lunes, 6 de octubre de 2014

La hermandad de Marcos Chicot


Sinopsis:

LA LUCHA CONTRA UN ENEMIGO AL QUE NI LA MUERTE PUEDE DETENER.
"El presente y el pasado se unen de un modo sorprendente en la novela más fascinante de los últimos años."
España, siglo XXI: Irina, Daniel y Elena desarrollan proyectos punteros que exploran las capacidades y los límites del cerebro y los ordenadores. Cuando se conocen a través de Mensa, la mayor organización de superdotados del mundo, descubrirán que nada es lo que parece y que ellos son las piezas decisivas de una guerra que comenzó hace 2.500 años.
Cartago, siglo VI a. C.: Ariadna, hija del filósofo Pitágoras, recibe junto a su esposo Akenón un pergamino con una noticia que encarna la peor de sus pesadillas. El terrible mensaje incluye un pentáculo invertido, el símbolo abominable que representa todo lo opuesto a las elevadas enseñanzas de su padre. De inmediato se desata una vertiginosa espiral asesina tras la que se adivina una mente poderosa y despiadada.
En ambas épocas, los protagonistas intentarán descubrir la identidad de su enemigo antes de que acabe con todos ellos… pero se encontrarán con respuestas para las que no están preparados.
UNA TRAMA IMPACTANTE, UNA HERMANDAD MILENARIA, UNA LUCHA DE INTELECTOS QUE DETERMINARÁ EL DESTINO DE LA HUMANIDAD.

Opinión:

Antes de comenzar la reseña, quiero dar las gracias especialmente a su autor, Marcos Chicot, por ponerse en contacto conmigo para enviarme su nueva novela.
Me considero una gran privilegiada, por haber tenido la oportunidad de disfrutar de ella, antes de que saliese a la venta, ya que su lanzamiento está previsto para el 13 de Octubre/2014.
Desde este blog solo me queda desearle la mejor de las suertes, ya que la obra tiene calidad de sobra para triunfar y situarse entre las más vendidas, como ya sucedió con la anterior, El asesinato de Pitágoras.

Para empezar os diré, que la Hermandad más que una continuación de El asesinato de Pitágoras, yo lo consideraría una nueva aventura donde aparecen algunos de los principales personajes de su anterior obra.
Las dos historias pueden leerse de forma totalmente independiente, ya que son autoconclusivas y su autor, cuando cita datos del pasado que hacen referencia, a hechos ocurridos en El asesinato de Pitágoras, añade una breve descripción de esos sucesos.
Aun así, para no perder ningún detalle, yo os recomendaría si no habéis leído la primera, que lo hagáis, porque aporta datos muy interesantes y que facilitan la lectura en este segundo libro.

Las dos novelas de Marcos Chicot comparten varios detalles importantes, y es que la acción comienza desde las primeras páginas y la trama va en aumento sin decaer en ningún punto de la narración..
En conjunto son dos libros muy, pero que muy recomendables, para los lectores que buscan aventuras sin tener que moverse del sillón.

Si ya El asesinato de Pitágoras, no nos defraudó, os puedo asegurar que aquí la trama mejora mucho. La forma de escribir de su autor me recuerda en numerosas ocasiones a Christian Jacq, mezclando ficción con hechos reales, a la vez que nos mantiene enganchados con una novela de intriga o policíaca.

La narración está escrita con un ritmo ágil y fluido, donde no se prescinde de las necesarias descripciones, que aportan el ambiente real.
Ese ritmo, se transmite a la forma de leer del lector, que ve pasar las hojas enfrascado en el argumento, mientras se recrea en las completas descripciones de los escenarios.
Su autor, según avanza la trama va diseminando algunas sorpresas a lo largo de la historia. Da pequeños giros, los suficientes, para crear un ambiente de misterio y suspense que enganche al lector... y os aseguro que lo consigue. Con este efecto logra que se despierte la curiosidad en el lector, eso sí, Marchos Chicot también se reserva algún que otro detalle, totalmente inesperado, para momentos claves de la historia, giros que conseguirán que el lector se mantenga en un sinvivir, plagado de dudas hasta el final del libro.

