los años setenta. La única que confiará en el instinto del periodista es la peculiar y muy tatuada Tupaarnaq, una misteriosa joven groenlandesa que acaba de salir de prisión tras haber asesinado a su propio padre. Ambos deberán superar sus reticencias iniciales para llegar hasta el final y atrapar a un asesino en serie que tiene aterrorizada a toda la isla.
Opinión:
Parece que, últimamente, Groenlandia se ha convertido en el tema de conversación de muchos corrillos y tertulias, y nos ha hecho girar la mirada hacia esa isla que está considerada como la mayor del mundo y de la cual, visto lo visto, conocemos muy poco.
Uno de los motivos es la absurda proposición de compra de Donald Trump sobre ese territorio autónomo pero dependiente de Dinamarca.
El otro, pues quizás sea la publicación de este libro, "Los crímenes del Ártico", en más de veinte países, una fascinante historia que combina la novela negra y el thriller, géneros en los que los escritores nórdicos se mueven francamente bien.
Esa isla, Groenlandia, que va a convertirse en el escenario de la obra, tiene el 77% de su superficie cubierta de hielo y en groenlandés significa "tierra de los Kalaallit"; estuvo habitada, aunque no de forma continua, desde el III milenio a.C. por pueblos amerindios. En el siglo X, su costa fue colonizada por gentes procedentes de Islandia, pero entre mediados del siglo XV y 1721 existe un gran vacío, "los pobladores nórdicos" desaparecieron dejando abandonados sus asentamientos.
La historia comienza en 2014, cuando un cuerpo es hallado en la grieta de un glaciar.
Todo parece apuntar a que el cuerpo pertenece a un vikingo, a uno de los últimos habitantes nórdicos que poblaron la zona, pero como habéis leído en la sinopsis, el cuerpo desaparece.
La novela cobra un ritmo muy ágil desde el comienzo y el suspense va a cubrir, como una espesa capa de hielo, gran parte de la trama.
Contaremos con dos lineas temporales, una en 2014 y la otra en 1973; dos épocas que enlazarán una serie de crímenes.
Los capítulos son muy breves, de dos o tres páginas, y ese detalle sumado a una prosa muy fluida y al argumento sembrado de crímenes, hacen que la lectura avance sin pausa, por lo tanto ya tenemos otro detalle para leer esta historia, que el ritmo no se verá alterado en ningún momento.
Otro detalle a favor es la ambientación.
El autor prescinde de extensas y aburridas descripciones. Lo que hace es mostrarnos el entorno y que éste se funda con la acción, de esa forma consigue que se abra ante nosotros una ventana que muestra la belleza gélida del paisaje, pero sin recargar.
Os he mencionado al comienzo que nos encontramos ante una novela negra con tintes de thriller. Últimamente a los amantes del género criminal nos cuesta mucho encontrar argumentos puramente negros, así que no esperéis encontrar una novela negra "pura y dura". Quizás el motivo sea que el género, al igual que otros, está experimentando una evolución constante.
Es cierto que aparecen asesinatos sangrientos, pero nada que un lector demasiado sensible no pueda leer, esto último lo digo porque se están viendo críticas sobre otras novelas negras que censuran precisamente la crueldad de las escenas.
La verdad es que es algo absurdo, porque los lectores de este tipo de obras, deberían estar más que acostumbrados a ello, si queremos algo dulcificado podemos pasarnos al policíaco.
Pero echemos un tupido velo sobre esto y continuemos con el comentario...
Como iba diciendo nos vamos a encontrar con asesinatos "sangrientos", indispensables para el género, pero también con otras características propias que echo en falta muchas veces, como la crítica social, la corrupción, el abuso, pero sobre todo esa linea que separa el bien y el mal, y que el autor de los crímenes aquí, logra traspasar. Puedo decir que sin ánimo de justificar los asesinatos y lejos de ser un spoiler, estos pueden parecernos cargados de justicia divina.
"Los crímenes del Ártico" es la primera entrega de una trilogía que ya está publicada completa en su idioma original y que tiene como protagonista al periodista Matthew Cave, un personaje al que no le importa saltarse las reglas de vez en cuando, otra característica más para sumar a las ya citadas hasta el momento.
En nuestro país, de momento, solo se ha publicado este primer título, espero que no ocurra como en otras series que nos quedamos a medias...
También hay que decir que esta es la primera incursión del autor en la "novela negra".
Desde hace unos años estamos siendo bombardeados desde los países nórdicos con historias protagonizadas por unos personajes fríos y distantes y cargadas de escenas con bastantes trazas de violencia, lo que las enmarca a la perfección en esa categoría ya mencionada.
Quizás el libro carece de esos dos detalles llevados al extremo.
Los lectores empatizamos con los personajes y como ya he mencionado, aunque los asesinatos son cruentos, no se crece a la hora de describirlos, los muestra y continúa con la narración...
