Sinopsis:
Durante una selecta velada en la mansión de Charles Richmond, aclamado productor de cine y jefe de los Estudios con el mismo nombre, tendrá lugar un asesinato. El mayordomo de la mansión, Bernard, será la víctima.
En esa noche de tormenta, y a la espera de la llegada de la policía, Melvin Drake, guionista de los Estudios Richmond, será quién haga de detective reuniendo todas las pistas. Poco a poco seremos testigos de muchas revelaciones y muchos más secretos sobre a los habitantes de la mansión y los propios invitados.
Una trama llena de giros que productor y guionista no dudarán en llevar a la gran pantalla como el nuevo éxito de taquilla: Morirse es de mal gusto.
Opinión:
Curioseando por la página de la editorial Planeta, llegué hasta este libro de Click ediciones, uno de los sellos del Grupo Planeta que solo publica obras inéditas y en formato digital. Este sello, según informan en su web, pretende descubrir a nuevos autores.
Pues bien, cuando vi la portada de este libro, me recordó muchísimo a otro que hacía leído hace poco: "Las siete muertes de Evelyn Hardcastle", y movida por la curiosidad me fui directamente a leer la sinopsis, que como habéis podido comprobar resulta de lo más atractiva.
Ahora lo traigo hasta esta estantería virtual para hablaros sobre él.
Es una novela muy cortita que evoca la estructura de las escritas por Agatha Christie; una mansión con un buen montón de personajes y motivos para cometer un asesinato, además del habitual homicidio.
Los lectores nos vamos a encontrar con un asesinato al más puro estilo de "misterio del cuarto cerrado", ya que los personajes permanecen en la mansión, incomunicados con el exterior, mientras la investigación que se desarrolla en un periodo de tiempo muy breve, una sola noche, va desvelando secretos sobre ellos. El encargado de llevar a cabo esta investigación será un guionista de películas, alguien que obligado por la situación debe encarnar el papel de detective aficionado.
Esta historia al mismo tiempo nos lleva a pensar en una obra teatral o una de esas películas en plan parodia de detectives, ya que el autor encamina la narración hacia la comedia de enredo, adornándola con ligeros toques de humor que amenizan su lectura, por supuesto no puedo olvidar mencionar el giro inesperado del final.
Y prácticamente ya termino, veréis que la reseña es muy breve pero es que el libro también lo es. He dejado para el final el detalle que menos me ha gustado y es en relación a la caracterización de los personajes.
Estos me han parecido demasiado superficiales.
Aunque están construidos sobre los clásicos clichés, ese no es motivo para no haber profundizado en ellos. Se comportan de una manera muy previsible y ninguno de ellos evoluciona a lo largo de la trama. Quizás una caracterización más compleja habría dotado de más factor sorpresa a esta historia.
Espacio sobre libros y opiniones, difusión y fomento de la lectura. El lugar donde los libros son los protagonistas.
martes, 5 de noviembre de 2019
martes, 29 de octubre de 2019
La Cadena de Adrian McKinty
Sinopsis:
Como una mañana cualquiera, Rachel deja a su hija en la parada del autobús. Pero una llamada de un número desconocido lo cambia todo: una mujer le informa que tiene a Kylie secuestrada y que, si quiere verla de nuevo, deberá seguir sus instrucciones al pie de la letra: primero, pagar un rescate; segundo, secuestrar a otro niño. Quien llama es también una madre cuyo hijo ha sido secuestrado, y si Rachel no cumple con las reglas, el niño morirá, y su hija también.
Rachel ya forma parte de La Cadena, un mecanismo que convierte a padres de familia en víctimas y a su vez en criminales, y que está haciendo a alguien muy rico en el proceso. Ella es una mujer corriente, pero en pocas horas los acontecimientos la llevarán hasta límites impensables y la obligarán a hacer algo terrible.