El argumento nos sitúa tres años después de los acontecimientos narrados en El asesinato de Pitágoras. Concretamente, en el año 507 a.C en Cartago, y nos encontraremos de nuevo con Ariadna y Akenón.
Pero esos no serán los únicos personajes que aparecerán, como ya supondréis. Harán acto de presencia, esas figuras oscuras a las que ya nos tiene acostumbrados su autor. Estos personajes llaman la atención porque son realmente, malos a conciencia. Son de esos individuos dotados de una mente perversa y dañina que parece, que siempre se las ingenian para salir indemnes de todas las situaciones.

Los que esperáis encontrar una novela como la anterior, id olvidando esa idea, porque como os he dicho, esta es distinta y mucho mejor.
En esta ocasión su autor nos depara una nueva vuelta de tuerca.
La intriga histórica continúa, pero esta vez, alterna los hilos argumentales desarrollados en Cartago, con sucesos en la actualidad, ubicando estos últimos en Madrid.
Esa alternancia de capítulos, se disfruta más aun debido al excelente uso que hace de un recurso llamado Cliffhanger, del que ya os he hablado en alguna otra ocasión. Interrumpe la escena cuando se encuentra en el punto álgido, lo único que le falta es añadir... Continuará... y así, consigue mantener la atención del lector hasta que la narración retorne de nuevo a ese punto donde lo dejó.

Los que en su día hablaron de Dan Brown, diciendo que con el Código Da Vinci había obtenido un Bestseller brillante, que esperen a leer este, que poco tiene que envidiarle y que destaca sobre todo, por el ritmo trepidante al que arrastra al lector.

Solo me queda añadir que Marcos Chicot dona el 10% de todo lo que obtiene de sus novelas a ONGs que ayudan a personas discapacitadas.
Creo que es otro motivo a tener en cuenta, a la hora de decidirse por comprar sus obras.

Os pongo un enlace a otra entrada donde muestro un vídeo creado por Marcos Chicot y que tiene relación con lo que se narra en esta novela.
Estoy segura de que os resultará muy interesante.

Descubriendo en cerebro por Marcos Chicot


miércoles, 1 de octubre de 2014

En la hierba alta de Stephen King y Joe Hill

Sinopsis:

Cal y Becky DeMuth son dos hermanos que mantienen una relación casi telepática, pues sus vidas han montado en el mismo tándem desde su nacimiento. Cuando Becky se queda embarazada, decide marcharse a San Diego a casa de sus tíos hasta que nazca el bebé. La unión entre los hermanos es tan fuerte que Cal deja sus estudios para acompañarla y cruzar con ella el país en coche. Incluso planean juntos el futuro del niño. Pero la casualidad intercede en el transcurso del viaje. Al mediodía realizan un alto en el camino junto a un campo de hierba altísima: Cal apaga la radio para tener un momento de calma, y Becky abre las ventanillas, sofocada por el calor. De haber sido de otra manera, nunca habrían oído la voz de auxilio de aquel niño atrapado en la espesura. Deciden adentrarse en el campo y tomar sendas distintas para encontrar al niño cuanto antes. Por primera vez en su vida, los hermanos quedarán separados, aunque sea tan solo por unos metros de hierba. Sin embargo, nunca habían estado tan lejos. Una historia terrorífica narrada con la maestría insuperable de Stephen King.