Esta obra me ha recordado mucho a otras, por ejemplo, uno de los personajes se parece a Lisbeth Salander, protagonista de la saga Millenium, quizás por el perfil antisocial, pero también la crítica que se esconde entre sus páginas, donde nos muestra la tensa y difícil situación de los inuit con Dinamarca, me lleve a pensar en una historia escrita por Peter Hoeg, autor danés y publicada en 1992. Esa novela tiene un argumento que se mueve también entre Dinamarca y Groenlandia y fue llevada al cine en 1997.
Seguro que os sonará... la obra en papel llevaba el título de "La señorita Smila y su especial percepción de la nieve" pero es más conocida por la película que adoptó un título más corto: "Smila: Misterio en la nieve".
Y ahora sí, para terminar y antes de que se me olvide activo mi modo ironic On para mencionaros una última cosa.
"Los crímenes del Ártico", muchos expertos, se desmarcan situándolo dentro de una nueva categoría o subgénero denominado "arctic noir", que ha surgido como generación espontánea, prácticamente antes de ayer...
¡Vamos! otra chorrada de categoría monumental, que se han inventado para volvernos locos a los lectores, que no teníamos ya bastante con llamarlo "novela nórdica".
Pues ¡no!, no os equivoquéis, porque esta novela negra es más glacial, y la climatología marca como una característica propia el desarrollo de la trama.
Según dicen, son historias contadas desde el ártico, por sus gentes y profundizando en su cultura.
Supongo, por lo tanto, que la novela negra nacida aquí en España, bajo el sol, entre paellas, churrasquito y albariño, en vez de "novela negra" también tendrá alguna denominación, eso sí, con mucha clase, como el aceite de oliva"virgen extra", pero que hasta el momento se me escapa.
Si alguien ilumina mi ignorancia ya os lo contaré.
Ahora apago y me pongo en modo ironic Off para despedirme.
Os recomiendo esta novela, ha sido una buena lectura y seguro que al margen de géneros y subgéneros regionales inventados, el contenido no os defraudará.
En Groenlandia, una serie de asesinatos conmociona a la pequeña comunidad de Nuuk, la capital de la gélida isla. Matthew Cave, un joven periodista del periódico local, es enviado a cubrir el descubrimiento de lo que parece ser un fósil de la época vikinga. Pero el caos se desata cuando la momia desaparece y el policía encargado de protegerla durante la noche es brutalmente asesinado.
Matthew se verá inmerso casi sin pretenderlo en una difícil investigación que se remontará al caso sin resolver más importante de los años setenta. La única que confiará en el instinto del periodista es la peculiar y muy tatuada Tupaarnaq, una misteriosa joven groenlandesa que acaba de salir de prisión tras haber asesinado a su propio padre. Ambos deberán superar sus reticencias iniciales para llegar hasta el final y atrapar a un asesino en serie que tiene aterrorizada a toda la isla.
Opinión:
Parece que, últimamente, Groenlandia se ha convertido en el tema de conversación de muchos corrillos y tertulias, y nos ha hecho girar la mirada hacia esa isla que está considerada como la mayor del mundo y de la cual, visto lo visto, conocemos muy poco.
Uno de los motivos es la absurda proposición de compra de Donald Trump sobre ese territorio autónomo pero dependiente de Dinamarca.
El otro, pues quizás sea la publicación de este libro, "Los crímenes del Ártico", en más de veinte países, una fascinante historia que combina la novela negra y el thriller, géneros en los que los escritores nórdicos se mueven francamente bien.
Esa isla, Groenlandia, que va a convertirse en el escenario de la obra, tiene el 77% de su superficie cubierta de hielo y en groenlandés significa "tierra de los Kalaallit"; estuvo habitada, aunque no de forma continua, desde el III milenio a.C. por pueblos amerindios. En el siglo X, su costa fue colonizada por gentes procedentes de Islandia, pero entre mediados del siglo XV y 1721 existe un gran vacío, "los pobladores nórdicos" desaparecieron dejando abandonados sus asentamientos.
La historia comienza en 2014, cuando un cuerpo es hallado en la grieta de un glaciar.
Todo parece apuntar a que el cuerpo pertenece a un vikingo, a uno de los últimos habitantes nórdicos que poblaron la zona, pero como habéis leído en la sinopsis, el cuerpo desaparece.
La novela cobra un ritmo muy ágil desde el comienzo y el suspense va a cubrir, como una espesa capa de hielo, gran parte de la trama.
Contaremos con dos lineas temporales, una en 2014 y la otra en 1973; dos épocas que enlazarán una serie de crímenes.
Los capítulos son muy breves, de dos o tres páginas, y ese detalle sumado a una prosa muy fluida y al argumento sembrado de crímenes, hacen que la lectura avance sin pausa, por lo tanto ya tenemos otro detalle para leer esta historia, que el ritmo no se verá alterado en ningún momento.