Los creadores de La Cadena saben que unos padres harán todo lo que está en sus manos por sus hijos. Pero no contaban con cruzarse en el camino de una mujer decidida, valiente y superviviente como Rachel. Porque, si alguien puede romperla, ésa es ella.
Opinión:
La Cadena, la historia que hoy os traigo a esta estantería virtual, fue escrita en un comienzo como relato breve, de esa forma permaneció escondida en el fondo de un cajón hasta 2017, momento en el que el agente literario del autor le propuso desarrollar el argumento en Estados Unidos, comenzando así una nueva Cadena.
El mecanismo sobre el que se construye el argumento de esta novela es muy sencillo, La Cadena es un sistema de explotación de la emoción humana. Convierte a padres en criminales y en víctimas al mismo tiempo.
Los eslabones que mantienen unidos la cadena y que la hacen crecer, no es el miedo, como podríamos pensar en un principio al leer la sinopsis, sino el amor. Amor de cualquier tipo, maternal, filial o romántico, que impulsará a hacer lo que sea por el ser querido.
Sobre esta idea básicamente es sobre la que se construye la novela, una historia que debo reconocer que tiene un comienzo muy potente e impactante.
Adrian McKinty nos sumerge de golpe en la trama, no da tiempo a que el lector se vaya habituando al narrador, a la forma de contar o a los personajes, en los que por cierto no profundiza mucho.
Su relato te atrapa desde la primera linea, aportando tensión y suspense que dosifica valiéndose de capítulos muy breves.
El narrador, en tercera persona, nos relata de forma lineal los acontecimientos, eso sí, saltando de un personaje a otro, de esta forma, mediante los cliffhangers deja colgada la trama en el momento más intenso, sostenida únicamente por un hilo muy fino.
Ahora bien, en una novela de comienzo tan impactante, sabiendo que está en vías de publicación en más de 40 países y que ya se han vendido los derechos para ser llevada a la gran pantalla, pensé que los giros argumentales estarían asegurados y que la historia no se mantendría solo a base de cliffhangers.
Al llegar a la mitad de la novela, más o menos, aprecié una bajada en el ritmo narrativo; la historia empezaba a perder fuelle.
En ese punto una parte de la trama, la que nos ha guiado hasta el momento, queda resuelta. El autor, a partir de ahí, recurre a narraciones retrospectivas para mostrarnos otra parte de la historia, la que se refiere a quiénes son los cerebros que se esconden detrás de La Cadena, alternando, eso sí, esos fragmentos con la vida actual de los protagonistas, que continúan lógicamente con sus vidas.
¿Pero qué ocurre? pues lo que ya he mencionado, que para mantener la tensión y al lector pegado a las páginas se necesitan más cosas, no solo de cliffhangers vive el hombre.
Hay un gran potencial en el argumento, no hace falta que nos digan en la faja del libro Ian Rankin, John Katzenbach o el mismísimo Stephen King, que la historia es tremendamente adictiva y original... pero bajo mi punto de vista, ese gran potencial está infrautilizado.
La historia se vuelve demasiado previsible, ¿y qué hace que un libro se vuelva previsible? no es que el autor de demasiada información, es que la que da, no se molesta en esconderla, y los lectores vemos venir los sucesos desde bastante lejos.
La novela se divide en dos partes, y yo que no tengo olfato sabueso descubrí al llegar al segundo tramo de la historia, quién era la persona que se ocultaba detrás de la cadena.
Un thriller que se precie o una novela policíaca de calidad, debe ofrecer una trama con suspense, con tensión, y al final, una resolución a la que el lector más agudo, debería llegar de forma lógica. Pero como digo en esta historia no hay artificios engañosos, solo pistas puestas al descubierto.
Por otro lado, quizás de haber utilizado otro tipo de narrador, por ejemplo en primera persona, el relato se hubiese vuelto más cercano y la empatía que surgiría de él, haría que el lector se creyese los giros colocados al final, que para mi gusto resultan de lo más inverosímiles.