Opinión:

Nos encontramos ante un relato corto escrito por Stephen King en colaboración con su hijo, el también escritor Joe Hill.
Sobre Stephen King se han dicho muchas cosas. Desde que es el gran mago del terror hasta que en los últimos años ya no es el que era y ha ido perdiendo fuelle. Como siempre hay opiniones para todos los gustos.
Mi opinión, es que las primeras obras de este autor fueron únicas y me gustaron mucho más que las últimas. Es como si hubiese ido perdiendo la chispa con el paso de los años, aunque también puede ser que el público nos hayamos convertido en demasiado exigentes.
Sea como sea, en este relato parece reencontrarse a sí mismo.
Se nota la esencia y brillantez de sus primeras novelas, donde lograba transmitir nerviosismo y angustia desde los primeros capítulos. Donde los lectores nos debatíamos entre las páginas del libro, siempre con piel de gallina, intentando averiguar que ocurriría a continuación. Admirando esa forma única de transmitir ansiedad y que nos mantenía enganchados a lo largo de la obra intentando averiguar el final.

Ahora bien, sobre el hijo también se ha hablado mucho en los últimos años. Dicen que es digno sucesor del padre, que su forma de escribir se asemeja mucho a la de los comienzos de King, en esa época, donde cada novela que sacaba tenía el éxito asegurado.

Yo hasta el momento no he leído nada de Joe Hill, salvo este pequeño relato donde intervienen los dos, por lo tanto, no puedo hacerme una idea clara de su forma de escribir y resulta complicado averiguar donde acaba la genialidad del padre y comienza la del hijo.
Lo que sí os puedo asegurar, es que me ha recordado en la forma de narrar a Desesperación, a Tommyknockers o Apocalipsis... ¡Que años aquellos! cuando en mi librería no faltaba ninguna de las obras del gran genio Stephen King.

Poco más puedo decir de este brevísimo relato con momentos de maestría salvo que es Stephen King en estado puro y no me ha decepcionado lo que he encontrado entre sus páginas. Consigue transmitir suspense y angustia a partes iguales desde el comienzo.
Solo me queda añadir que apunto a mi lista de pendientes las obras de Joe Hill.


domingo, 28 de septiembre de 2014

La biblioteca de los muertos de Glenn Cooper

La biblioteca de los muertos (Will Piper 01)
Sinopsis:
Bretaña, año 777. En la abadía de Vectis crece Octavus, un niño sobre el que pesa una maldición: es el séptimo hijo engendrado por un séptimo hijo y la leyenda le vaticina poderes diabólicos. Octavus comienza a escribir una lista con fechas y nombres sin sentido. Cuando uno de los nombres y su fecha coinciden con una muerte en la abadía, el miedo se apodera de los monjes. Siglos después, los miembros de la Orden de los Nombres, descendientes todos de aquel niño, siguen escribiendo sin descanso para completar un misterioso listado de nombres y fechas... Hasta que empiezan a suicidarse. Estados Unidos, en la actualidad. Nueve personas han aparecido muertas en Nueva York, desconocidos que nada tenían en común. Solo una cosa les unía: todas las víctimas recibieron postales de ataúdes, que anunciaban el día en que morirían, poco antes de su fallecimiento. Son las aparentes víctimas de un asesino en serie difícil de atrapar, cuyas muertes desafían toda lógica...

Opinión: La biblioteca de los muertos (Will Piper 01)

La novela comienza con una serie de asesinatos a manos de un asesino múltiple denominado por la prensa, "el asesino del juicio final", ya que envía a sus víctimas un día antes de asesinarlas una tarjeta donde aparece un ataúd.
Ante nosotros aparece un asesino frío, con un perfil nada convencional y que no comete dos asesinatos iguales. No sigue un patrón fijo, lo mismo le da asesinar a un broker de la bolsa que una asistenta del hogar, a un joven que a un octogenario. De no ser por la coincidencia, de que todas las víctimas reciben las postales días antes de fallecer, la policía no sabría que los casos están relacionados.