Otro detalle a favor es la ambientación.
El autor prescinde de extensas y aburridas descripciones. Lo que hace es mostrarnos el entorno y que éste se funda con la acción, de esa forma consigue que se abra ante nosotros una ventana que muestra la belleza gélida del paisaje, pero sin recargar.
Os he mencionado al comienzo que nos encontramos ante una novela negra con tintes de thriller. Últimamente a los amantes del género criminal nos cuesta mucho encontrar argumentos puramente negros, así que no esperéis encontrar una novela negra "pura y dura". Quizás el motivo sea que el género, al igual que otros, está experimentando una evolución constante.
Es cierto que aparecen asesinatos sangrientos, pero nada que un lector demasiado sensible no pueda leer, esto último lo digo porque se están viendo críticas sobre otras novelas negras que censuran precisamente la crueldad de las escenas.
La verdad es que es algo absurdo, porque los lectores de este tipo de obras, deberían estar más que acostumbrados a ello, si queremos algo dulcificado podemos pasarnos al policíaco.
Pero echemos un tupido velo sobre esto y continuemos con el comentario...
Como iba diciendo nos vamos a encontrar con asesinatos "sangrientos", indispensables para el género, pero también con otras características propias que echo en falta muchas veces, como la crítica social, la corrupción, el abuso, pero sobre todo esa linea que separa el bien y el mal, y que el autor de los crímenes aquí, logra traspasar. Puedo decir que sin ánimo de justificar los asesinatos y lejos de ser un spoiler, estos pueden parecernos cargados de justicia divina.
"Los crímenes del Ártico" es la primera entrega de una trilogía que ya está publicada completa en su idioma original y que tiene como protagonista al periodista Matthew Cave, un personaje al que no le importa saltarse las reglas de vez en cuando, otra característica más para sumar a las ya citadas hasta el momento.
En nuestro país, de momento, solo se ha publicado este primer título, espero que no ocurra como en otras series que nos quedamos a medias...
También hay que decir que esta es la primera incursión del autor en la "novela negra".
Desde hace unos años estamos siendo bombardeados desde los países nórdicos con historias protagonizadas por unos personajes fríos y distantes y cargadas de escenas con bastantes trazas de violencia, lo que las enmarca a la perfección en esa categoría ya mencionada.
Quizás el libro carece de esos dos detalles llevados al extremo.
Los lectores empatizamos con los personajes y como ya he mencionado, aunque los asesinatos son cruentos, no se crece a la hora de describirlos, los muestra y continúa con la narración...
Esta obra me ha recordado mucho a otras, por ejemplo, uno de los personajes se parece a Lisbeth Salander, protagonista de la saga Millenium, quizás por el perfil antisocial, pero también la crítica que se esconde entre sus páginas, donde nos muestra la tensa y difícil situación de los inuit con Dinamarca, me lleve a pensar en una historia escrita por Peter Hoeg, autor danés y publicada en 1992. Esa novela tiene un argumento que se mueve también entre Dinamarca y Groenlandia y fue llevada al cine en 1997.
Seguro que os sonará... la obra en papel llevaba el título de "La señorita Smila y su especial percepción de la nieve" pero es más conocida por la película que adoptó un título más corto: "Smila: Misterio en la nieve".
Y ahora sí, para terminar y antes de que se me olvide activo mi modo ironic On para mencionaros una última cosa.
"Los crímenes del Ártico", muchos expertos, se desmarcan situándolo dentro de una nueva categoría o subgénero denominado "arctic noir", que ha surgido como generación espontánea, prácticamente antes de ayer...
¡Vamos! otra chorrada de categoría monumental, que se han inventado para volvernos locos a los lectores, que no teníamos ya bastante con llamarlo "novela nórdica".
Pues ¡no!, no os equivoquéis, porque esta novela negra es más glacial, y la climatología marca como una característica propia el desarrollo de la trama.
Según dicen, son historias contadas desde el ártico, por sus gentes y profundizando en su cultura.
Supongo, por lo tanto, que la novela negra nacida aquí en España, bajo el sol, entre paellas, churrasquito y albariño, en vez de "novela negra" también tendrá alguna denominación, eso sí, con mucha clase, como el aceite de oliva"virgen extra", pero que hasta el momento se me escapa.
Si alguien ilumina mi ignorancia ya os lo contaré.
Ahora apago y me pongo en modo ironic Off para despedirme.
Os recomiendo esta novela, ha sido una buena lectura y seguro que al margen de géneros y subgéneros regionales inventados, el contenido no os defraudará.