Es una buena novela, sí, pero se parece demasiado a un guion de serie, de esas en la que solo vemos acción, acción y acción, desde el comienzo, y dejan muy poco en pro de la imaginación.
Debemos disfrutar de la lectura, y yo lo he hecho, pero no a tope como esperaba al comienzo.
Algunas personas que me recomendaron con fuerza esta historia, se sorprenderán al leer mi opinión final, pero la lectura es una experiencia personal y cada uno vivimos los libros de forma distinta.
Las razones expuestas, son propias, cada lector tendrá las suyas. Esto lo digo porque últimamente opinar algo distinto a lo que piensa la masa se está convirtiendo en un deporte de alto riesgo, y aunque suene repetitivo, para gustos los colores.
Como una mañana cualquiera, Rachel deja a su hija en la parada del autobús. Pero una llamada de un número desconocido lo cambia todo: una mujer le informa que tiene a Kylie secuestrada y que, si quiere verla de nuevo, deberá seguir sus instrucciones al pie de la letra: primero, pagar un rescate; segundo, secuestrar a otro niño. Quien llama es también una madre cuyo hijo ha sido secuestrado, y si Rachel no cumple con las reglas, el niño morirá, y su hija también.
Rachel ya forma parte de La Cadena, un mecanismo que convierte a padres de familia en víctimas y a su vez en criminales, y que está haciendo a alguien muy rico en el proceso. Ella es una mujer corriente, pero en pocas horas los acontecimientos la llevarán hasta límites impensables y la obligarán a hacer algo terrible.
Los creadores de La Cadena saben que unos padres harán todo lo que está en sus manos por sus hijos. Pero no contaban con cruzarse en el camino de una mujer decidida, valiente y superviviente como Rachel. Porque, si alguien puede romperla, ésa es ella.
Opinión:
La Cadena, la historia que hoy os traigo a esta estantería virtual, fue escrita en un comienzo como relato breve, de esa forma permaneció escondida en el fondo de un cajón hasta 2017, momento en el que el agente literario del autor le propuso desarrollar el argumento en Estados Unidos, comenzando así una nueva Cadena.
El mecanismo sobre el que se construye el argumento de esta novela es muy sencillo, La Cadena es un sistema de explotación de la emoción humana. Convierte a padres en criminales y en víctimas al mismo tiempo.
Los eslabones que mantienen unidos la cadena y que la hacen crecer, no es el miedo, como podríamos pensar en un principio al leer la sinopsis, sino el amor. Amor de cualquier tipo, maternal, filial o romántico, que impulsará a hacer lo que sea por el ser querido.
Sobre esta idea básicamente es sobre la que se construye la novela, una historia que debo reconocer que tiene un comienzo muy potente e impactante.
Adrian McKinty nos sumerge de golpe en la trama, no da tiempo a que el lector se vaya habituando al narrador, a la forma de contar o a los personajes, en los que por cierto no profundiza mucho.
Su relato te atrapa desde la primera linea, aportando tensión y suspense que dosifica valiéndose de capítulos muy breves.
El narrador, en tercera persona, nos relata de forma lineal los acontecimientos, eso sí, saltando de un personaje a otro, de esta forma, mediante los cliffhangers deja colgada la trama en el momento más intenso, sostenida únicamente por un hilo muy fino.
Ahora bien, en una novela de comienzo tan impactante, sabiendo que está en vías de publicación en más de 40 países y que ya se han vendido los derechos para ser llevada a la gran pantalla, pensé que los giros argumentales estarían asegurados y que la historia no se mantendría solo a base de cliffhangers.
Al llegar a la mitad de la novela, más o menos, aprecié una bajada en el ritmo narrativo; la historia empezaba a perder fuelle.