De esa forma conoceremos a Will Piper. El investigador del FBI encargado de llevar a cabo la investigación.
Esta será la trama principal, aunque la historia avanzará al tiempo que da continuos saltos al pasado.
En alguno de esos saltos conoceremos la vida pasada del agente Piper y como llegó a pertenecer al FBI. Pero eso no será lo máximo que retrocederemos en el tiempo. En otro de esos saltos la historia nos situará en 1947, tras haber finalizado la segunda guerra mundial y después continuaremos nuestro periplo. Concretamente retrocederemos hasta el S. VIII situando la historia en la Abadía de Vectis, y de ahí, un nuevo salto hasta el S. XIII.
Como podéis comprobar, toda una aventura a través del tiempo.
En esta obra el autor trata de engañarnos desde el principio y reconozco que conmigo lo consiguió. Desde el comienzo las pruebas apuntarán a uno de los personajes. Un personaje desconcertante, armado con un comportamiento de lo más extraño y eso precisamente será lo que haga que la atención del lector recaiga constantemente sobre él. Intentaremos averiguar el motivo que le lleva a actuar de la forma en que lo hace y caeremos en la trampa, estaremos distraídos, buscando la lógica sin caer en los detalles importantes. Detalles que al final convierten el argumento de esta obra en original.

La historia tendrá varios personajes.
En el S. VIII el principal protagonista será Josephus y Octavus, en cambio en lo que podríamos denominar como actualidad, el protagonismo recaerá sobre Will. En esta última etapa aparecerá un personaje secundario, Mark Shackleton, que va in crescendo y en algunas de las partes donde aparece, es donde se me ha vuelto más espesa la lectura. No voy a denominarla aburrida, pero sí me ha costado seguir el hilo en alguna ocasión, al contrario que las partes narradas en la Abadía de Vectis que las he devorado...

Como habéis visto también he hecho mención al año 1947, pero no existen hechos ni personajes relevantes en esa etapa. Son unos capítulos que sirven de nexo para enhebrar una historia con la otra y donde únicamente harán aparición personajes ambientales.

Llegados a este punto debo decir que había leído críticas donde catalogaban esta novela y las siguientes que forman esta saga, como brillantes.
A mí no me ha resultado una novela excepcional, las he leído mucho mejores... pero...
El argumento al principio parece que no aporta mucho al libro. Asesinos en serie hacen acto de aparición en cientos de novelas, pero según nos vamos acercando al final nos damos cuenta de que tenemos entre manos una obra con un argumento bastante original, aunque eso sí, algo 'conspiranoico'.
Para mi gusto la novela sufre demasiados altibajos, no me ha llegado a convencer del todo a pesar de que como os he dicho tiene pasajes muy buenos.
Aun así voy a dar un voto de confianza a la saga y continuaré leyéndola, a ver que nos depara el autor en las siguientes partes.


lunes, 22 de septiembre de 2014

Carmilla de Joseph Sheridan Le Fanu


Sinopsis:

Relato que había de forjar el arquetipo del vampiro femenino en la literatura universal, Carmilla publicado por primera vez en la revista The Dark Blue en 1871, es sin duda la obra más famosa del irlandés Joseph Sheridan Le Fanu (1814-1873).
Además del diseño que éste imprimió a su figura central, hacen del mismo una pieza maestra el nervio de la acción, el vigor de los personajes y el inquietante clima crepuscular, casi siempre a caballo entre día y noche, entre sueño y vigilia, que impregna la obra. Este precedente y sustrato indudable del «Drácula» de Bram Stoker, obra que aparecería poco menos de treinta años más tarde, figura por derecho propio como apunta Luis Alberto de Cuenca en su presentación en la galería más selecta de las letras fantásticas europeas.
«La historia es protagonizada por una joven que vive con su padre y unos pocos sirvientes en un castillo antiguo que esta localizado en la parte más apartada de Styria. La vida para Laura es muy solitaria y simple, excepto por un recuerdo de su infancia donde ella dormida en los brazos de una joven es despertada por el dolor de sentir dos agujas en su cuello y cuando la encuentran no ven a nadie más que a Laura. La vida sigue normal hasta que un carruaje tiene un gran accidente frente su humilde casa, dicho carruaje era el transporte de una elegante dama y joven hija, la cual queda desmayada y no puede concluir su viaje. Al ver la extraña situación el padre de Laura se compromete a cuidar de la joven hasta que se recupere.»