Etiquetas:
Arctic noir,
Mads Peder Nordbo,
Nordic noir,
Novela Negra,
Thriller
martes, 8 de octubre de 2019
La catadora de Hitler de V.S. Alexander
Sinopsis:
Cuando los bombardeos de los Aliados comienzan a caer sobre Berlín, los padres de Magda deciden enviarla con sus tíos a las montañas, donde le consiguen un trabajo en el Berghof, el lugar de descanso de Hitler. Tras una serie de rigurosos exámenes físicos y mentales, es asignada a la cocina formando parte del grupo de mujeres dedicadas a catar los alimentos del Führer para asegurarse de que no estén envenenados.
En medio de la belleza de los Alpes bávaros, Magda se olvida de los horrores de la guerra y del peligro que supone su nuevo trabajo. Sin embargo, la calma se esfumará cuando conoce al capitán de las SS Karl Weber, un conspirador que intenta convencerla de que el Führer debe morir, y ella se convierte en la pieza más importante de un complot que pondrá a prueba su inteligencia y lealtad.
Opinión:
Hoy os hablo de "La catadora de Hitler", pero antes de empezar con la reseña debo hacer una pequeña puntualización.
Esta novela no es una biografía de Margot Wölk, la única superviviente de las catadoras de Hitler, pero sí es cierto que varias escenas aquí narradas se basan en su experiencia.
Magda, nuestra protagonista, toma la palabra; da voz a una de las quince mujeres que se jugaban la vida, varias veces al día, probando la comida del Fürer, intentado que no le asesinasen.
Pero no podemos creernos al pie de la letra todo lo que sucede al personaje.
Ella será el medio para relatarnos, novelándolo, otro de esos episodios de la II Guerra Mundial, verídico pero desconocido por muchos de nosotros.
La historia, como os digo, esta basada o inspirada en Margot.
En este caso, Magda junto a otros personajes ficticios, se entremezclarán con los reales, borrando esa linea que existe entre realidad y ficción.
Pero insisto, no olvidéis que entre las páginas de este libro se esconde una parte muy importante de licencia del escritor, aunque lo que se vive de fondo sea totalmente cierto.
Realmente lo bueno, quizás lo que más me ha llamado la atención, es que mientras lees olvidas todo lo que acabo de mencionar.
El lector no se cuestiona si parte de lo que narra Magda es cierto o no, lo único importante es que es un relato bien contado, siguiendo el hilo de los hechos reales.
Magda es llevada al Berghof, el refugio que tiene en los Alpes el dictador, y allí se verá inmersa en un mundo de desconfianza y temor.
El Berghof es una especie de microcosmos, aislado, recóndito y que les aleja de la realidad de la guerra. Ella se verá involucrada en la famosa "Operación Valkiria", lo que hoy conocemos como otro intento fallido de asesinar a Adolf Hitler en julio de 1944.
La historia comienza con un pequeño prólogo fechado en 2013, donde la protagonista, ahora una anciana, nos cuenta que estuvo junto a Hitler el día de su muerte.
A partir de ahí, recurre a una narración retrospectiva que nos sitúa a principios de 1943. para relatarnos, desde el comienzo, como llegó a ser una de las catadoras.
Desde ese punto el relato avanzará de forma lineal...
Magda irá ascendiendo, valiéndose de su inteligencia, pero cualquier acción poco meditada puede ser el fin, no solo de ella, sino también de su familia.
Este detalle que acabo de mencionar, es el generador de tensión, porque todas sus acciones están marcadas no solo por esa época peligrosa que le ha tocado vivir sino también por el ambiente en el que se ha instalado... donde no existe el mañana y pensar en él es algo que no puede permitirse.
El estilo narrativo es directo y sencillo.
La trama se centra en todo lo que ocurre alrededor de la joven, sin olvidar mostrarnos la lucha que se libra en su interior, entre su deber como alemana, como trabajadora al servicio del Reich y sus verdaderas lealtades.
Los personajes se dividen en dos grupos: reales y ficticios, pero también existe otra subdivisión, los buenos y los que desde el comienzo no nos van a gustar.
De entre todos estos personajes solo hay uno que sobresale, y es precisamente ella, no solo porque sea la protagonista, sino también la cronista y nuestra guía por el relato.
Es cierto que, como habéis podido ver, también es la historia de Alemania, pero solo tratada de fondo. Magda nos muestra lo que sucede a su alrededor, lo que le afecta a ella. Supongo que estaréis pensando que Hitler también debe ser un gran personaje, porque su protagonismo histórico así lo requiere; pero aquí el dictador es tan solo un mero secundario. Entra y sale de los escenarios, sabemos que siempre está de fondo, como si fuese un personaje omnipresente, pero siempre con un protagonismo pasivo.
A pesar de esto, me ha gustado muchísimo la descripción que se hace sobre el dictador. Aunque no profundiza en él, sí nos muestra esa atracción que desprendía, toda esa propaganda engañosa que vertían sobre Alemania y que llevaba a sus gentes a confiar plenamente en los delirios de un loco. El autor tampoco omite en esa descripción el deterioro físico que va sufriendo y que poco se menciona en otros libros.