En ese punto una parte de la trama, la que nos ha guiado hasta el momento, queda resuelta. El autor, a partir de ahí, recurre a narraciones retrospectivas para mostrarnos otra parte de la historia, la que se refiere a quiénes son los cerebros que se esconden detrás de La Cadena, alternando, eso sí, esos fragmentos con la vida actual de los protagonistas, que continúan lógicamente con sus vidas.
¿Pero qué ocurre? pues lo que ya he mencionado, que para mantener la tensión y al lector pegado a las páginas se necesitan más cosas, no solo de cliffhangers vive el hombre.
Hay un gran potencial en el argumento, no hace falta que nos digan en la faja del libro Ian Rankin, John Katzenbach o el mismísimo Stephen King, que la historia es tremendamente adictiva y original... pero bajo mi punto de vista, ese gran potencial está infrautilizado.
La historia se vuelve demasiado previsible, ¿y qué hace que un libro se vuelva previsible? no es que el autor de demasiada información, es que la que da, no se molesta en esconderla, y los lectores vemos venir los sucesos desde bastante lejos.
La novela se divide en dos partes, y yo que no tengo olfato sabueso descubrí al llegar al segundo tramo de la historia, quién era la persona que se ocultaba detrás de la cadena.
Un thriller que se precie o una novela policíaca de calidad, debe ofrecer una trama con suspense, con tensión, y al final, una resolución a la que el lector más agudo, debería llegar de forma lógica. Pero como digo en esta historia no hay artificios engañosos, solo pistas puestas al descubierto.
Por otro lado, quizás de haber utilizado otro tipo de narrador, por ejemplo en primera persona, el relato se hubiese vuelto más cercano y la empatía que surgiría de él, haría que el lector se creyese los giros colocados al final, que para mi gusto resultan de lo más inverosímiles.
Es una buena novela, sí, pero se parece demasiado a un guion de serie, de esas en la que solo vemos acción, acción y acción, desde el comienzo, y dejan muy poco en pro de la imaginación.
Debemos disfrutar de la lectura, y yo lo he hecho, pero no a tope como esperaba al comienzo.
Algunas personas que me recomendaron con fuerza esta historia, se sorprenderán al leer mi opinión final, pero la lectura es una experiencia personal y cada uno vivimos los libros de forma distinta.
Las razones expuestas, son propias, cada lector tendrá las suyas. Esto lo digo porque últimamente opinar algo distinto a lo que piensa la masa se está convirtiendo en un deporte de alto riesgo, y aunque suene repetitivo, para gustos los colores.
miércoles, 23 de octubre de 2019
IT de Stephen King
Sinopsis:Tras lustros de tranquilidad y lejanía, una antigua promesa infantil les hace volver al lugar en el que vivieron su infancia y juventud como una terrible pesadilla.
Regresan a Derry para enfrentarse con su pasado y enterrar definitivamente la amenaza que los amargó durante su niñez.
Saben que pueden morir, pero son conscientes de que no conocerán la paz hasta que aquella cosa sea destruida para siempre.
It es una de las novelas más ambiciosas de Stephen King, donde ha logrado perfeccionar de un modo muy personal las claves del género de terror.
Opinión:
Supongo que ya habréis leído otras opiniones mías sobre este autor.
No solo creo que es el mejor autor del género de terror, sino que también el más completo y prolífico. Tiene una capacidad sorprendentemente imaginativa, aunque también hay que señalar que su carrera pasó por horas bajas.
Esta obra junto a Apocalipsis (que quiero releer en breve), El resplandor y El misterio de Salem's Lot, es de las que más me ha gustado; fue escrita en 1986 y tiene varios detalles curiosos que me gustaría comentaros.
Pennywise.Lo primero que quiero hacer es reivindicar el protagonismo de esta narración para el monstruo, porque parece que tanto los lectores como la editorial, por lo que veo en la sinopsis, se empeñan en situarle solo como antagonista y personaje secundario.
En general se dice que esta es la historia de una pandilla de chicos perseguidos por un monstruo, y no es del todo así.