Opinión:

Nos encontramos ante un clásico del terror gótico que no dudo que os impresionará.
Más que una novela corta yo la consideraría un relato, ya que tiene 64 páginas aproximadamente y es uno de los primeros donde hace aparición la figura del vampiro, con la seducción mortal que arrastra esa figura y la atracción y repulsión que sienten al mismo tiempo sus víctimas.

Destacan la cantidad de descripciones que encontraremos a lo largo de esta breve narración.
Descripciones detalladas, que sirven para hacernos una idea clara del ambiente que rodea a la protagonista, Laura.
La sola lectura ya nos transmite soledad, oscuridad y un desasosiego que va en aumento en el lector, según avanza en la lectura.
Las simples menciones del castillo o del inmenso bosque que lo rodea, del cementerio o la iglesia gótica en ruinas que se encuentran en el pueblo abandonado, las largas distancias que separan a los habitantes del castillo de la civilización más próxima. Todos esos detalles, crean una atmósfera especial que nos infunde nerviosismo, contrastando al mismo tiempo con el gran romanticismo que fluye de las escenas donde las dos jóvenes son protagonistas.

Tras leer esta novela, dejo de tener la opinión de que Drácula de Bram Stoker, era una historia única y original, ya que Stoker se vio influenciado o se basó en Carmilla para su obra cumbre. Y con esto no digo que Drácula sea una copia, porque considero que con sus variantes, es una de las mejores novelas de terror que he leído y aún así, supera a ésta de la que os hablo hoy.

Le Fanu nos introduce en un macabro juego amparándose en la femineidad de Carmilla. El lector confía en esa figura romántica, delicada y sensible, con una gran carga de sensualidad, el estereotipo de una mujer de la alta sociedad de la época. Pero no solo cae bajo su influjo el lector, también lo hacen el resto de personajes que aparecen en la obra.

Stoker al contrario de Le Fanu nos impone una figura masculina en su narración, para de esa forma, transmitir más autoridad y dominio de Drácula sobre el resto de personajes. Los que hayáis leído Drácula habréis comprobado, que el Conde no solo impone respeto con su sola presencia.
Stoker consigue una obra más extensa, más dinámica, dando más protagonismo a todos los personajes, y es en este detalle, en lo que supera a Le Fanu. Básicamente el fallo de Carmilla recae en su brevedad, de haber sido algo más extenso, unas cien páginas habrían bastado para ascenderle desde la categoría de brillante hasta la de "Obra Maestra".

Otras diferencias entre la historia de Le Fanu y de Stoker, es que Carmilla puede vivir perfectamente a la luz del día, aunque se ampare en la noche para atacar a sus víctimas. Se podría decir que el motivo de actuar con nocturnidad, es porque la noche le aporta más intimidad y oculta su verdadera naturaleza.
Tampoco se hace mención en esta historia sobre su repulsión por el ajo, ni a que no pueda alimentarse de la forma habitual en que lo hacemos los humanos.
Otro detalle es que tampoco le hacen efecto los amuletos antivampiro, aunque si se deja entrever en una breve escena de este relato, que en el entorno de Carmilla las cruces no son muy bien recibidas.
Y por último la joven vampiro tampoco se transforma en animales, más bien toma el aspecto de un fantasma.
Para terminar, un dato curioso es que el vampiro en esta narración, está obligado a utilizar siempre su nombre terrenal, con todas las variantes posibles, no puede separarse de él, Carmilla, Mircalla o Millarca son los nombres que ha barajado a lo largo del tiempo y con los que suele presentarse ante sus víctimas. Como si por cambiarse de nombre corriese el riesgo de desaparecer o perdiese la poca humanidad que pueda quedar en ella.

Respecto a los personajes de este relato solo cabe destacar a Carmilla, la cual conoceremos a través del diario de Laura, que es quien nos relatará esta historia acercándonos al personaje de la condesa. Aunque en el personaje de Laura recae el protagonismo, la vampiro es la que cuenta con toda nuestra atención desde que hace su primera aparición.