Esta obra esconde una historia emocionante, con intrigas y grandes momentos de tensión, sin olvidar por supuesto a unos personajes bastante interesantes.
Siempre me han gustado las historias inspiradas en la II Guerra Mundial, y esta, al igual que "La ladrona de libros" deja ese regusto tan especial, ese sabor agridulce que hace que sus personajes y la trama perduren en el tiempo.
Para terminar os diré que, aunque la historia de Magda es el corazón de esta novela, este tipo de obras siempre esconden mucho más, manipulación ideológica, muerte y destrucción, extremismo... resumiendo, historias que nos hacen reflexionar.
Cuando los bombardeos de los Aliados comienzan a caer sobre Berlín, los padres de Magda deciden enviarla con sus tíos a las montañas, donde le consiguen un trabajo en el Berghof, el lugar de descanso de Hitler. Tras una serie de rigurosos exámenes físicos y mentales, es asignada a la cocina formando parte del grupo de mujeres dedicadas a catar los alimentos del Führer para asegurarse de que no estén envenenados.
En medio de la belleza de los Alpes bávaros, Magda se olvida de los horrores de la guerra y del peligro que supone su nuevo trabajo. Sin embargo, la calma se esfumará cuando conoce al capitán de las SS Karl Weber, un conspirador que intenta convencerla de que el Führer debe morir, y ella se convierte en la pieza más importante de un complot que pondrá a prueba su inteligencia y lealtad.
Opinión:
Hoy os hablo de "La catadora de Hitler", pero antes de empezar con la reseña debo hacer una pequeña puntualización.
Esta novela no es una biografía de Margot Wölk, la única superviviente de las catadoras de Hitler, pero sí es cierto que varias escenas aquí narradas se basan en su experiencia.
Magda, nuestra protagonista, toma la palabra; da voz a una de las quince mujeres que se jugaban la vida, varias veces al día, probando la comida del Fürer, intentado que no le asesinasen.
Pero no podemos creernos al pie de la letra todo lo que sucede al personaje.
Ella será el medio para relatarnos, novelándolo, otro de esos episodios de la II Guerra Mundial, verídico pero desconocido por muchos de nosotros.
La historia, como os digo, esta basada o inspirada en Margot.
En este caso, Magda junto a otros personajes ficticios, se entremezclarán con los reales, borrando esa linea que existe entre realidad y ficción.
Pero insisto, no olvidéis que entre las páginas de este libro se esconde una parte muy importante de licencia del escritor, aunque lo que se vive de fondo sea totalmente cierto.
Realmente lo bueno, quizás lo que más me ha llamado la atención, es que mientras lees olvidas todo lo que acabo de mencionar.
El lector no se cuestiona si parte de lo que narra Magda es cierto o no, lo único importante es que es un relato bien contado, siguiendo el hilo de los hechos reales.
Magda es llevada al Berghof, el refugio que tiene en los Alpes el dictador, y allí se verá inmersa en un mundo de desconfianza y temor.
El Berghof es una especie de microcosmos, aislado, recóndito y que les aleja de la realidad de la guerra. Ella se verá involucrada en la famosa "Operación Valkiria", lo que hoy conocemos como otro intento fallido de asesinar a Adolf Hitler en julio de 1944.
"Es como si viviéramos en un mundo fabricado que se encoge día tras día. Puedo sentir que las paredes se nos vienen encima. Sobre Alemania, sobre Berlín, sobre nosotros." .
La historia comienza con un pequeño prólogo fechado en 2013, donde la protagonista, ahora una anciana, nos cuenta que estuvo junto a Hitler el día de su muerte.
A partir de ahí, recurre a una narración retrospectiva que nos sitúa a principios de 1943. para relatarnos, desde el comienzo, como llegó a ser una de las catadoras.
Desde ese punto el relato avanzará de forma lineal...
Magda irá ascendiendo, valiéndose de su inteligencia, pero cualquier acción poco meditada puede ser el fin, no solo de ella, sino también de su familia.
Este detalle que acabo de mencionar, es el generador de tensión, porque todas sus acciones están marcadas no solo por esa época peligrosa que le ha tocado vivir sino también por el ambiente en el que se ha instalado... donde no existe el mañana y pensar en él es algo que no puede permitirse.
El estilo narrativo es directo y sencillo.
La trama se centra en todo lo que ocurre alrededor de la joven, sin olvidar mostrarnos la lucha que se libra en su interior, entre su deber como alemana, como trabajadora al servicio del Reich y sus verdaderas lealtades.
Los personajes se dividen en dos grupos: reales y ficticios, pero también existe otra subdivisión, los buenos y los que desde el comienzo no nos van a gustar.