Esta obra narra la historia de IT, un ser que lleva en la tierra más que nosotros; un monstruo capaz de cambiar de forma alimentándose de los terrores de sus víctimas y que despierta cada 27 años para alimentarse, sembrando el terror en Derry.
La pandilla de "Los perdedores", por supuesto que van a ser protagonistas, pero parece que le restan protagonismo a IT porque ellos además de ser personajes también desempeñan la función de narradores, y como tal, en algún momento tomarán las riendas del relato.Lo que sí es cierto es que IT, en la primera parte, tiene una actuación más pasiva, aparece en varias escenas como un personaje incidental, mientras en la segunda parte el personaje reclama gran parte del protagonismo.
Derry.Stephen King sitúa la trama de esta novela en Derry, ciudad ficticia ubicada en el estado de Maine. Según el autor, Derry es su interpretación de la ciudad de Bangor, ciudad que sí existe en ese mismo estado.
Los que conozcáis parte de la obra de King sabréis que sitúa la mayoría de sus novelas en ese estado, como si esa atmósfera fantástica que se respira allí fuese vigorizantemente creativa.
Volviendo a Pennywise.El escalofriante payaso, protagonista de esta novela, está inspirado en un asesino serial real, John Wayne Gacy, conocido como Pogo el Payaso. Este asesino en serie conmocionó a los Estados Unidos durante la década de los setenta tras asesinar a 33 personas, todas ellas adolescentes.
Pennywise es un personaje recurrente a lo largo de toda la obra de King, ya que aparecerá en varios libros mencionados... habrá que seguir buscando.
Narradores y épocas.Uno de los detalles que más me ha gustado es la alternancia de narradores. Vamos a tener un narrador en tercera persona omnisciente y al mismo tiempo narradores en primera persona, ya que cada uno de los integrantes de la pandilla de "Los perdedores" nos va a narrar parte de los hechos.
Esa alternancia nos puede resultar complicada al principio, si le añadimos que también vamos a enfrentarnos a una estructura narrativa no lineal, con alternancia de épocas, pasando de 1957 a 1985.
Personajes.Nos vamos a encontrar con los clásicos personajes de King; gente normal y corriente que se enfrentan al mal a pesar del terror que sienten. Quizás esto sea lo que nos hace empatizar con ellos y lo que da a sus obras el toque especial. Las situaciones narradas, irreales e incluso surrealistas, cambian bajo su pluma y nos hacen percibirlas como posiblemente reales.
Manejando realidad y ficción.Hay partes de esta historia que consiguen ponerte la piel de gallina. Te sientes en la piel del personaje, notas la soledad que le rodea y la impotencia ante los hechos que se le avecinan; no me refiero solamente a las escenas de terror. Los niños que protagonizan esta obra se enfrentan en soledad a los abusos y al maltrato, quizás por ese motivo, al estar juntos, forman una piña y se convierten en especiales. Da igual que seas gordo, tartamudo o de diferente raza o religión, juntos son Uno.
IT vs Fantasmas.Mucha gente dice que esta novela tiene muchas escenas y personajes, incluido el monstruo, que nos pueden recordar a Fantasmas de Dean Koontz, escrita en 1983.
Respecto a los monstruos, que ambos son capaces de cambiar de forma, existen infinidad de referencias anteriores, por ejemplo en la obra de Lovecraft.
Y respecto al argumento, y siempre bajo mi punto de vista, creo que King consiguió construir, con las mismas ideas, una historia sobradamente mejor, más compleja y elaborada, como estáis comprobando, a la que no le sobran páginas, e incluso remitiéndonos al final, King lo borda y lo hace real.
Lo que más me ha gustado:La técnica espectacular de King para transportarnos de la narración de un personaje a otro y del presente al pasado, y por supuesto los personajes, incluido Pennywise.
Una obra genial, que no os podéis perder.
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