Poco más me queda por decir, salvo recomendárosla, es un clásico que si no habéis leído os entretendrá. Yo os animo a hacerlo, ya que en una hora escasa lo habréis liquidado y siempre podéis ir haciendo comparaciones con Drácula como yo hice.


jueves, 18 de septiembre de 2014

El segundo asesino de Sarah Pinborough

Sinopsis:

1888:
Los ciudadanos de Londres se hallan conmocionados por los crímenes de Jack el Destripador, pero lo peor está por llegar... Cuando se descubre un torso en el Támesis, el doctor Thomas Bond, cirujano de la policía, comprende que hay un segundo asesino actuando en la ciudad donde, tan solo unos días antes, Jack el Destripador mató a dos mujeres en una sola noche. Pero este crimen ha sido obra de un asesino muy frío, uno que carece del característico ímpetu de Jack. Según avanza la investigación y aumentan las víctimas, el doctor Bond se pregunta: ¿qué clase de monstruo se esconde a plena vista en las calles de Londres?

Opinión:

Un comienzo pésimo...

Cuando decidí aventurarme entre las páginas de este libro, lo hice aún a riesgo de poder equivocarme. No había leído nada sobre su autora ni sobre la obra en concreto y buscando por internet, tampoco encontré ninguna opinión que la hiciese referencia, ni positiva ni negativa.

Este libro tiene un poco de todo. Pero considero que en general, la narración sufre demasiados altibajos. Cuando consigues cogerle el hilo han pasado demasiadas páginas.
Lo que más me llama la atención y que considero un error es el prefacio.
Nada más comenzar, su autora ya nos deja claro que habrá continuidad para esta novela y otro detalle, es que a lo largo de ese párrafo, no deja de justificar el enfoque que le ha dado a su obra.

"Me he ceñido a los hechos reales documentados... pero..."
"Muchos de los personajes que aparecen existieron de verdad... pero me he tomado ciertas libertades con ellos, con su vida privada y personalidad"

Evidentemente, esta aclaración podría habérsela saltado.

Los lectores sabemos que es una novela de ficción y entendemos, que es imposible describir a la perfección a un personaje por muy real que sea, también comprendemos que el incluirlos en narraciones aportan un toque más veraz a las historias.
También podría haber optado por crear personajes ficticios como hacen cientos de autores, aunque sus obras citen algún hecho real, o simplemente limitarse a decir que es una novela de ficción con base histórica...
Considero innecesario fantasear con la vida de personajes reales, como es el protagonista, el Doctor Thomas Bond, cuando ese médico gracias a sus méritos policiales se ha hecho un hueco en la historia. Cabe recordar que Thomas Bond está considerado como uno de los primeros perfiladores criminales.

Y para colmo, nos indica que los asesinatos del Torso del Támesis nunca fueron resueltos...
Con lo cual, el lector sin haber llegado a comenzar la lectura, sopesa si realmente merecerá la pena comenzar con un libro, donde sabemos desde el principio, que no se resolverá la historia y encima nos anuncia que hay secuela, donde obviamente tampoco se resolverá.
Vuelvo a lo mismo, hubiese bastado con enunciar que es una novela donde se mezcla ficción y hechos reales...
Yo opté por leerlo porque desconocía que al mismo tiempo que actuaba Jack el destripador en Londres, también lo hacía este Asesino del Torso. Desconozco el motivo por el que se dio más publicidad al primer asesino, ya que resultaban los dos igual de sanguinarios... pero ya os advierto que esa duda tampoco será resuelta.

La novela está dividida en tres partes (45 capítulos), más un epílogo brevísimo, de un párrafo más o menos, que corresponde al titular de un periódico.
Está compuesta por varios hilos argumentales con sus correspondientes personajes y entre el relevo de uno y otro, podremos leer titulares de los principales periódicos de la época.