De entre todos estos personajes solo hay uno que sobresale, y es precisamente ella, no solo porque sea la protagonista, sino también la cronista y nuestra guía por el relato.
Es cierto que, como habéis podido ver, también es la historia de Alemania, pero solo tratada de fondo. Magda nos muestra lo que sucede a su alrededor, lo que le afecta a ella. Supongo que estaréis pensando que Hitler también debe ser un gran personaje, porque su protagonismo histórico así lo requiere; pero aquí el dictador es tan solo un mero secundario. Entra y sale de los escenarios, sabemos que siempre está de fondo, como si fuese un personaje omnipresente, pero siempre con un protagonismo pasivo.
A pesar de esto, me ha gustado muchísimo la descripción que se hace sobre el dictador. Aunque no profundiza en él, sí nos muestra esa atracción que desprendía, toda esa propaganda engañosa que vertían sobre Alemania y que llevaba a sus gentes a confiar plenamente en los delirios de un loco. El autor tampoco omite en esa descripción el deterioro físico que va sufriendo y que poco se menciona en otros libros.
Esta obra esconde una historia emocionante, con intrigas y grandes momentos de tensión, sin olvidar por supuesto a unos personajes bastante interesantes.
Siempre me han gustado las historias inspiradas en la II Guerra Mundial, y esta, al igual que "La ladrona de libros" deja ese regusto tan especial, ese sabor agridulce que hace que sus personajes y la trama perduren en el tiempo.
"Al otro lado de la ventana, el mundo parecía soleado y alegre, pero, al igual que todo lo demás, el agradable clima no era más que una ilusión, una distracción de la verdad" .
Para terminar os diré que, aunque la historia de Magda es el corazón de esta novela, este tipo de obras siempre esconden mucho más, manipulación ideológica, muerte y destrucción, extremismo... resumiendo, historias que nos hacen reflexionar.
Etiquetas:
Dramática,
Novela Histórica,
V.S. Alexander
martes, 1 de octubre de 2019
El misterio del cuarto amarillo de Gastón Leroux
El misterio del cuarto amarillo (Las aventuras de Joseph Rouletabille 01)
Sinopsis:
El misterio del cuarto amarillo
Abogado durante un breve periodo de tiempo en su juventud, luego avispado periodista de tribunales y finalmente escritor de éxito, Gaston Leroux (1868-1929) es autor de las que son sin duda algunas de las obras más populares de la literatura francesa.
Entre ellas destaca "El misterio del cuarto amarillo" (1907), clásico de la literatura policíaca y de intriga en la que su protagonista, el periodista Rouletabille (perteneciente a la estirpe del Dupin de Poe y el Holmes de Conan Doyle), se ve enfrentado al reto de despejar un enigma aparentemente irresoluble, como es el de un crimen y la posterior huida del criminal en el interior de una estancia inaccesible.
Opinión: El misterio del cuarto amarillo (Las aventuras de Joseph Rouletabille 01)
Seguro que a todos os suena el nombre de Gastón Leroux, ya que es el autor, mundialmente célebre, de "El fantasma de la ópera"; un gran clásico del género gótico ya reseñado en el blog.
Lo que no todo el mundo sabe es que, más allá de la gran obra, también fue un reconocido escritor de novela policíaca y de misterio.
Leroux curso estudios de Derecho, pero una inesperada herencia y el brillo fascinante que desprendían los cabarets de la Belle Époque, los clubs nocturnos, las bellas mujeres y un exceso de absenta, sumado al mundillo literario que se movía cómodamente entre ellos, le hicieron abandonar la profesión de abogado y abrazar el emocionante mundo literario.
Tras quedarse sin blanca empieza a trabajar en el periódico "Le Matin", a cargo de la crónica judicial, y es allí donde entra en contacto con toda suerte de individuos, desde ricos a maleantes, que serán precisamente los que le inspiren a la hora de crear los personajes de sus historias.
En 1917 publica esta novela de la que hoy os hablo, y que será la primera en la que aparezca su alter ego, el periodista Joseph Rouletabille, y que se hará cargo del protagonismo de toda una saga que le proporcionará un gran éxito, convirtiéndole en toda una celebridad.
Leroux, admirador de Poe y de Conan Doyle, se inspirará en sus obras para dar vida a un personaje, que siendo periodista como él, adopta el papel de investigador.
En este libro vamos a encontrarnos con un clásico del misterio, un crimen cometido al estilo de los de "cuarto cerrado", e incluso muchos amantes de la novela enigma dicen que en esta historia, se encuentra uno de los misterios más elaborados y originales de ese estilo.
La saga cuenta con siete novelas, ya que al llegar a ese número Gastón y pese al gran éxito que obtuvo, decidió abandonar al personaje.
Hay algo curioso en esta historia, y es la gran cantidad de semejanzas que encontramos con otras narraciones de la época...
