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miércoles, 5 de junio de 2013

El corazón helado de Almudena Grandes


Sinopsis:

El día de su muerte, Julio Carrión, poderoso hombre de negocios cuya fortuna se remonta a los años del franquismo, deja a sus hijos una sustanciosa herencia pero también muchos puntos oscuros de su pasado y de su experiencia en la Guerra Civil y en la División Azul. En su entierro, en febrero de 2005, su hijo Álvaro, el único que no ha querido dedicarse a los negocios familiares, se sorprende por la presencia de una mujer joven y atractiva, a la que nadie había visto antes y que parece delatar aspectos desconocidos de la vida íntima de su padre. Raquel Fernández Perea, por su parte, hija y nieta de exiliados en Francia, lo sabe en cambio casi todo sobre el pasado de sus progenitores y abuelos, a los que ha preguntado sobre su experiencia de la guerra y del exilio. Para ella sólo una historia permane-ce sin aclarar: la de una tarde en que acompañó a su abuelo, recién regresado a Madrid, y visitaron a unos desconocidos con los que intuyó que existía una deuda pendiente. Álvaro y Raquel están condenados a encontrarse porque sus respectivas historias familiares, que son también la historia de muchas familias en España, desde la Guerra Civil hasta la Transición, forman parte de sí mismos y explican además sus orígenes, su presente. También porque, sin saberlo, se sentirán atraídos sin remedio. Con El corazón helado Almudena Grandes nos entrega sin duda su novela más ambiciosa, en la que traza a través de dos familias un panorama emocionante de la historia reciente de nuestro país, y también del conflicto de las nuevas generaciones con la memoria.

Opinión:

Que difícil es dar una opinión que haga justicia a una novela tan perfecta.
Todo lo que pueda decirse sobre la forma de expresarse de la autora sonará banal y superfluo, ante la belleza que Almudena Grandes nos regala con su prosa.

Describe a la perfección los sentimientos, el comportamiento humano -ese que en ocasiones nos resulta tan complicado llegar a entender- nos deleita con situaciones extremadamente detalladas que inducen al lector a tomar partido, a emocionarse.
Pero lo que más logra sorprenderme son los diálogos.
Coherentes, reales hasta tal punto, que olvidas mientras lees, que lo que tienes entre manos es una novela.

Las descripciones de los personajes son sumamente precisas, creando un perfil tan exacto de cada uno de ellos, que te pasas el libro intentando ponerles rostro.
La autora se esmera en ello, los define a la perfección, pero sin caer en el aburrimiento.
Los protagonistas poco a poco irán tomando forma en nuestra cabeza, mostrándonos rasgos de un carácter que les hará únicos e inolvidables, hasta configurar un elenco de personajes dignos de las mejores sagas familiares.

La novela la componen varios hilos argumentativos cuyas historias y personajes irán cruzándose a lo largo de los años y de las páginas de esta obra.
La trama se irá desgranando lentamente a través de las vidas de los protagonistas, creando en el lector una ansiedad casi obsesiva por averiguar la verdad que se encuentra oculta en la historia.

La forma de escribir de Almudena Grandes puede resultar compleja, digamos que no resulta sencillo seguirle el ritmo.
La historia cuenta con infinidad de personajes, este detalle hace que al principio nos resulte un poco lioso seguir la pista a todos ellos.
Lo más sencillo es hacer un pequeño árbol genealógico para tener una idea clara sobre quien es cada personaje.
Pero sin duda, tener este libro entre manos es un privilegio capaz de llenar las horas, ya que se pierde la noción del tiempo entre sus páginas y que logrará tocarnos en lo más profundo del corazón.

Una obra que nos acercará a la historia más triste de nuestro país, cuyos orígenes habrá que buscarlos en los comienzos de la Guerra Civil.
Entre sus páginas nos encontraremos con secretos, codicia, traiciones, pero sobre todo mucha historia que nos enseñará que en todos los armarios duerme algún esqueleto.
Para terminar diré que es una Gran Novela.
Una narración sublime que no tiene nada que envidiar a otras novelas como Cien años de soledad o la Casa de los espíritus, incluso me arriesgaría a decir que se encuentra muy por encima de ellas.
Un libro que nos regala un viaje a través de nuestra historia que no debemos desaprovechar, ya que nos sorprenderá a la vez que nos emociona.