En la Primera parte, aparece el hilo del Dr. Bond, que será nuestro protagonista y narrado en primera persona.
El del Inspector Moore encargado de la investigación y el de un personaje muy extraño, Aaron Kosminski que me tuvo desconcertada toda la primera parte de la novela.
Estos dos últimos personajes contarán la historia a través de un narrador, que parece no saber mucho más de la trama que los propios personajes.
El hilo del Dr. Bond y del Inspector Moore, corren de forma paralela, ya que comparten la investigación cada uno en su especialidad y los descubrimientos de un personaje, se complementarán con los del otro.
En este momento quiero hacer una aclaración, los tres personajes citados son reales.

La historia mejora... aunque lamentablemente tarde.

Ahora bien, aquí llegamos a la Segunda parte:
Hasta ahora no cabía destacar nada importante, aunque no era aburrida y se dejaba leer, no me aportaba nada nuevo y tampoco lograba captar por completo mi interés.
Llegados a este punto reconozco que la trama mejora. Pero debo deciros, que nos encontramos ya en el capítulo veinte, lo que supone tener leído un 40% del libro.

En esta segunda parte aparecen nuevos personajes con sus hilos propios.
De esta forma podremos leer el diario íntimo de James Harrington, que como no podría ser de otra forma aparece narrado en primera persona.
Este personaje aparece citado en algunas ocasiones en la primera parte, pero sin ninguna actuación de relevancia. Parece un personaje ambiental, pero según avancemos comprobaremos nuestro error.
James, inicia su narración del diario en 1885, como veis años antes de que comiencen los sucesos en Londres (1888). Este hilo irá dando pequeños saltos hacia adelante, hasta alcanzar al resto de personajes en la narración y mezclarse con ellos.
Un personaje que adquiere intensidad según avanzan las páginas de esta obra y que llegado el momento, parecerá que intenta ocupar el lugar de protagonista, arrebatándoselo al Dr. Bond.
Las piezas en este momento comenzarán a encajar e irán descubriendo ante los ojos del lector una narración que termina por enganchar, aunque la lectura está ya muy avanzada cuando esto sucede.
En uno de esos saltos nos posicionaremos en el París de 1886 y comprenderemos por fin, el significado del primer capítulo que se había quedado un poco descolgado en la trama y alejado por completo de la historia principal.

También hará aparición otro personaje Elizabeth Jackson.
Un personaje al cual se le da una importancia asignándole un hilo propio y del cual se podría haber prescindido totalmente, porque no aporta absolutamente nada a la trama.
Cuando Elizabeth hace aparición en esta segunda parte, los personajes comenzaran a moverse alrededor de su historia y podrían haberlo hecho de igual manera sin darle un protagonismo inmerecido.

En esta parte, algunos pasajes hacen recordar a Drácula de Bram Stoker y no solo por la ambientación Victoriana, también por la forma de narrar y algunos perfiles de los personajes.

En la Tercera parte, el protagonismo recae por completo sobre Dr. Bond y de esta forma llegamos al final.

Como he dicho mejora desde la mitad pero tampoco es para tirar cohetes.
La mezcla de ficción con los asesinatos de Jack el destripador y del asesino del Torso no la convierten en una novela única, es tan solo una obra más de ficción entre muchas y sinceramente, no se de donde va a sacar para hacer su anunciada secuela.
Todos los hilos quedan cerrados en lo que a ficción se refiere, obviamente, al no encontrarse jamás al asesino, al igual que ocurrió con Jack el destripador, la leyenda creada alrededor de esos personajes da para mucho y ya sabemos, que la imaginación de los escritores es inagotable.
En lo que a ficción se refiere, hay un detalle en uno de los personajes que sí podría dar para continuar en otro libro. Pero, eso también sería sacar demasiada punta al lápiz.
De todas formas, para ver como se resuelve este enigma creado alrededor de la secuela tendremos que esperar a que sea publicada en castellano y no estoy muy segura de si me pondría a leer la continuación. Aunque sí me pica la curiosidad por saber que derroteros tomará la nueva entrega tampoco me ha enganchado tanto como para no poder vivir sin leerla.