El narrador empleado es un personaje que hace de cronista, el abogado Gaston Sainclair.
El intentará respetar la versión original de los hechos, pero, aparentemente como personaje, tiene poco protagonismo en el caso.
Es un testigo de los sucesos que acompaña, la mayor parte del tiempo, al personaje principal.
Este narrador va a relatar la aventura y desempeña la misma función literaria que el "Hastings" de Poirot.
Para todos aquellos que hayáis leído la obra de Agatha Christie os resultará fácilmente reconocible esa función e incluso encontraréis paralelismos entre los personajes.
Para los que no... yo os los cuento.
Hastings es el encargado de narrar muchas de las aventuras de Poirot. La mayoría de las veces, falla en sus deducciones, y el detective belga ironiza con la forma de pensar del personaje.
Rouletabille, nuestro protagonista de hoy, actúa del mismo modo que Poirot.
Tiene una gran capacidad deductiva y veremos, como en ocasiones, también ironiza con las pobres deducciones de Sainclair. Pero este joven reportero, es anterior a la creación de los personajes de Christie.
Como veis la literatura se nutre de la literatura, y los creadores se inspiran en lo ya leído a la hora de imaginar nuevas aventuras.
Pero sigamos hablando de paralelismos...
Los lectores vamos a encontrar más semejanzas entre este caso y otros surgidos en el campo de la imaginación, como por ejemplo, "Los crímenes de la calle Morgue" (1841) de Poe, lo que ocurre es que Gastón Leroux, dando voz a uno de sus personajes, quita algo de mérito a esas obras a las que hace referencia, mostrando que este caso del "cuarto amarillo", es mucho más complejo.
La verdad es que en eso el autor tiene razón.
El planteamiento del caso es tan original, que los lectores nos vemos involucrados, intentando desentrañar un oscuro y complicado problema; un caso que a simple vista parece no tener una solución lógica. Vamos a sumergirnos de golpe en varios misterios, no solo cómo se escabulló el criminal de la escena, sino también cuál es la identidad y el móvil que empuja a cometer el crimen.
El ritmo de esta obra, para mi gusto, es demasiado pausado, pero Leroux vuelve a hacer uso de uno de los personajes, dándole el don de la palabra para explicar el motivo...
Sainclair nos informa que la precisión del relato que afecta al ritmo, se debe a que quiere estar seguro de no omitir ningún detalle, que pueda afectar a las condiciones en las que se produce el extraño fenómeno en "el cuarto amarillo", de esa forma mata dos pájaros de un tiro... demuestra que está hecho a propósito y nos calla a los que nos quejamos de la lentitud narrativa.
Unos párrafos atrás os dije que Sainclair tiene, en apariencia, un protagonismo limitado en los hechos. Eso es cierto, lo que ocurre es que el personaje es importante en esta historia por ser el narrador, y como ya habéis visto, es el elemento a través del cual el autor se pone en contacto con nosotros, los lectores.
El será la voz de Leroux además, por supuesto, de asumir la dirección en la crónica. Hará de guía minucioso, eso ya lo he dicho y será quien añada tanto planos de los escenarios, para facilitar la comprensión del caso al lector, como anotaciones que hará Rouletabille cuando el abogado esté ausente.
Sin duda, "el misterio del cuarto amarillo" es una de las obras mejor estructuradas dentro del género, y os aseguro que os dejará ese regusto tan especial que dejan las grandes novelas de misterio clásicas.
Sinopsis:
El misterio del cuarto amarillo
Abogado durante un breve periodo de tiempo en su juventud, luego avispado periodista de tribunales y finalmente escritor de éxito, Gaston Leroux (1868-1929) es autor de las que son sin duda algunas de las obras más populares de la literatura francesa.
Entre ellas destaca "El misterio del cuarto amarillo" (1907), clásico de la literatura policíaca y de intriga en la que su protagonista, el periodista Rouletabille (perteneciente a la estirpe del Dupin de Poe y el Holmes de Conan Doyle), se ve enfrentado al reto de despejar un enigma aparentemente irresoluble, como es el de un crimen y la posterior huida del criminal en el interior de una estancia inaccesible.
Opinión: El misterio del cuarto amarillo (Las aventuras de Joseph Rouletabille 01)
Seguro que a todos os suena el nombre de Gastón Leroux, ya que es el autor, mundialmente célebre, de "El fantasma de la ópera"; un gran clásico del género gótico ya reseñado en el blog.
Lo que no todo el mundo sabe es que, más allá de la gran obra, también fue un reconocido escritor de novela policíaca y de misterio.
Leroux curso estudios de Derecho, pero una inesperada herencia y el brillo fascinante que desprendían los cabarets de la Belle Époque, los clubs nocturnos, las bellas mujeres y un exceso de absenta, sumado al mundillo literario que se movía cómodamente entre ellos, le hicieron abandonar la profesión de abogado y abrazar el emocionante mundo literario.
Tras quedarse sin blanca empieza a trabajar en el periódico "Le Matin", a cargo de la crónica judicial, y es allí donde entra en contacto con toda suerte de individuos, desde ricos a maleantes, que serán precisamente los que le inspiren a la hora de crear los personajes de sus historias.
En 1917 publica esta novela de la que hoy os hablo, y que será la primera en la que aparezca su alter ego, el periodista Joseph Rouletabille, y que se hará cargo del protagonismo de toda una saga que le proporcionará un gran éxito, convirtiéndole en toda una celebridad.
Leroux, admirador de Poe y de Conan Doyle, se inspirará en sus obras para dar vida a un personaje, que siendo periodista como él, adopta el papel de investigador.
En este libro vamos a encontrarnos con un clásico del misterio, un crimen cometido al estilo de los de "cuarto cerrado", e incluso muchos amantes de la novela enigma dicen que en esta historia, se encuentra uno de los misterios más elaborados y originales de ese estilo.
La saga cuenta con siete novelas, ya que al llegar a ese número Gastón y pese al gran éxito que obtuvo, decidió abandonar al personaje.
Hay algo curioso en esta historia, y es la gran cantidad de semejanzas que encontramos con otras narraciones de la época...
El narrador empleado es un personaje que hace de cronista, el abogado Gaston Sainclair.
El intentará respetar la versión original de los hechos, pero, aparentemente como personaje, tiene poco protagonismo en el caso.
Es un testigo de los sucesos que acompaña, la mayor parte del tiempo, al personaje principal.
Este narrador va a relatar la aventura y desempeña la misma función literaria que el "Hastings" de Poirot.
Para todos aquellos que hayáis leído la obra de Agatha Christie os resultará fácilmente reconocible esa función e incluso encontraréis paralelismos entre los personajes.
Para los que no... yo os los cuento.
Hastings es el encargado de narrar muchas de las aventuras de Poirot. La mayoría de las veces, falla en sus deducciones, y el detective belga ironiza con la forma de pensar del personaje.
Rouletabille, nuestro protagonista de hoy, actúa del mismo modo que Poirot.
Tiene una gran capacidad deductiva y veremos, como en ocasiones, también ironiza con las pobres deducciones de Sainclair. Pero este joven reportero, es anterior a la creación de los personajes de Christie.
Como veis la literatura se nutre de la literatura, y los creadores se inspiran en lo ya leído a la hora de imaginar nuevas aventuras.
Pero sigamos hablando de paralelismos...
Los lectores vamos a encontrar más semejanzas entre este caso y otros surgidos en el campo de la imaginación, como por ejemplo, "Los crímenes de la calle Morgue" (1841) de Poe, lo que ocurre es que Gastón Leroux, dando voz a uno de sus personajes, quita algo de mérito a esas obras a las que hace referencia, mostrando que este caso del "cuarto amarillo", es mucho más complejo.
La verdad es que en eso el autor tiene razón.
El planteamiento del caso es tan original, que los lectores nos vemos involucrados, intentando desentrañar un oscuro y complicado problema; un caso que a simple vista parece no tener una solución lógica. Vamos a sumergirnos de golpe en varios misterios, no solo cómo se escabulló el criminal de la escena, sino también cuál es la identidad y el móvil que empuja a cometer el crimen.
El ritmo de esta obra, para mi gusto, es demasiado pausado, pero Leroux vuelve a hacer uso de uno de los personajes, dándole el don de la palabra para explicar el motivo...
Sainclair nos informa que la precisión del relato que afecta al ritmo, se debe a que quiere estar seguro de no omitir ningún detalle, que pueda afectar a las condiciones en las que se produce el extraño fenómeno en "el cuarto amarillo", de esa forma mata dos pájaros de un tiro... demuestra que está hecho a propósito y nos calla a los que nos quejamos de la lentitud narrativa.
Unos párrafos atrás os dije que Sainclair tiene, en apariencia, un protagonismo limitado en los hechos. Eso es cierto, lo que ocurre es que el personaje es importante en esta historia por ser el narrador, y como ya habéis visto, es el elemento a través del cual el autor se pone en contacto con nosotros, los lectores.
El será la voz de Leroux además, por supuesto, de asumir la dirección en la crónica. Hará de guía minucioso, eso ya lo he dicho y será quien añada tanto planos de los escenarios, para facilitar la comprensión del caso al lector, como anotaciones que hará Rouletabille cuando el abogado esté ausente.
Sin duda, "el misterio del cuarto amarillo" es una de las obras mejor estructuradas dentro del género, y os aseguro que os dejará ese regusto tan especial que dejan las grandes novelas de misterio clásicas.
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Gastón Leroux,
Narrativa Clásica,
Novela enigma,
Novela Policíaca
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